Una reina sin medida (Plus size Queen #1)

Capítulo 29. Sucio y retorcido

♚Andrew♚ 

Solté su rojiza cabellera y está cayó como cascada sobre su espalda, enrede mis dedos en su cabello y los hale despacio dejando expuesto su cuello. Deslice mi lengua despacio por este mientras hacía movimientos con mi miembro y un fuerte gemido escapo de sus labios, sabía que no podíamos tardar mucho más, aunque me moría por recorrer toda su piel despacio y navegar sin prisa por su cuerpo dejando que el mismo me sedujera.

—Te quiero Christina Bradford —susurre sobre sus labios—te quiero solo mía, te quiero exclusivamente para mí, porque eres única y sin comparación alguna—me moví dentro de ella y sus dedos se clavaron en mi espalda— te quiero como no querré a otra mujer jamás—confesé, porque era verdad. Nunca iba a querer a nadie de la manera en que la quería a ella.

Cubrí sus labios con los míos para ahogar el grito de placer que estaba próximo a escapar de sus labios mientras ella se entregaba al placer. Aceleré mis movimientos y la embestí con más fuerza mientras me derramaba dentro de ella. Deje otro beso sobre sus labios mientras y salí de su vagina despacio, me subí el pantalón; acomode su vestido y le ayude a bajar de aquella mesa de escritorio.

—Recuerdo todo—. Dije aclarando la duda que daba vueltas en su cabeza, era más que evidente en su mirada.

—Andrew—coloque uno de mis dedos sobre sus labios y pude ver la angustia arribar a sus ojos.

—Quiero que confíes en mí. Voy hacer todo para que estemos juntos de nuevo, te lo prometo—le di un último beso antes de salir de aquella estancia y ella asintió ante mis palabras.

Iba a cumplir aquella promesa sin importar lo que tuviera que sacrificar, volvería a estar con ella por sobre todas las cosas y haría cumplir mis palabras.

♚♚♚

Convoque a los miembros del Parlamento, la familia real, Los Wesley y algunos de los miembros más importantes de todo Canterbyll para una reunión extraordinaria en el auditorio. Mi padre no se contuvo a cuestionarme sobre el asunto, pero como debía decidir pronto el día de la boda y coronación pude escudarme tras aquello para no poner en evidencia mi verdadera intensión. El sirviente me coloco la chaqueta y escuchamos un alboroto del otro lado de la puerta que nos distrajo en aquel momento. Pude reconocer fuerte y clara la voz de mi hermana.

—Su alteza real quiere pasar a verle—. Me comunico uno de los guardias y le hice un gesto con la mano para que le dejara pasar.

—Puedo terminar—le dije al sirviente y este se marchó al tiempo que mi hermana entraba en la habitación con fuertes pisadas.

— ¿Qué crees que haces?—me cuestionó, me acerque a ella y le tome de las manos. — ¿En verdad vas a fijar la fecha de...? —sabía que mi hermana se oponía rotundamente a qué me casara con Susan, la mujer en cuestión no era de su agrado y en eso estábamos de acuerdo.

—No voy a decepcionarte —los ojos se le pusieron vidriosos y se lanzó a mis brazos.

—Sé que no lo harás, nunca lo has hecho, pero no puedo evitar sentir miedo —deje un beso sobre su frente y fui yo ahora quien la abrazo con más fuerza.

—Todo estará bien Kath, ahora debes ir con el rey y la reina, nos vemos en unos minutos en el auditorio —asintió aunque sabía que se encontraba aterrada, aun así salió de la habitación dejándome solo.

Me mire otro momento al espejo y trate de mantener la calma. Un solo movimiento en falso, un gesto fuera de lugar podría mandar todo a la mierda y no podía darme el lujo de que eso pasara, había llegado demasiado lejos y no estaba dispuesto a retroceder. Nunca antes había estado tan seguro de algo en mi vida como lo estaba ahora y hoy le demostraría a todos de que estaba hecho Andrew Middleton.