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Seokjin ya no quería estar todo el tiempo en su departamento, ya no veía como tentación la idea de pasar todo el día en pijama en silencio acariciando a su gato.

Seguían existiendo días en los que prefería la calma y seguridad que le daba su hogar.
Eso siempre sería así.
También seguían existiendo días malos en los que se cerraba en su mundo interior y no permitía que nadie pasara.
Estaba trabajando con su psicólogo para mejorar eso. Estaban trabajando duro y eso mismo muchas veces lo hacia cansarse de todo. 

Pero le alegra saber que ya no hay tantos días malos, que cada vez parecen ser menos y que se está esforzando verdaderamente para dejar atrás sus días más oscuros.

También sabe que no debe depender de Jungkook.
Se lo advirtió su psicólogo. El aprender a no idealizar a las personas y el no volver a depender emocional de alguien.
Debe ser cuidadoso en cómo se relaciona con el chico.

Esta aún dejando atrás a Soo-ah y si bien ya descubrió que hace mucho no había algo llamado amor entre los dos. También sabe que esta más solo que nunca.
Dejo a Soo-ah y descubrió que no tenía amigos, conocidos, ni colegas.
Y los más parecido a un amigo es Jungkook por lo que no debe recargar toda la necesidad acumulada de sociabilizar que tiene en el chico que recién conoce, que es menor y además que es su alumno.

Quiere volver a ir al cine, también quiere visitar algún parque de atracción, ir al teatro, quizás al museo, ir a cenar algún lugar con buenas referencias y hasta ir a un karaoke y cantar hasta que se quede sin voz.

Y si bien sabe que Jungkook es amable y posiblemente si le dice que quiere hacer todo el eso, el chico saque tiempo de donde no tiene para acompañarlo.
Pero no quiere eso.
Y se consuela pensando en que no hay nada malo en ir a lugares solo. No hay que temerle a la independencia y la satisfacción de poder entretenerse uno mismo.

Hoy iría al cine solo. Sería su primera vez. Estaba nervioso y había dudado mucho en sí debía ir. Al final el día anterior a último momento había sacado la entrada.

Saldría de la Universidad temprano, tomaría el autobús, compraría algo para comer y vería la película.
Ese era plan. Así lo tenía pensado.

Hasta que le llegó un mensaje de Jungkook pidiendo ayuda para el examen que tenía en unos días para Soo-ah.
Seokjin sabía que sería una evaluación difícil. El mismo la había creado siguiendo las indicación que por correo le había mandado el detestable de su ex novio.

Podía negarse. Claro que podía hacerlo.
La evaluación era al final de esa semana aun quedaban días para ayudarlo.

Pero lo cierto es que acepto la solicitud de ayuda casi sin pensarlo y dejo la oportunidad de ir al cine solo para la próxima oportunidad.
Quizás era una acción cobarde, pero ya se arrepentiría de eso en otro momento.

Así que ahí estaban ahora. Llevaban mas de dos horas estudiando.
Jung Hoseok se había unido también hace una hora a preparar sus próximos exámenes finales.

No cruzaban muchas palabras entre todos. Quizás leían algún párrafo que no entendían, sacaban conclusión de algún autor o simplemente destacaban o escribían aquello que sería necesario.

Ambos chicos le preguntaban cuando tenían dudas y anotaban cada palabra que salía de sus labios.

El descanso llego casi 15 minutos después cuando el estómago de Hoseok sonó ruidosamente avisando que no había comido por lo que avergonzado se ofreció ir a comprar a la cafetería.

- Gracias por ayudarnos - Jungkook había estado particularmente silencioso durante varios días. Había bajado la dosis de videos chistosos y memes que enviaba a diario - Disculpa por no avisarte antes, pero hoy estaba viendo todo lo que había que estudiar y me agobie de solo pensar en la idea de reprobar - y pudo notar que cuando Jungkook llegó lo hizo con muchas cosas y no tenía ni idea por donde partir, parecía perdido entre la inmensidad de sus apuntes.

