Capítulo 3
Está parado frente a mí vistiendo unos pantalones vaqueros azules, una camisa blanca que se ajusta a su torso definido y una chaqueta negra sobre su hombro, sus perfectos labios no muestran ninguna expresión y lleva unas gafas de sol que cubre el color de sus ojos.
Es tan guapo, pero su físico no es lo único que me gusta de él, y tampoco por lo que no haya podido olvidarlo...
Me adentro un poco más en el auto buscando refugio, y trato de hacerme pequeña, si lo consigo seria ignorada como hasta ahora.
—No te han dicho, que puede ser peligroso que asomes tu cabeza por la ventana de un auto —vuelve hablar y no hay ni una pizca de humor en su voz.
—Sí, lo sé, pero no estaba en movimiento —murmuro, de reojo lo veo negar con la cabeza.
¿Qué hace aquí? ¿Acaso ha estado buscándome para hablar sobre mi estado?
No era algo fuera de lugar, es algo normal, muy normal después de tener una desilusión, estoy segura.
—Keylan ira con nosotros, así talvez se conozcan y se hagan amigos —dice Marcus, junto a él, no había notado cuando llego.
—Lo siento, ¿Qué dijiste? —alzo un poco la voz y le indico con una mano que no escuche lo que dijo, aunque en realidad si lo hice, pero no puedo creerlo.
—¿Qué te pasa hoy Elaine, acaso no te bañaste? —bromea antes de reír suavemente de nuevo.
—¡Muy gracioso! —replico.
Estoy a punto de bajar del auto para sentarme atrás y que Keylan se siente junto a Marcus, pero escucho una puerta abrirse, sin mirar en mi dirección Keylan entra al asiento de atrás y deja su chaqueta junto a él.
¿Cuál es su problema? Habrá sucedido algo, él no es así normalmente, siempre es caballeroso.
Aunque la intención de Marcus me hacía ilusión, no sucedió, Keylan vino dormido todo el viaje.
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—No aceptare un no, por respuesta —decreta Amelia.
Mi mejor amiga es bella, estatura media, me sobrepasa por unos centímetros. Su cabello castaño está en un desordenado moño, sobre su cabeza, sus ojos de color café me miran fijamente, sus mejillas están un poco rosadas que en mi opinión le queda perfecto a su pálida piel.
Llegue a casa de Lia hace más de una hora, el viaje hasta aquí fue largo, incluso incomodo por la presencia de Keylan, no es que haya sido de una incomodidad mala, todo lo contrario, mi corazón durante todo el trayecto parecía que iba a explotar en mi pecho.
—Sabes que no me gusta, ¿Por qué insistes? —repito exhausta mientras centro mi mirada en el techo de la habitación de mi amiga, estoy recostada en su cama.
—Por favor, Elaine —ruega. —Tú más que nadie sabes que es muy difícil que hagamos una fiesta aquí en mi casa, y ahora conseguí el permiso de mamá —explica. —No puede faltar mi pequeña amiga a la fiesta y dejarme sola.
—Lia no tengo nada de ropa para usar en una fiesta, lo siento —respondo apresurada antes de encontrarme con su mirada de cachorrito.
—Ya pensé en eso —aclara, y se pone de pie de un solo salto. — Es por eso que te trajo Marcus —dice mientras se zafa el moño desordenado. —Iremos de compras.
—No es verdad —me quejo.
—Si lo es —chilla emocionada.
Tira de mi brazo para levantarme de su cama. Trato de poner resistencia, pero hace mucho que ya no hago ejercicio físico y ella es más fuerte que yo.
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¿Cómo conquistarte?
Teen FictionEl amor puede llegar de maneras inimaginables, en momentos y de personas inesperadas, en la vida hay un bajo porcentaje de personas de las que, sus sentimientos son correspondidos por la persona de sus sueños. ¿Podría Elaine ser parte de ese porcent...