Capitulo 9- Yo contra Nate Jacobs

1.6K 89 0
                                    

La tensión sexual se apoderó de nosotros. Él pareció querer acercarse más no lo hizo.
- Por nada...- dijo finalmente.- Por saber. Ya sabes.
Asentí decepcionada. Quería besarlo.
- Claro. Yo voy a tener que ir entrando a casa. Me están esperando. Nos vemos.- estaba agotada.
- Descansa. Nos vemos.- respondió él. No se fue hasta que entré por la puerta.
- Por fin hija.- bramó mi madre.- ¿Por qué no cogías el teléfono?
- Se me acaba de acabar la batería.
- Pues te llamamos hace ya bastante.
- No me salió nada. Estaba en el hospital acompañando a una amiga.
- ¿Qué estabas en el hospital?- mi madre se asustó.- ¿Y quien ese chico?- señaló a Fez.
- Estoy bien mamá y él es un amigo. ¿Puedo ir a dormir ya?- estaba derrotada. Apenas me sostenía en pie del agotamiento.
- Si, anda. Ya luego hablamos.- dijo sería. De verdad que no entendía a mi madre. Se preocupaba demasiado por mí. Era muy sobreprotectora.
Llegué a mi habitación, me desmaquillé y caí rendida en la cama.

- Arriba Sira.- exclamó mi madre.
- ¿Qué hora es?
- Las seis de la tarde. Ya has dormido suficiente.- levantó las persianas.- Ni siquiera has comido.
- Jobar mamá.
- Nada de jobar. Vamos arriba.- exclamó mi madre. Ufff que pesada.
- Vale. Ya voy. Bueno, no. Cinco minutos más. Porfa.
- No, Sira. Que tenemos invitados.
- ¿Cómo?
- Si. Vienen a las siete.- informó ella.
- ¿Quienes vienen?
- Los vecinos.
- No te creo.- me asusté al pensar en Nate.
- ¿Por? ¿Y esa cara? Hija, no me asustes.
- Nada. No es nada. ¿Qué cara?
- La tuya hija. Cual va a ser.- puso los ojos en blanco con desesperación- Déjalo. Cámbiate y baja.
- Que si.- solté. Cerró la puerta.
Me levanté y me puse unos vaqueros blancos de campana y un jersey azul fuerte de cuello alto, ancho.
Miré el móvil y tenía varios mensajes:
Jules💖
Jules: Gracias por cuidar de Rue. No sabía que haría eso. Te debo una.
Yo: Que va no es nada. Ya está mejor.
Jules: te dije que no te acercaras a ella por eso pero además por q... bueno, ella y yo discutimos y tal. Mejor te lo explico en persona.
Yo: no te preocupes ☺️. Ya me contarás.
Jules: siiii gracias otra vez 😘😘😘

Maddy
Maddy: holiiii qué tall ?
Yo: Muy bien. Despertando :)

Lexi
Lexi: Buenos días ✨
Yo: Jajajajajja de buenos nada tengo sueño.
Lexi: JAJAJAJAJA normal.
Yo: menuda fiesta ayer.
Lexi: si eh. Bueno estuvo bien menos por el final ya sabes. En fin perdona mejor no sacamos el tema.
Yo: ya... no pasa nada. A sido llegar y a la parece que ha venido todo en mi contra.
Lexi: que no tía. ❤️❤️ Ya verás como te pasan cosas buenas.
Yo: jajajaja 🙃🥰
Lexi: confía

Fez
Fez: A Rue le han dado el alta
Yo: Tan pronto??
Fez : si
Yo: qué raro
Fez: no se. Un poco si.
Yo: que tal tu ?
Fez: aquí en la tienda
Yo: yo intentando levantarme de la cama😴
Fez: perezosa
Yo: jjajajajaj no. No soy perezosa .
Fez: claro que no 😝
Yo: Vale, igual un pco. ;)

Sentía mariposas en el estómago.

- Sira. Te dijo tu madre que te levantases.
- Ya estoy despierta. Mira me he vestido y todo.- comenté.
- También te dijo que bajarás.
- Ay que ya voy. Hoy estáis pesaditos eh.
- Sira. No me contestes de esa manera.- exclamó.
Puse cara de me importa una mierda lo que dices; ignoración.

Baje sin ganas. Resulta que si era la familia de Nate la que venía. ¿Por qué el mundo me odia?
- Hola.- saludó con su asquerosa sonrisa. Hice como si nada y ni le miré.
- Hija. Te acaba de saludar. Un poco de educación.- exigió mucho madre.
- Ay perdón es que no te escuché.- traté de no poner cara de asco. Me repugnaba.
- Pasad.- exclamó mi madre dirigiéndose a los invitados. Portaba una sonrisa de oreja a oreja.- Estais en vuestra casa. No os quedéis en la entrada.
Los demás rieron para relajar el ambiente. Los padres de Nate eran bastante agradables, al parecer.
- Sira. ¿Por qué no le enseñas a Nate la casa?
- ¿Solo a Nate?
- Si. Sus padres ya han estado aquí más veces.- dijo mi madre delante de todos. Yo quise que la tierra me tragara en ese momento.
- ¿Enserio mamá?
- Claro. ¿Por qué no? Sabes que nunca bromeo demasiado.- el caso es que mi madre ya iba un poco alegre por los vermus que se estaban tomando.
- Si. Vale. Le enseñaré la casa.
- Eso, eso. Así nos os quedáis ahí como dos pasmarotes.- bramó mi padre. Quise responderle más no encontraba ni las palabras. Además supe que no era el momento.
Llegamos a las escaleras.
- Aquí abajo no hay mucha cosa interesante realmente, la cocina, el salón, que bueno ya lo has visto , por allí hay un pequeño despacho, el cuarto de la colada...
- ¿No me lo vas a enseñar?

- Si de verdad quieres verlo, vete tú solito

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- Si de verdad quieres verlo, vete tú solito.- le solté mirándolo con desprecio.
- Mejor vamos arriba.- respondió el metiendose las manos en los bolsillos.- Parece, como tú dices, más interesante.- rodé los ojos.
- En fin.- empecé a subir las escaleras. Iba a paso firme y decidido. Ese capullo no se iba a salir con la suya tan fácilmente. Menos, estando en mi casa.
- ¿Te gustó lo de anoche?
- Eres un gilipollas. Te voy a denunciar.
- En el vídeo parecía que lo disfrutabas bastante.
- ¿Pero cómo puedes ser tan capullo?- exclamé.
- Tus padres te van a oír y te van a castigar por llamarme capullo. O eso... o te castigo yo.- añadió mordiéndose el labio y acorralándome contra la puerta de mi habitación.
- Ni me toques. Soy capaz de gritar más alto que antes. Créeme a mi no me va a castigar nadie.
- ¿Segura?- intentó besarme pero le hice la cobra y con la mano derecha abrí la puerta de mi habitación. Salvada. El chasqueó la lengua.- Qué cabrona.
- Esta es mi habitación. Bien, ya está. Te he enseñado la casa.
- ¿Las demás habitaciones no me las vas a enseñar?
- Pues no. Lárgate.
- No te vas a librar tan fácilmente Sira.
- ¿De qué? ¿De ti? Uy.
- Uy qué.
- Nada chico que das mucha pena. Eres un cobarde.- le reté. Él se marchó sin decir nada. Sonreí satisfecha. Aunque sabía que tardaría poco en volver a encontrarme con él.

Fezco y tú ( Euphoria) 💔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora