-¿Ya?-le dije después de notar que veía mi cuaderno como hace una hora sin escribir nada después de terminar la tarea.
-Trdanquila Dan, las cosas buenas siemprde tadan.
-¿Cómo qué?
-Como tu ladga explicación pord la cada de boba que no pudiste dejard en tu casa-cerró los cuadernos y los puso a un lado mientras me veía interrogante.
-¡Oh David! ¿No te lo imaginas?-me acomodé a su lado en su cama mientras veía el techo le contaba los detalles de mi charla con Nacho y me detuve justo en el momento antes de contar...los otros detalles.
-Dan...dime-nos miramos-¿ya estuviste con Nacho?
No sé si la cercanía, el tema de conversación o el recuerdo pero me subió la temperatura, no podía hablar, me levanté de golpe y me mareé.
-Dan...
-Espero que tengan hambre-la mamá de David entró a la habitación (salvada por la campana).
-Siempre tengo hambre-le dije sonriendo.
-¿Quieren un té, café, algo de comer?
-Mamá yo no quiero nada pero a Dan tráele un café con leche frío y sin azúcar con un sándwich de queso con kétchup y lechuga, justo como me gusta.
-Claro, vuelvo enseguida.
-Dan responde.
-David no es algo que quiera conversar contigo.
-¡Lo hiciste!-me tapé la cara de vergüenza mientras agitaba la cabeza afirmando muy rápido-Dan eso es fantástico, realmente es increíble ¿Cómo te sientes? ¿Cómo fue? ¿Cuando?
-No voy a darte tantos detalles, pero fue fantástico, David, me siento distinta, siento que cuando nos separamos realmente nunca se va. Lo tengo conmigo siempre, me siento parte de él y que él tiene una parte mía ahora, y para siempre.
David no dijo nada, realmente muy pocas veces lo hacía, me hizo un espacio en su cama y me acosté a su lado mientras me abrazaba, su mamá llegó con mi café y se sentó a nuestro lado un momento mientras hablábamos, David estaba diferente, me veía con cierta emoción mezclada con nostalgia, creo que veía lo mismo, yo ya no era la misma, y no lo volvería a ser.
Pusimos una película mientras esperaba la hora de irme a trabajar. Al terminarla David se había dormido así que salí sin despedirme, abajó saludé a su mamá y salí, caminé hasta el trabajo, bueno, prácticamente saltaba hasta el trabajo. Era un gran momento en mi vida e iba a disfrutarlo, vi mi teléfono y Nacho no me había contestado aún. No era un buen momento para molestarlo así que lo dejé así.
-Hola chica alegre-Nando me habló desde el mismo lugar en el que se sentaba siempre.
-Hola chico que nota mi felicidad.
-Te tengo una sorpresa-miré donde apuntaba y una cara conocida estaba ahí toda fruncida.-¿Jorge?-me reí mientras se acercaba-¿Qué haces aquí?
-No pude evitarlo.
-¿Qué hiciste esta vez?
-Le puso una-Oliver no sabía cómo seguir-"bomba de olor" al maletín de un maestro.
Todos nos reíamos mientras Jorge no sabía dónde poner su cara, lo había conocido solo por un día cuando llegué y recordarlo me hizo notar que habían pasado tantas cosas desde entonces, no era la misma que llegó y probablemente ahora no soy la misma de la que se irá, había llegado a tomarles mucho afecto a todos. Subimos al bus y en el camino Jorge contaba su anécdota mientras todos escuchábamos atentos. Recordé cuando en su lugar estuve yo, ahora era parte de ellos.
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Si Te Elijo...
Teen FictionEste es el inicio y el final, una cuenta regresiva. Cuando crees estar en tu felices para siempre, imaginas todo lo que podría pasar? 3 personas 2 opciones 1 decisión