Nacho

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Colgué el teléfono y lo miré por unos segundos, sentía que perdía al amor de mi vida, cada vez estaba más lejos, desde el día en que la vi con ese tipo sentía que me habían quitado una parte de mi alma, intenté distraerme, no pasar por su casa, me dediqué a la universidad y a mis amigos, a escapar de todo lo que me recordara a ella. Pero nunca fue una opción realmente, ayer estuve en el colegio, sabía que tenía un partido.

Fui temprano para no encontrarla en la puerta, estaba tapado y camuflado, la vi entrar con unas trenzas preciosas, parecía que su madre las hubiera hecho, ella nunca se peinaba así a menos que le pida a su madre que lo haga por ella, desde que llegó estuvo 100% concentrada en el partido, solo escuchaba a sus amigos y compañeras, a medio tiempo decidí que no podía seguir viéndola y me quise ir, pero de camino la vi salir del baño, parecía pálida, me escondí tras un poste cercano mientras se alejaba con David, los intenté seguir pero se fueron a su curso, habían muchas ventanas y si me acercaba más lo notarían, después de un rato salieron juntos, me metí entre la multitud y me alejé, dejé la moto muy lejos para que no sospechara así que me tocó caminar bastante, me dio tiempo de pensar que realmente ella estaría mejor sin mí, parecía que mi amor ya no le haría bien, no la amo como otros aman, no quiero tenerla para mi de forma egoísta, quiero verla volar, ser libre y feliz, quiero el cielo para ella y si desea que lo comparta conmigo.

Solo pienso en ella, solo puedo pensar en ella, pero creo que después de ver esa sonrisa en su rostro con ese tipo me doy cuenta de que ella tiene tanta luz que no me necesita, no como yo a ella, voy a amarla por siempre, aunque este sea el adiós, si se algo es que el amor no muere, ni siquiera con la muerte del cuerpo, el alma se queda en la tierra e invade el mundo con todo ese amor dentro.

- ¿Entonces? -Ricardo interrumpió mis pensamientos.

-Entonces, nos veremos.

- ¿Cómo te sientes con eso?

-Sinceramente no lo sé-perdido entre pensamientos y sentimientos me había a sincerado con mi amigo.

-Viejo, todo esto es un drama, un drama innecesario en tu vida, las cosas tienen que ser simples.

-Nada es simple cuando se trata de amor.

-De hecho, es todo lo contrario, el amor es la cosa más simple del mundo, son las personas las que lo sabotean complicando todo en las relaciones y culpando al amor, cuando el pobrecito no hizo nada.

- ¿Qué sabes tú del amor si...?

- ¿Si nunca me he enamorado? No necesito enamorarme para saber amar, amar es simple, amo a mis padres, a mis amigos, te amo a ti-me golpeó en el hombro-eres mi mejor amigo y estoy aquí para ti.

-Gracias.

-No me agradezcas, se feliz, solo eso necesito, verte recuperado, tu eres y siempre serás mi hermano, hemos compartido tanto...y el día en el que yo encuentre a la chica de mi vida tu estarás a mi lado, igual que yo estoy aquí viéndote elegir seguir siendo fuerte por tu chica, porque créeme amigo, no hay nada que haga que Dan deje de ser tu chica.

- ¿Lo crees?

-Por supuesto, lo puedo ver en sus ojos desde hace 3 años, ella es tu chica, y tu su chico. Si no fuera así créeme que ya te hubiera dejado, nadie resistiría estar contigo tanto tiempo si no te amara.

Lo golpeé juguetonamente y Ricardo me pasó el brazo por los hombros.

-Tranquilo, mañana resolverán todo y en la noche te esperaré aquí para una maratón de este juego con pizza y alcohol para festejarlo.

-Si todo sale bien serás el primero en saberlo.

-Más te vale, te estaré esperando con todo listo así que no me falles.

-Nunca lo haría.

-Ya no te pongas gay.

-Pero si nunca te negaste a uno de mis besos-me acerqué a Ricardo con ademan de besarlo y este me golpeó con una almohada empezando una pelea que terminó en risas. Pasaría la noche en casa de mi amigo, esperando ansiosamente el futuro encuentro con Dan.

Si Te Elijo...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora