Capítulo 14

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Alev

Salí de la fortaleza a las caballerizas muy enojada estaba que me estallaba la cabeza, no paro de caminar hasta que siento una mano que me toma del brazo y me da vuelta.

-¿Qué mierda crees que haces?- espeta entre dientes.

Yo no se si él es así de idiota o le dieron petróleo de bebé.

-Echándote de mis tierras, ya tus amigos dieron el mensaje y claramente voy a responderlo y el doble- respondo quitando su mano de mi brazo.

-Yo no tengo que ver con esto, además tu misma te lo buscaste por mandar a tu hermanito a perseguirlos.

Entonces si le avisaron y tiene el descaro de decir que no tiene nada que ver con esto.

-¡Ellos asesinaron a mis padres!.

-Y ya pasaron seis años ya es momento de que lo superes- da un paso hacia mi pero se detiene cuando mi mano conecta con su mejilla logrando que voltee su rostro.

-Cállate no sabes...

No me deja terminar si no que me jala del brazo hacia él y estampa sus labios contra los míos, me intento zafar de cualquier modo pero me sostiene de la cintura y el cuello firmemente impidiendo que me separé.

-Déjame...- digo contra sus labios pero no cede si no que sigue intentando lograr que le permita profundizar el beso, pero no puedo caer. Muerdo su labio inferior y por fin me suelta, puedo ver que le quedó un poco de sangre.

-Loca y salvaje, me gusta- dice sonriendo mientras se limpia la sangre con su pulgar-. Pero no te desaras de mi tan fácil.

-Lárgate Massimo.

-Lo siento pequeña Alev pero no me iré- refuta encogiéndose de hombros.

<<Pequeña Alev>>

-No me vuelvas a llamar así- digo dando un paso hacia tras por lo que él da dos hacia adelante.

-¿Cómo? ¿Pequeña Alev?- pregunta confundido.

-Cállate, no me digas así, jamás en tu vida te dirijas a mí con ese apodo- gruñó tensando la mandíbula.

-¿Qué te pasa?.

-Solo no me vuelvas a llamar así, JAMAS- digo mirando el cielo- ahora Massimo en cerio lárgate de aquí, nada consigues quedándote en tierras donde me es muy fácil asesinarte y donde puedo inventar una historia tan creíble que no tendría problemas por tu muerte- espeto mirando sus perfectos ojos azules.

-No tengo nada que ver con esto y te dije que me iría mañana- refuta acercándose a mi- y si tan fácil te resulta matarme hazlo de una vez.

-Supiste que Ruslam fue a encontrarlos y dices que no tienes nada que ver aun sabiendo que estas informado de todo- digo dándole una mirada cansada-. Y si te vas mañana temprano que más da adelantar el viaje.

-Si, sabía de la persecución pero no sabía que atacarían tan rápido...

Se detiene al darse cuenta de lo que acaba de decir.

-Entonces pensaban atacar- digo formulando un plan en mi mente para contraatacar- perfecto pues estaré lista para cualquier ataque. Por ahora mejor ya vete de aquí.

-Eres demasiado terca- dice tomando el puente de su nariz.

-Por ello he llegado a donde estoy, por no dejarme convencer tan fácilmente- asiento sonriendo para empezar a caminar devuelta a la fortaleza pero me detiene su mano en mi cintura acercando su boca a centímetros de mi oído.

La Reina del Infierno [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora