El Empleo De Mi Vida - FNAF X Tú (En proceso)

Mírame Cuando Te Hablo

Scott - ¡But you didn't have to cut me off! –llora– ¡Make out like it never happened and that we were nothing!

Mike - A este que le dio~ —hipo— Yo no entiendo ese idioma tan raro~

Adriens - ¡And I don't even need your love! –se abraza con Scott.

Al unísono - But you treat me like a stranger and that feels so rough –empiezan a llorar.

Mike - Esperen, yo t-tan bien me les uno —se mete un trago de alcohol— Nou yu dirin a yus tru so long. Has yur friend colek yur records a deir chaing yur nembor~

La música sucumbía en toda la casa al igual que unos gritos que parecían de habitación de parto; sentía que mis tímpanos iban a explotar si seguía a este ritmo, incluso el vaso de agua que tenía a mi lateral estaba a punto de estallar... Trataba de estudiar en serio y estos desocupados no dejaban.

Bufe y me levante de mi mesita de estudio y baje la tapa de mi portátil para dirigirme al living.

Mis ojos pelaron en "O" cuando veo tal desastre por toda la sala...

Cortinas en el piso, cerveza regada por toda la alfombra, olor a juguito, cajas de pizzas, televisor encendido, platos sucios, camisetas sudadas...

Mierda, la putería me quería matar.

- ¡Qué carajos Adriens! –Le grite al dicho mencionado esperando alguna respuesta de su parte, pero la música estaba tan alta que mis gritos no hicieron efecto– ¡Chicos! ¡Dios! –sin resultados, la verdad es que mis palabras se perdían con las tonadas bajas de la música.

La verdad estaba más sorprendida de que la policía no haya tocado a la puerta.

Miraba como Scott agarraba románticamente un palo de escoba y acariciaba su duro cuerpo vertical, Mike estaba ebrio, sé que sí, no es normal que alguien este acostado encima de un refrigerador riendo como sociópata; Adriens tenía mi cepillo para el pelo como micrófono y cantaba al mismo tono que Scott, mirándose con dolor, como si cada uno hubiese tenido 4 separaciones, 8 divorcios y 16 órdenes de alejamiento.

Ante tan estúpida actitud, no tuve mejor reacción que poner mi mano y pasarla por mi rostro, ¡COMO MIERDA PODRE TRABAJAR CON ESTE DESORDEN!

Al menos podre darle a cada uno su merecido golpe al tenernos reunidos como cucarachas... Esperen, hablando de cucarachas. ¿En dónde estaba Vicent? Era el único que no localizaba con la mirada en los alrededores.

Oh no... De ese me fío menos que todos los internados mentales que tengo aquí reunidos como amigos.

- ¡Vicent! –grite- ¿Dónde estás? –llamaba sin recibir alguna respuesta de su parte.

Eche un vistazo a los alrededores para comprobar su presencia con más efectividad, pero no, no estaba. Dios, ojalá mañana no me aparezca alguna cabeza cortada de alguien por ahí o algún cuerpo bajo la alfombra por su culpa.

No sé qué tan sádico puede llegar a ser después de lo que hizo hace unos meses atrás.

Di la vuelta algo desconfiada y así mismo camine por todo el pasillo del corredor en busca de aquella identidad que tanto fastidio le había cogido...

Entre a mi habitación y nada; al cuarto de Adriens e incluso al lavado pero no estaba...

- ¿Dónde estará...? –mire a los lados con las manos en la cintura.

Eche un ojo al baño, era la única habitación donde se veía al menos un foco de luz iluminándolo, tal vez él estaba ahí. Me acerque y toque dicha habitación reiteradas veces. Oraba porque él estuviera ahí.