Si Te Elijo...

Día 23

-¡Buen día!-mamá entró a mi habitación-¿qué haces ahí?

Otra noche que dormía en la ventana, intenté moverme pero mi cuello se negaba a hacerlo.

-Creo que el sueño me ganó-le dije agarrando mi cuello.

-Bueno, te tengo buenas noticias-me dijo emocionada mientras me sentaba en la cama.

-Te toca el baño-me hizo gracia su comentario.

-¿Esa es buena noticia?

-Claro, no está muy sucio, además eso te pasa por ser la última en levantarse.

-Ya voy-le dije y ella salió, me puse un par de shorts y una polera para limpiar, me agarré el cabello y fui directamente al baño a limpiarlo.

Limpié todas las superficies con el limpiador especial de mamá saqué la basura y barrí, era un trabajo fácil pero delicado, si mi mamá veía el baño sucio estaba muerta.

Ya estaba acabando, papá estaba en la sala mi mamá la cocina de nuevo y Santy intentaba su habitación.

-Esto es para ti-papá dejó una bolsa de basura en el baño.

-Eso no es justo, saqué la mía, tu saca la tuya-le dije sacándola mientras preparaba el trapeador.

-Pues está en tu lado así que es tuya.

-No es cierto.

-Sí lo es-papá agarró la bolsa y la volvió a tirar al baño sobre mi cabeza para después salir corriendo.

-¡Papá!-salí corriendo detrás de el con la bolsa pero se había ido a la cocina y escondido detrás de mi mamá, era una divertida imagen ver a alguien tan robusto y grande escondido detrás de una figura tan delicada como la de mi mamá. Salí a sacar la basura de papá y volví a entrar.

-¿Terminaste?-mi papá estaba sentado en el sillón con el teléfono en la mano.

-No, todavía me falta el piso-le dije pasando de largo.

-Que tardona-me dijo en broma, le saqué la lengua y me dispuse a entrar al baño, cuando quise hacerlo el olor al limpiador me provocó un mareo, me quise sostener de la pared, pero mi cuerpo me venció.

-¡Jenny!-papá corrió a acudirme podía escuchar sus pasos.

-¿Cómo está?-escuché la voz de mi mamá mientras intentaba abrir mis ojos, intenté reconocer el lugar, estaba en la habitación de mis padres.

-¡Cariño!-mamá se acercó ni bien empecé a moverme.

-Hola-le dije intentando levantarme.

-Quédate tranquila-papá estaba detrás de ella y Santy estaba acostado junto a mí.

-¿Qué pasó?-les dije acomodándome.

-Eso quisiéramos saber nosotros también-mi mamá estaba preocupada y se sentó en la cama a mi lado tomando mi mano.

-Creo que mezclé muchos químicos y el olor me hizo sentir muy mal.

-Hay que limpiar la casa no matarnos-me dijo preocupada.

-Lo siento mamá.

-Tranquila, ahora descansa.

-Me siento mucho mejor, gracias.

-Eso a mí no me importa, hoy voy a mimarte quieras o no-me hizo mucho bien sentir esa cercanía.

-Gracias, te quiero.

-Y yo a ti, ahora iré por algo de comer, veamos algo en la televisión.

A pesar del intento de mamá por distraerme no dejaba de pensar en la decisión que debía tomar, vimos un par de películas antes de que papá llame para pedir comida.