ANTONIO*****
Desde que vi a Adam acercarse a Letizia me dio mala espina, hace un corto tiempo que no la veo en la fiesta.
-Ana viste a tu madre -ella negó.
-Creo que fue a los jardines, ya debe estar regresando.
Me acerque y le di un beso en la frente.
-No vayas a ir a ningún lado sin guardias esta bien.
Ella asintió y se fue con sus amigas. Busque a Amelia y me acerque a su mesa donde se quedaba mi otra hermana América, sus hijos y amigos.
-Amelia puedes vigilar a Ana por favor, voy a salir a buscar a Letizia, tenemos que despedir a algunos invitados.
-Claro, no hay problema.
Camine con dirección a los jardines, pero algo me decía que fuera por el camino de los pasillos, camine tranquilamente, pero cada vez que me acercaba a una curva, los pasillos estaban sin iluminación, me pareció raro, acelere mis pasos.
Cuando me acerco puedo ver a Adam acercándose a Letizia y lo que más me molesto fue ver que la estaba agarrando de la mandíbula fuerte. La sangre se me calentó y apreté mis puños.
-Suelta a mi esposa -grite, cuando vi que la iba a besar.
Me acerque furioso y le di una buena derecha que le boto al suelo, antes de lanzarme encima suyo, trate de canalizar mi ira y decidí llamar a los guardias.
-Cabellos dorados -escuche su voz muy baja de Letizia y me gire.
La vi caer y antes de que su cuerpo chocará contra el piso, reaccione sujetándola la cargue en mis brazos, se había desmayo.
-Guardias -ordene -llévenlo ante el jefe de guardias él sabrá que hacer.
Asintieron y se fueron llevando al prisionero.
Sujete el cuerpo de Letizia con cuidado y al querer acomodar su cabeza en mi hombro, me di cuenta de que su rostro estaba golpeado.
-Hijo de... -calle antes de soltar una palabrota -Lo siento por haber llegado tarde.
La lleve a su habitación y con cuidado la deje encima de su cama, fui al baño y saque un botiquín, agarre el bote de alcohol y algodón.
Lo lleve a su nariz y después de unos segundos empezó a reaccionar.
-Déjenme dormir -se quejo y se dio la vuelta encogiéndose en su cama.
Me reí muy fuerte por su actitud, cuanto extrañaba verla así.
-De que te ríes -dijo abriendo sus ojos y sobándose sus ojos.
Yo simplemente sonreí y ella paso su mano por su rostro mientras se sentaba en la cama, puso una cara cuando topo el golpe que recibió en su rostro.
Su caro cambio de sonámbula a una que me dio mucho terror, esos ojos llenos de ira.
-Ese maldito -se paro de su cama de golpe -donde está, quiero darle su merecido.
Camino furiosa hasta la puerta y la detuve antes de que saliera por la puerta.
-Letizia cálmate -la abrace y dejo de luchar en soltarse.
Escuche unos sollozos y me preocupe.
-Te duele muy fuerte donde te golpeó -negó frenética.
-Eso no es nada con lo que paso ella.
¿Ella?, aparte su cabeza de mi pecho para ver su rostro, sus hermosos ojos estaban muy rojos.
-¿Qué te dijo para que estés así?
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La reina de la máscara
RomanceEl tiempo que dejas algo y a sido lo suficientemente largo no sabes lo que pudo haber cambio, pero ella eso lo sabía bien, entreno con éxito a su sucesora, su deber está completo y su país de origen en un estado mejor que bueno. Olvidó un pequeño de...