- Te ves tenso - durante todo este tiempo estudiando había mordido más de lo común el lápiz, también se había mordido el labio en señal de preocupación y no había que ser un experto en lenguaje corporal para saber que el chico estaba incomodo - ¿Qué tienes? - se atrevía a preguntarle.

- Soy así en época de exámenes finales - le contaba dejando de lado los lápices que tenía en la mano - me aterra pensar que reprobaré todo - había comprobado el mismo que el chico hace unos días que venía estando tenso - es dramático lo sé, pero no lo puedo evitar.

Seokjin lo tenía como alumno, sabía que el chico entendía todo y la mayor parte del tiempo tenía la respuesta - eres de esas personas que dicen que reprobaron y después cuando entregan las notas aprobaste por lejos - tuvo muchos compañeros así en el pasado.

- Creo que soy de esos - aceptaba Jungkook con vergüenza - pero no lo hago con intensión de verdad pienso que voy a reprobar - se justificaba el chico.

- Son mi tipo de alumno menos favorito - no era del todo verdad, pero disfrutaba de ver el rostro de indignación que se dibujaba en las finas facciones de Jungkook. Le gustaba comprobar que había dejado atrás sus facciones tensas que tuvo a lo largo de estas dos horas.

- Perdí puntos de genialidad - susurraba y con el ceño fruncido parecía más joven.

- Hay fiesta el sábado - cambiaba de tema drásticamente Jungkook luego de unos segundos en silencio - para celebrar el fin del semestre - le contaba y agregaba más bajito casi en un susurro - ¿Vienes?

La idea de las fiestas era un tema en el que pasaba por su mente más de lo que quisiera reconocer.
Llegó a Seúl siendo joven y con una libertad que no sabía que tenía.
Pudo aprovechar de ir de fiesta, vivir la experiencia universitaria de la que tanto se habla.

Y hay días en los que piensa que no disfruto del todo esa experiencia. Se atrapó en una relación donde ir a fiesta a algún lugar barato con tragos de dudosa legalidad era algo impensado y hasta juzgado por Soo-ah.

No podía culparlo de todo. Pero habían días como hoy en que el arrepentimiento por perder tantos años en esa relación eran más pesados que cualquier otro día.
Sus mejores años lo pasó en reuniones y cenas con caros vinos que no disfruta.
En actividades con amigos de Soo-ah donde solo era un trofeo. Debía verse siempre lindo, radiante, fino y joven.
Muchas veces se le había dicho que entre menos hablar más hermoso de veía.

- No creo que sea una buena idea - fue lo que se limitó a contestar.
Había perdido gran parte de la alegría de su día por culpa de sus pensamientos.
La mayor parte del tiempo el era su peor enemigo.

- Ya no serás mi profesor - intentaba convencerlo Jungkook. Y sabía que el chico lo hacía sin intensión pero había dado en otro tema crítico que siempre ocupaba la mente de Seokjin ¿Qué haría ahora sin trabajo?

- ¿Cuándo terminas aquí? - preguntaba Jungkook.

- Dos semanas después de ustedes - quedaba tan poco tiempo, pero se veía tan lejano a la vez.
Estaba aterrado por quedar sin trabajo, pero la satisfacción que sentía por no ver más a Soo-ah era lo que ocupaba como impulso cuando sentía que sus pensamientos se estaban volviendo más oscuros y negativos.

- Y serás libre - comentaba Jungkook con una gran sonrisa.

- Desempleado, pero libre - y no podía evitar también darle una sonrisa como respuesta.

- Llegó el café - y fueron varios minutos después hasta que llegó Hoseok cargado con varios pasteles y café en sus manos - había una fila gigante - decía mientras comenzaba a repartir lo que había pedido cada uno.

Y como si el tema de la fiesta no hubiera terminando Hoseok lo volvió a sacar a colación - Señor Kim que dice de la fiesta el sábado - le preguntaba mientras sacaba un trozo del pastel de Jungkook que no le había gustado por ser muy dulce.

- Lo pensaré - fue todo lo que pudo contestar por ahora.
Aun quedaban días para decidir qué hacer.

Teach Me ( KookJin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora