Resistencia #2

Capítulo 17

Los tuve frente a mi, ambos peleando, lo recuerdo muy bien, era 1 de julio antes que todo explotara.

Luzbel y Tyron estaban peleando por el mejor plan.

— Tenemos que volver. — Aseguró Luzbel.

— ¿Para que nos maten? No, gracias. — Respondió Ty.

— No seas miedoso, es la única opción.— Luzbel estaba molesta. — El mundo se fue al carajo, es nuestra responsabilidad arreglar las cosas.

— ¿Nuestra? ¿Qué hizo el mundo por nosotros? Nada. — Dijo Ty mientras la enfrentaba. — ¿Las cosas salieron como planeamos? No, pero eso no significa que seamos Héroes Luzbel esto no es una película, es la vida real.

— Sigues siendo un niño que solo piensa en si mismo. — Respondió Luzbel. — Nosotros abrimos ese mundo, nuestro deber es terminar con toda esta mierda. ¿Crees que quiero ser la heroína? Pues dejame decirte que no, esa mierda no me importa el mundo se puede ir al carajo, pero hay gente que nos importa, amigos, familia. ¿O también piensas darle la espalda?

— Ay por dios. — Dijo Ty riendo. — No finjas que te importa alguien mas que tu estúpida venganza, no haces esto por mi o por Aurora, tampoco por nuestros amigos. Quieres hacer esto por tu estupido odio hacia ella.

— No sabes una mierda. — Dijo Luzbel enojada

— Todos saben que la culpas por la muerte de el.

Eso fue todo, me interpuse entre ellos antes que Luzbel se abalance contra él, Ty podía ser cruel intentaba meterse siempre con cosas dolorosas era su mecanismo de defensa, a Luzbel no le afectaba siempre respondía el doble y eso ponía mal a Ty, pero esta vez se había pasado. Nadie lo nombraba a él, menos delante de ella.

— Tyron vete. — Dije enfrentándolo. —Ahora.

El apretó sus labios con enojo pero no dijo nada.

— Tienes que calmarte. — Dije hablando con Luzbel.

— ¿Calmarme? — Respondió indignada. —Él debe saber que las acciones tienen consecuencias, y si él no está dispuesto a aceptarlas debería aprender a cerrar la boca.

— Es un niño, está asustado.

— Perdón por no ser la reina de la empatía en este momento, pero el mundo se está yendo al carajo por nuestra culpa, intento arreglarlo.

— No es nuestra culpa.

— Por supuesto que no, es de esa maldita bruja, pero nosotros ayudamos a conectarla con nuestro mundo.

— Sabes que ella está de nuestro lado. — Lo que dije hizo que su mandíbula se marcará, estaba molesta y eso jamás era bueno, ella jamás demostraba nada.

— ¿Entonces por qué no hace nada para ayudarnos? — Dijo aún más molesta. — Te dire porque, le importamos un carajo. Ayudamos a salvar su maldito mundo para nada, porque a ella no le interesan los humanos.

— Ella nos mostró su agradecimiento. — Intente hablar pero ella me interrumpió.

— Por dios Aurora no seas ilusa, nos dió poderes ¿Y qué? Salvamos su mundo, lo minimo que tendría que hacer es hacernos sus malditas reinas.

— ¿Es lo que querías?¿Poder?¿Un reino? — Pregunté confundida.

— Sabes que no es eso, solo quiero lealtad, quiero que ella nos ayude de la misma manera que nosotros lo hicimos. Después de todo solo nos dió poderes que no son nada comparado con los de ella, lo minimo que quiero es que sea nuestra aliada.

— Ella lo es. — Respondí de inmediato.

— ¿Estás segura? ¿Por qué no está aquí? — Dijo acercándose a mi. — Fuimos sus peones, pero en el momento en que necesitamos su ayuda ella se refugia en su castillo. Jamás le importamos, solo fuimos un medio para un fin.

— Eso no es verdad. — Dije enojada.

— Por mucho que la ayudemos ella no haría lo mismo por nosotros. Lo sabes Aurora, ella es una reina y nosotros no somos nada.

— Estas enojada con ella y lo entiendo, pero tu odio hacia ella está nublando tu juicio. Sé lo que quieres lograr pero no es razonable, tampoco es lo correcto.

— ¿Y qué es lo que quiero lograr? — Preguntó.

— Una guerra con ella, porque la odias y no puedes perdonarla. La única verdad es que no hay nada que perdonar, lamento mucho decirlo, me duele verte así pero es la verdad. Tu odio injustificado hacia ella nubla tu visión.

— ¿Injustificado? — Preguntó con una risa sarcástica. — Ese es tu maldito error Aurora, creer que todos piensan y actúan como lo harías tú.

— Y tu error es creer que todos serían tan crueles como lo serías tu.

Sabía que me estaba pasando, pero su estúpida rivalidad hará que nos maten, no podía dudar de todos menos por sus diferencias.

— Cuando veas que tengo razón será demasiado tarde. — Con eso último Luzbel se fue.

Amaba a mi hermana y confiaba ciegamente en ella, pero en este momento no pensaba con claridad.

Ella quería ir al otro mundo, estaba de acuerdo con eso, quería la mayor ayuda posible para derrotar a los seres oscuros, lo hicimos una vez podíamos hacerlo otra. La diferencia, es que en el pasado teníamos un ejército de seres de luz, los aliados de la reina Freydis, mi plan era pedirle su ayuda, la de Luzbel era exigir, no podía llevarla conmigo no cuando su resentimiento hacia Freydis seguía creciendo.

Dhalia entro en mi oficina tratando de analizar lo que me pasaba.

— Luzbel está muy enojada, Ty es un manojo de nervios. — Dijo acercándose a mi. — ¿Qué mierda paso?

— Ty enojado dijo mierda y Luzbel diciéndome lo idiota e ilusa que soy, lo de siempre. — Dije masajeando mi cien.

— Las conozco a las dos desde hace 15 años. — Dijo cruzándose de brazos.—  Presencie muchas de sus ridículas peleas, por experiencia sé que tampoco eres un ángel.

— ¿Estás diciendo que es mi culpa?

— Estoy diciendo que esto es culpa de los tres, son unos idiotas que solo pelean y no se escuchan. Eres la mayor es tu responsabilidad arreglar las cosas, no empeorar la situación. No se que dijo Luzbel pero estoy segura que te metiste con un tema delicado.

— Ella empezó. — Me defendí.

— Me importa un carajo quien empezó esto es serio. — Dijo seria. — Van a hablar las cosas como personas grandes sin pelear.

Antes que pueda responder, escuche una voz llamándome desde atrás.

Cuando quise buscar de donde provenía, todo se volvio negro, entonces desperte.