24-

792 173 58
                                    

- Sabía que vendrías - le susurra suavecito antes darle un beso en la mejilla. Un beso que hace que el estómago de Seokjin explote de alegría.
Lo extrañaba tanto.
Quiere llorar de la emoción.
Se siente amado entre esos brazos, querido con cada beso que deja en su cuerpo y excitado por saber hacia dónde se dirige cada beso que va dejando por su cuerpo.

Fueron semanas largas que lucho consigo mismo por no caer de nuevo, pero siempre supo que todo terminaría exactamente donde estaba ahora.

Esas manos lo conocen tan bien, saben donde tocar, donde apretar para que se deshaga en gemidos que son amortiguados por la suave almohada que tiene ese olor a perfume tan conocido, perfume que eligieron juntos y que cada vez que lo huele le recuerda los lindos momentos que tuvieron juntos.

Quiere quedarse por siempre en esas caricias suaves que tratan su cuerpo como un tesoro, no quiere pasar al otro momento donde todo es fuerza bruta contra su cuerpo.

Quiere sentirse amado y feliz con cada caricia. No es sólo tener sexo es el sentimiento que logra cada vez que sus cuerpos son uno y es la felicidad que parece alcanzar todo su cuerpo dejando en un pequeño rincón la soledad que casi se apoderaba de su cuerpo.

Hace tiempo Soo-ah no era tan suave y delicado con él. Le recuerda las primeras veces donde sentía que camina sobre nubes de lo enamorado que estaba.

- Esta cara no puede quedar solo en mi memoria - le dice subiendo hasta su boca donde deja un fuerte beso - déjame grabarte amor - y así como se siente amando y excitado todo se reduce a nada en segundos.

Y solo con esa frase todos lo cálido que sentía en ese momento desapareció y dio paso a una bruma y pesadez que comenzó acompañar su respiración.

¿Grabado? Se cuestiona y los recuerdos comienzan a invadir su mente.

Ya no quiere más besos, no quiere que sus manos lo toquen e intenta forcejear con un cuerpo que parece cada vez más pesado sobre él, que le susurra lo zorra que es por caer de nuevo en su cama y que lo obliga a estar quieto en la cama porque Seokjin solo puede ser de él y de nadie más.

Sí no eres mío, no serás de nadie Seokjin recuérdalo. Y no necesita recordarlo porque ya lo sabe y Soo-ah se encarga de repetirlo en cada momento.

Ahora quiere llorar de miedo, de pánico, pero nada de eso lo puede hacer. No puede moverse y solo parecer ser un espectador en todo lo que le planea hacer Soo-ah.

Y cuando logra abrir los ojos y siente el sudor correr por su cuerpo. Se siente confundido y no puede evitar tocarse y comprobar que aún tiene su pijama.

Tantea a través del aire hasta encender la luz de la lámpara y comprueba que sigue en su habitación que su gato está parado en una esquina de la cama observándolo y que todo lo que pasó solo ocurrió en su dormida mente.

- Fue un sueño - susurra para si mismo y se acomoda al medio de la cama intentando calmar su respiración y las lágrimas que quieren salir.

No duerme más en lo que queda de noche, prende la televisión y solo se dedica a cambiar de canal en canal, mientras acaricia a su gato que está durmiendo sobre sus piernas.

Sabe que en unas horas más debe levantarse. Debe fingir que es el seguro profesor Kim.
Una seguridad que sólo logra cuando da clases y que le gustaría tener para más aspectos de su vida diaria.

Sabe que probablemente se topara con Soo-ah por los pasillos y que deberá fingir que está viendo el teléfono o hablarle a algún alumno para ignorarlo.
Sus días en la universidad parecen repetirse y nunca pensó que podía ser tan monótono.

Todo lo que tenía previsto que pasara, pasó.
Dio su clase con una falsa seguridad que nadie parece notar, vio por los pasillos a Soo-ah, pero esta vez no lo pudo ignorar y solo se limitó a saludarlo cordialmente.

Esta vez no tiene ganas de almorzar por lo mismo decide irse a su lugar y
Puede distinguir a Jungkook desde la distancia y no lo quiere ahí.
Quiere estar solo.
Necesita estar solo.

No quiere escuchar las historias infinitas de Jungkook, no quieres ayudarlo a estudiar y si es sincero el problema no es con Jungkook es simplemente que parece que cada suspiro que da se vuelve mas difícil con el pasar de los segundos.

- Hola profesor - le da la bienvenida Jungkook dejando de mirar su celular.

Y Seokjin lo quiere saludar, quiere ser cordial con el chico, pero este no es el momento adecuado.

Durante este tiempo el chico se ha comportado de forma amable, si bien comenzaron con una relación un tanto negativa, eso a cambiado y ambos parecen cómodos con esa seudo amistad que a nacido casi por obligación ya que el destino parecer juntarlos constantemente.

- ¿Está enojado conmigo? - pregunta Jungkook y mirándolo con grandes ojos que demuestran inseguridad.

Seokjin no está enojado, ya no le importa que no usará honoríficos y quizás hasta se puso muy a la defensiva y sabe que debería explicarle todo eso a su alumno, pero las palabras parecen no salir.

Seokjin se limita a negar, pero parece que esa respuesta no calma a Jeon ya que siguen insistiendo - Fue porque no use honoríficos - y la insistencia por hablar en este momento lo esta poniendo nervioso.

- Quiero estar solo - es abrupto cuando lo dice, puede distinguir la incomodidad que quedó en el aire por sus palabras dichas.

- Disculpa Jungkook es solo que estoy harto... - y se corta a mitad de explicación.
Debería explicarle que su día partió mal por una estúpida pesadilla, debería decirle que esta enojado por dormir poco y que parece que sus días se repiten, debería decir que tiene un temor casi estúpido por ir la próxima semana a su cita con el psicólogo.

Y la respuesta a sus pensamientos llega de inmediato. Por supuesto que no debe decirle nada de eso.
Es solo su alumno y sabe que el chico se acercó a él por pena y nada más que eso.

Por otro lado prefiere apelar al lado empático de Jungkook - ...Por favor déjame tener este lugar para mi - se lo pide mientras deja su mochila sobre la mesa y se sienta frente a Jungkook - aquí encontré seguridad y tranquilidad y créeme que necesito sentirme seguro en este momento - es todo lo que esta dispuesto a compartir con Jungkook y agradece que el chico lo comprenda y sin decir nada comience a tirar todo dentro de su mochila en silencio.

Y se van sin despedirse. Solo levanta su mochila y abandona el lugar.

Y Seokjin acaba de alejar a la persona que parecía ser lo más cercano a un amigo que tenía.
Y quizás que sus ex amigos ya no le conteste los mensajes no es culpa de Soo-ah como siempre pensó.
Quizás es el mismo Seokjin quien no sabe cómo conservar la amistad de las personas y se empeña por alejarlos a todos de su lado.

Teach Me ( KookJin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora