45-

888 170 44
                                    

Seokjin no pisaba una sala de karaoke hace años. Habían pasado tantos que no recordaba la última vez que había ido a una y que se había reído tanto como lo estaba haciendo ahora.

En general no recordaba cuando había sido la última vez que había reído tanto ¿será posible que le salgan músculos en su abdomen por tanto reírse?

Sí bien no recordaba la última vez que había ido, si recordaba que se iba con varias personas.
Quizás tu grupo de amigos, tu familia, compañeros de trabajo.
Eso ayudaba a que saliera más económica, pero también a que fuera más divertido.

Esta vez solo eran dos personas dentro de la cabina número 7.

Llevaban poco menos de una hora y ya sentía que se estaban quedando sin voz tanto cantar o gritar como lo estaban haciendo hasta ahora.
Estaba resultando casi terapéutico.

Jungkook había insistido en que habían varios motivos para celebrar y que no había mejor forma que bebiendo y cantando como si estuvieran dando un concierto.

Ninguno cantaba particularmente bien, ninguno llegaba a la nota altas y claramente ninguno en su vida pasada había sido un rapero, pero eso solo lograba hacer que fuera mas divertido. El inventar letras en ingles o coreano era parte de lo entretenido. 

Por eso ahora tenía a Jungkook gritando a través del micrófono - ¡Otra, otra! - seguía diciendo el chico y lo acusaba de cantar mal y no llegar a las notas altas y que por eso había perdido la apuesta - sorbos más largos - le exigía y había una faceta juguetona y exigente que no conocía muy bien de Jungkook, pero que sin dudas le estaba gustado.

- Esta muy fuerte - se quejo Seokjin luego de dejar su vaso vacío y se acercaba al sillón que estaba apoyado en la pared contraria.

- ¡Hay que celebrar! - esta seguro que lo animado de Jungkook no era por el alcohol.
Llevaban menos de tres vasos, por lo que sólo era liberación de serotonina por estar cantando y feliz.

- Necesito sentarme un segundo - le pedía Seokjin y comenzaba a comer de los bocadillos que habían pedido junto con las botellas de alcohol.

- Yo te cantaré entonces - y Jungkook no perdió tiempo en escoger una nueva y antigua canción y comenzó a cantar.

Perdió la cuenta alrededor de la canción número 15.
Siguieron haciendo batallas y se alegro al comprobar que le pudo ganar varias veces a Jungkook haciendo que su orgullo se hiciera más grande.

Al final ambos agitados se sentaron en el sofá con los vasos en la mano, mirándose y escuchando la canción que habían dejado reproduciendo.

- Por tu nuevo semestre - le decía Seokjin acercando su vaso al de Jungkook y haciendo un pequeño brindis.

- Por tu nuevo trabajo - respondía Jungkook y recordaba que esa era la razón por la que estaban en esa sala de karaoke.

- ¿Estas nervioso? - había conseguido una entrevista hace unos días.
Ya pensaba que no había posibilidad de que lo llamaran, pero no fue así.
Había estado lavando los juguetes de su gato cuando le sonó el celular contestó y era para una entrevista de trabajo al otro día.

Y así fue como en menos de una semana, después de dos entrevistas, acordar su horario y su salario era que tenía un trabajo de nuevo.

Atrás quedaban sus días encerrado en el departamento, durmiendo a deshoras y pensando en que haría si no lograba pagar la renta el próximo mes.

- Emocionado - contestaba a la pregunta de Jungkook y agregaba - me gusta leer y trabajar en la biblioteca... Solo no sé, me parece algo nuevo, solo estoy emocionado por ya comenzar - solo era fascinante comenzar en un lugar donde nadie lo conocería.

Teach Me ( KookJin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora