Día 29

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Desperté en el lugar de siempre, miré por la ventana con una nueva forma de ver la vida, toque mi vientre, estaba realmente feliz, me alisté para ir al colegio y salí temprano, quería caminar, tomé mi teléfono, quería llamarlo y decirle que ya había tomado una decisión, que fue más fácil de lo que pensaba, que David tenía razón, mi cuerpo me dio la respuesta, pero no era el momento, lo haría después de clases, llegué al colegio antes que mis amigos, caminé por el colegio un rato hasta que uno a uno fueron llegando, no parecían querer tocar el tema, me miraban buscando una respuesta pero no parecían encontrar nada.

- ¿Entonces? -dijo Harold en el recreo.

- ¿Entonces? -le respondí.

-Entonces dinos- dijo David.

-Solo puedo decirles que esto aclaró mis dudas.

-Creo que ese es el objetivo, pero necesitamos más que eso-Harold estaba realmente intrigado.

-Aún no puedo decirles nada, solo que, pronto habrá muchos cambios y los necesitaré mucho.

-No tienes porque pedirlo, para eso estamos-David tomó mi mano.

-Los amo ¿saben?

-Más te vale-dijo Harold.

Tocó la campana y pasamos las ultimas clases, al salir fui a casa con música mientras sentía que caminaba entre nubes, toqué mi vientre de nuevo, esta sensación de mariposas revoloteando dentro mío me hacía sentir tan bien, era una sensación increíble.

Llegué a casa, después de un almuerzo delicioso me fui a mi habitación, me sentía mareada, pero ya nada me importaba, tomé mi teléfono y marqué.

-Quiero hablar contigo...

-Dan, no esperaba...

-Nacho necesito decirte algo muy importante.

- ¿Sobre qué?

-Después de todo lo que vivimos, de todo lo que hicimos...todo esto, siento que lo llevo dentro mío y tienes que saberlo.

-Está bien ¿mañana?

-A las 5pm en la esquina del parque.

-Esta bien, nos vemos ahí.

-Esta bien...-parecía que ninguno quería colgar.

-Dan yo...

-Nacho...

-Nos vemos.

-Nos vemos.

Colgó y yo me quedé mirando el teléfono, contemplaba el marcador, y entonces entré a mis contactos, vi el número y llamé.

-Oliver.

-Dan...no esperaba tu llamado.

-Tengo que hablar contigo.

-Claro, estoy cerca si quieres...

-Preferiría que sea mañana.

-Lo que tu digas, ¿estás bien?

-Perfectamente...-le dije tocando mi vientre.

-Esta bien, tu dime cuando y donde y estaré ahí.

-Mañana, 5pm, en la esquina del parque.

-Como digas, gracias.

- ¿Gracias por qué?

-Solo gracias.

-Esta bien. Nos vemos mañana.

-Claro...realmente no quiero colgar.

-Hablaremos de todo mañana.

-Estaré ahí.

-Ok, hasta mañana.

Con dificultad corté el teléfono, moría por decirle cual fue mi decisión, pero tendré que esperar, Oliver tendrá que esperar, Nacho tendrá que esperar.

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