𝙎𝙐𝘾𝙃 𝙄𝘿𝙄𝙊𝙏 ཻུ

capítulo #42: dimension-dilemma

Los días pasaban exageradamente rápido, apenas parpardeaba y un nuevo mes lo estaba recibiendo. Jay los sentía pesados. Cada día era uno más pesado que el otro, con un problema distinto o un dolor nuevo. Siendo sincero comenzaba a cansarse.

Era principios de agosto. Pensar en la fecha lo angustiaba, porque todavía no caía en el hecho de que se estaba acercando al fin. También era triste, porque mientras el tiempo pasa, sigue sin encontrar la manera de decirle a Jungwon la verdad; mientras el tiempo corre de su cuerpo, más lo ama.

Y es como si fuera así. Se mantiene corriendo en las líneas del tiempo sin ir a ningun lado, siempre reparando en el mismo lugar donde las cosas parecen empeorar.

Jay a su edad siente como si hubiera crecido más rápido que nadie, como si su vida entera fuera una película todo el tiempo. Desde el principio corre a dónde amanece cada noche, en el mañana de alguien más, en el mañana de un niño que encontró el mundo muy grande. Es una constante maratón, pareciera, él continúa corriendo cada día sin llegar a una meta. La vida pasa frente a sus ojos mientras sus amigos toman el metro, y Jay está en modo avión.

Jay siente que todo se le está escapando de las manos y no sabe qué hacer. ¿Está aprovechando sus límites de la manera correcta? ¿Por qué siente que está solo en un tiempo y espacio diferente?

Abre sus ojos en la madrugada con pesadillas que lo exaltan; en el sueño cree que es una alucinación todo lo que le ocurre, su enfermedad en especial, porque allí de repente todo el mundo camina muy rápido y él se transforma en un niño pequeño que se pierde entre las escalofriantes sombras de un mundo cruel. Y eso lo tiene tropezando cada vez más, sus pies pierden el rumbo que seguía, al igual que un vagabundo deambulando por las esquinas arrinconado por la vida. Entonces cae rendido, jadeando por aire y pensando en una solución; no puede seguir.

Casualmente recupera al aire después, pensando que no tiene que saber a dónde ir, por más que esté enredado y trenzado en un dilema de opciones dentro de las dimensiones; incluso si es contrario al Sol, hasta el final, aparecen los ojos de quien es feliz de haber conocido. Y dar un paso adelante lo aterroriza, porque cada vez que él aparece cual celestial a salvarlo, siente una angustia exhaustiva que lo deja perplejo y no le permite acercarse. Jungwon le extiende su mano, y de la nada despierta.

Jay se da cuenta que en esas pesadillas refleja lo que más teme perder, y sin falta aparece Jungwon con su incesable hábito de hacerle caer a sus pies.

—¡Park Jay!

El mencionado dio un saltito en su lugar causando que sus patines se movieran apunto de hacerlo caer, si no fuera por Niki a su lado probablemente se hubiera encontrado con la pista de hielo otra vez.

—Yo sé que tu quieres estar conmigo, no hace falta que lo hagas tan público, hyung. —el japonés dijo en modo de broma, los demás rieron cuando Jay volvió a tene problemas de mantener el equilibrio.