Fezco y tú ( Euphoria) 💔

Capítulo 45- Desgracias

Corrí y corrí. Me sentí desfallecer del esfuerzo. Llamé a la puerta tan fuerte como pude sin darme cuenta de que había timbre.
- Voy.- casi gritó una voz desde dentro. Abrió Fez.- ¿Qué haces aquí?- vi su ojo morado y el labio partido. Parecía que ya se había desinfectado las heridas.
- Estás estupendo.- le dije.
- Anda pasa. Entiende que no quería preocuparte.
- Joder Fez. Pero al menos no me mientas y me digas que estás bien.
- Tampoco estoy mal.- suspiró.- Me han pegado palizas mayores.
- Fez. Eso no justifica nada. No tienes por qué pelear con él si no quieres. Me parece muy fuerte que tengáis que llegar a esos extremos.- me acerqué a él con algo de temor por cómo pudiera reaccionar.
- Con ese señor no hay otra forma. Es un demente.
- Deberías dejar de pelear.
- Intenté...- le costaba respirar.- te juro que lo intenté.- iba a interrumpirle pero no me dejó me puso un dedo en los labios.- Traté de ser razonable, de hablar con él Sira. No me reproches nada por qué no tienes ni idea.
- Te entiendo. Personas malas hay por cualquier lado.- añadí.- Sé que lo intentaste. ¿Vale?
Él llevo las manos a la cabeza.
- Si es que soy estúpido.
- Venga no digas chorradas Fez. Eres increíble. Perdona por haber dudado de ti. Enserio.- le cogí las manos.- Cálmate.
- Si es que es normal que dudes. Todos dudamos en algún momento.
- Si. Pero ya lo hemos hablado.- respondí sería.- ¿Todo bien?
- Supongo...- murmuró.
- Venga no me seas.- le di un abrazo.
- Sira. Me haces daño.
- Jobar lo siento.- ambos reímos.- ¿Te duele mucho?
- Un poco.- comentó él.- Esto es lo que me hizo pero no quiero darte pena.
- No me la vas a dar.- contesté.- Nunca me la darías. ¡Joder! Menudo cabronazo. ¿Él te hizo eso? Tiene muy mala pinta.
- Tranquila, tranquila.
- Como te haya dañado algún órgano o lo que sea... Igual deberías ir al hospital para comprobar que todo está bien.
- No voy a meterme ahí solo por esto.
- Joe pues como quieras. Paso de seguir discutiendo. Al final harás lo que te salga.
- ¿Sigues enfadada?
- No.- me crucé de brazos.
- Sira...
- Si yo te entiendo pero...
- Deja de preocuparte por mí. Acabarás destrozada.- me miró muy serio.- Esto es lo que me temía.
- Es normal que la gente se preocupe por ti. Se supone que salimos, ¿no? Pues no entiendo dónde está el problema.
- El problema soy yo ostia. Cuantas veces vamos a hablar de lo mismo. Si es que hasta tus amigas te lo dicen Sira. Vas a sufrir y aún así sigues conmigo. ¿Eres masoquista?
- Fez vamos a dejar el tema. Por que siempre andas con lo mismo. Ya está bien. Si estoy contigo es por que quiero. Al final el qué se va a preocupar más por mí eres tú.
Él me miró. Yo no le aparté la mirada aunque su mirada a veces era un poco siniestra.

Con Maddy...

