Capítulo 31

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¡Felicidades!

Carlo

Hoy hace dos años llegó a mi vida la persona que más amo. Mi hijo, Alessandro un pequeño travieso que le encanta estar en todo lado no hay segundo en que no esté en constante movimiento.

Siendo sincero no me había imaginado ahora con un hijo pero no me arrepiento de tenerlo ya que es la persona que es mi prioridad ante todo y haría todo por él.

Cuando me dieron la noticia quede en shock totalmente no sabia que hacer, si sería un buen padre o no. Todo el tiempo me cuestionaba ya que mi vida y mi trabajo no es precisamente linda además de que conlleva muchos riesgos; pero cuando nació y lo sostuve en mis brazos supe que no importaba el maldito riesgo nada ni nadie le haría daño mientras yo esté con vida.

Por su cumpleaños número dos invite a amigos y a personas cercanas de la isla. La celebración se organiza en un casa segura que tengo bajo mi poder, por pertenecer a la mafia (cosa que nadie sabe) se debe realizar algo pequeño y no tan duradero.
Supe que Alev se encontraba aquí en Sicilia así que la invite y como esperaba ella acepto feliz de conocer a mi pequeño y eso me hace sentir bien. Solo espero que con la presencia de Massimo y Alev no se pongan las cosas difíciles.

—Siete pronti?— me acerco al pequeño que esta sentado en el suelo jugando con un carro de juguete azul "¿Estás listo?".

Va a todos lados con él.

Asiente sonriendo levantando sus brazos para que lo cargue, lo cual hago agachandome para tomarlo entre mis brazos.

—Tanti auguri a te— le digo mientras beso su cabeza "Feliz cumpleaños a ti".

Salimos de la residencia Greco hacia la casa donde será su pequeña fiesta. Nos toma diez minutos en llegar y la mayoría de las personas que invite ya están presentes, cuando nos ven llegar empiezan a felicitar a Alessandro y como aún no sabe hablar bien él solo se ríe inundando mis oídos con lo que más me gusta escuchar. Entramos y lo dejo en el salón donde se encuentran otro niños jugando mientras superviso que no haya ningún problema.

Entro a una oficina donde tengo monitoreado absolutamente todo y puedo ver cada movimiento que hay ya sea cerca o lejos de la casa.

—¿Todo en orden?— escucho en la puerta la voz de Massimo, asiento sonriendo acercándome a él.

—Si, todo en orden— estrecho su mano a modo de saludo— Pensé que no vendrias— digo mientras salimos de la oficina la cual cierro bajo llave.

—No iba a venir pero quería distraerme un rato.

—Me parece bien.

—¿Supiste quién nos vino a visitar?— pregunta mientras caminamos hacia el jardín.

—Si de hecho la invite— respondo a lo que él me da una mirada incrédula.

—¿Disculpa?.

—Quería conocer a Alessandro y no podía negarme.

—Fantástico ahora la loca también vendrá— dice con sarcasmo soltando un bufido.

—¿Loca?— pregunto confundido al oír como la llama.

—Si, loca.

—¿Por qué loca?.

—No ves lo que paso en Grecia. Casi se lanza de un balcón y para colmo dormida, y ahora resulta que sufre de ataques de pánico...

—¿Qué? ¿Cómo que ataques de pánico?— me planto frente a él.

—Acabó de mencionar lo del balcón y a ti te sorprende que diga que ¿sufre de ataques de pánico?.

La Reina del Infierno [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora