Counting Stars [ 2T MPP ]

Capítulo 38. [Parte 2]

ANGY 'S POV.

Abro los ojos lentamente y parpadeo varias veces. Mis ojos se adaptan a la poca luz que hay en la habitación donde me encuentro. Alex está sentado en el sillón que hay enfrente mía durmiendo. Por una parte no quiero despertarle pero por otra si.

- Alex... - Lo llamo desde la cama susurrando. - Alex despierta...

- Mmh... déjame unos minutos más... - Río ante aquello. Miro el reloj que hay en la pared. Las 5:38 de la madrugada... He estado así unas 9 horas... "Bichejo."

- Alex despierta. - Le lanzo un cojín y mueve la cabeza desconcertado mientras mira hacia todos los lados. No puedo evitar reír.

- Angy... - Nada más verme se acerca a mi. - ¿Como te encuentras? - Me acaricia la mejilla.

- Mejor supongo... ¿Qué me ha pasado?

- Ha sido un desmayo por el esfuerzo, las enfermeras me han dicho que era normal...

- ¿Y bichejo? - Le miro queriendo, necesitando saber una respuesta.

- Se llama Dylan. - Me llevo las manos a mi boca para no gritar. Mis ojos se humedecen. Yo tenía el presentimiento que sería chico. - Es el niño más lindo que he visto en mi vida.

- ¿Enserio? ¿Podemos verle?

- Angy tranquila. Es demasiado pronto, no crea que nos dejen. - Dice mirando el reloj.

- Buff...

- Hey... - Me acaricia la mejilla. - No estés triste, le verás pronto ¿Si? - Deja un beso sobre mis labios. - Ahora descansa.

- Duerme aquí conmigo.

- Como ordenes pequeñaja.

Me abrazo a él y apoyo mi cabeza sobre su pecho. Me acaricia lentamete mi espalda mientros yo hago pequeños dibujos imaginarios sobre su abdomen hasta que me quedo de nuevo durmiendo.

***

- Y aquí esta nuestro pequeño Dylan. - Alex lo trae en brazos y lo posa delicadamente sobre los míos. - Tiene tus ojos... - Le miro por primera vez. Ese bebe de 2'90Kg que estaba en mis brazos mirándome expectante, era mi hijo y no podía hacer que cesaran mis lágrimas. Cuantas veces había imaginado este momento y ahora se han hecho realidad. - La enfermera dice que el pelo se le caerá poco a poco, dice que hay bebes que nacen con mucho.

- ¿No lo sabías? - Dije medio riendo mientras acariciaba la manita de Dylan. - Seguro que te asustaste, conociendote. - Asiente levemente avergonzado. Mi Alex es asi...

- Están fuera Judy y Marc. - Doy un beso a Dylan en la mejilla.

- ¿Pero no estaban en Saint-Michel?

- Si, pero han vuelto ya de la pequeña escapadita, es más, acaban de llegar.

- Diles que pasen. - Él asiente. - ¿Y tu que pequeñin? Tienes ganas de conocer a tus tíos ¿A qué si? - Este sonríe. - Has salido tan risueño como tu papi eh...

- ¡Enhorabuena chicos! - Entra Judy delante de Marc con unos globos azules con el nombre de Dylan. Nos da dos besos a ambos y después mira a mi hijo. Mio... - ¡Hola pequeñin! ¿Qué pasa? Mira como sonríe Marc, si tu. ¿Me dejas cogerlo Angy?

- Claro.

Judy le balancea consecutivamente y Dylan se va quedando durmiendo. Le vuelve a dejar en mis brazos cuidadosamente.

Los chicos se quedan unos minutos más y se vuelven a nuestra casa, ya que están rendidos del viaje en coche. Si, Marc se ha sacado el carnet del coche y ahora tenía uno rojo. Judy se ha encargado de toda la gestión de mi estudio, y sinceramente, tiene potencial como pequeña empresaria. Alex le ha conseguido un puesto como reportero en su empresa y están encantados ambos. Tocan la puerta y miro a mi izquierda. Ahí se encuentra Jake, Silvia y Lucy saludándome.

- Hola - Digo susurrando. - Se acaba de dormir.

- Ay que mono... Tiene rasgos de Alex eh. - Dice Silvia mirando al pequeño.

- Tiene mucho pelo. - Dice la pequeña y no puedo evitar sonreír. - Mamá quiero un hermanito, si puede ser mellizos. Un chico y una chica.

Alex y yo empezamos a reír por las miradas que Jake y Silvia se lanzan mutuamente. Lucy nos mira raro y Dylan empieza a llorar.