El destino

Epílogo

Algunos meses después del rescate

Aunque ya hubiesen pasado meses, la cabeza me seguía doliendo un poco. Sobre todo cuando tenía algunos recuerdos que eran bastante raros.

En ellos, siempre estaba una chica rubia, muy hermosa, debo aceptarlo.

Seguían inyectándome un líquido que me hacía desmayar, todos los días. Eso no me gustaba, pero lo tenía que aguantar. A Estean no le agradaba nada cuando me ponía rebelde, y a mí tampoco me agradaban sus regaños; así que lo mejor era quedarme callado y aguantármelo.

Me miré al espejo y me dio la sensación de que en verdad no era peli negro, así como me veía.

—Larisa— llamé la atención de mi hermosa novia—. ¿Alguna vez fui rubio?

Ella se echó a reír y se acercó a mí. Dejó un suave beso en mis labios y yo sonreí por eso.

—Obvio no, tontito. Has sido peli negro desde que tengo memoria.

Mm... Aveces pensaba cosas que no tenían sentido, y era algo raro. Lara decía que estaba un poco loquito, pero yo ya no sabía que pensar.

—¿Estás listo? Hoy empezarás tu entrenamiento— dijo emocionada.

Aunque yo no puedo decir lo mismo de mí.

—Tengo que estarlo, ¿no?— hablé no muy convencido.

Llegamos al campo de entrenamiento, donde empezaría a correr más rápido, a hacer mucho ejercicio y a manejar las armas.

Eli decía que mi puntería era excelente, a pesar de mi poca movilidad en el brazo izquierdo. Lástima que ni ella ni Estean estarían conmigo.

De hecho, entrenaría en una academia de tiro y batalla, o algo así.

Me detuve al frente de un hombre más bajo, pero mucho más robusto que yo.

—¿Nombre?— preguntó sin ningún tipo de expresión.

—Chase Ryder— respondí con una sonrisa de oreja a oreja.

...

-Valentina <3