Ella cerró los ojos e intentó no gritar. Le había echado la pota encima. Qué asco. Iba a potar ella también. Uf menuda peste.
- Jobar Dani. Podrías no sé haber dicho que te encontrabas mal e íbamos al baño y vomitabas allí. En fin... da igual ya. Vamos a tu habitación. Ya limpio yo todo esto.- Antes se quitaron la ropa manchada.
Maddy estaba con los vaqueros y en sujetador únicamente y al niño, después le dio una ducha rápida y lo metió en la cama.
- Hola.- Aron se asomó por al puerta del cuarto de baño mientras Maddy duchaba al pequeño.
- Ah hola.
- Anda ya lo hago yo.- añadió él.
- Puedo hacerlo yo tranquilo.- suspiró ella.- Ha vomitado en el salón.
- Está bien voy a limpiar lo del salón.
- Tus padres llegarán de un momento a otro.
- Lo sé me dijo mi madre que iba a venir al final un poco más tarde que se lío con algo.- comentó él.- Ey Dani.- le dio un beso en la cabeza.- Venga, qué pronto ya estarás durmiendo en tu camita.
Maddy sonrió.
- Me bajo.- avisó a Maddy.
- Esta bien...- le observó mientras se iba.- Vamos Dani.- le secó el pelo y el cuerpo con una toalla.- Joe tienes un pelo precioso. ¿Qué champú usas? Yo quiero este pelo. Enserio.
- Pues uso uno que no me acuerdo ni de como se llama. Pero tú también tienes un pelo muy bonito.
- Ay mira que eres mono.- exclamó Maddy dándole un beso.- Venga vamos a la cama.
Le acostó en la cama. Él la agarró de la mano.
- No te vayas...
- No voy a irme. Solo iba a apagar la luz.- el niño la abrazó fuerte.- Tranquiló. Me quedo contigo el tiempo que haga falta.
- ¿Si?
- Si.- le acarició la frente.
Vi a Aron entrar en la habitación.
- ¿Puedes apagar la luz?- le pregunté en bajo.
- Si. Claro.- añadió el moreno. Luego vino hacia nosotros en la penumbra. A la chica le hizo gracia ya que se podía pegar una buena leche si iba así a oscuras.
- Te la vas a pegar Aron.- bromeó Maddy. Alargó la mano para ver donde estaba el chico. Su mano encontró la suya.
- Ah gracias.- intervino este.
- Nada hombre.- sonrió Maddy.
- Te traje una sudadera por si tenías frío.
- Ah, gracias.
- Metí la ropa en la lavadora. Así que cuando vuelvas el próximo día la coges.
- Genial. Gracias.
Se oyó cómo se habría la puerta de la casa.
- Ya llegó mi madre.- anunció Aron.
- Pues yo me voy ya entonces. Creo que ya está dormido. Así que no hay ningún problema.
Ambos se levantaron de la cama y Maddy se puso rápidamente la sudadera.
- Te queda mejor que a mí.- le soltó el chico.
- Me queda enorme. A poco más y lo uso de vestido.- bromeó la peli negra. Cogió el móvil y vio bastantes llamadas pérdidas de su madre. " Oh, mierda."Pensó ella.- Debo irme.
Aron me acompañó hasta abajo.
- Ey Maddy. ¿Todo bien?- saludó la madre de Aron.
- Bueno, yo si. Pero Dani el pobre tiene una fiebre e incluso ha vomitado.
- ¿Si? Jobar. Pues subo ahora mismo a ver cómo está.
- Esta en la cama. Supongo que se habrá dormido ya.- comentó Maddy.
- Ah vale. Gracias Maddy.- sonrió la mujer.- ¿Vienes mañana a la misma hora no?
- Por supuesto .
- Vale, vale. Yo te lo preguntaba por si te habías cansado ya de mis hijos.- bromeó ella.
- Que va.- Aron sonrió ante la repuesta de ella.
- De mi un poco si te has cansado. ¿No?
- No digas tonterías Piper.- le respondió ella.- Me tengo que marchar. Nos vemos mañana.
Allí se quedaron los dos viendo como la morena cerraba la puerta y se iba a su casa.
- Uy Aron.- le dijo su madre.
- ¿Qué dices mamá?
- Nada hijo. Cosas de madre.
- No. No es lo que piensas y no empieces por favor.
- ¿Qué no empiece? Pero si eres tú el que le tira la caña delante de mí. Me lo pones a huevo.- Aron resopló .- No hijo, no pongas esa cara por que eso vamos se huele desde aquí.
- Lo único que yo huelo es olor a vómito.- contestó borde Aron.
- Mira qué eres cabezota. Entonces, ¿Por qué lleva tu sudadera?.
- Joder mamá. No hemos follado ni nada. Tampoco me gusta. Déjalo estar por una vez en tu vida.- exclamó Aron.- Dani le vomitó encima entonces le tuve que dejar algo.
- Ni me vuelvas a hablar así.
- Así cómo mamá. ¿Como le hablabas tú a Sarah?
- No menciones a esa zorra que casi te jode la vida.
- Esa zorra era mi novia y tenías que respetarlo.
- Vamos a olvidar ese tema. Ya es pasado.- su madre cogió botella de vino.- Más te vale ir con cuidado Aron. Hay chicas que solo se van a acercar a ti por dinero. Es la realidad en cuanto antes lo asumas antes empezarás a ser menos fácil.
- Que te jodan. No soy fácil y Sarah tampoco era una zorra. ¿Y si lo era? ¡Qué más da! Joder. Yo la quería.- gritó él subiendo a su cuarto.
- Este niño solo me da desgracias...- murmuró ella bebiendo una copa.