Maddy 🖤
Maddy: tiaa es Pol
Yo: que ?
Maddy: me ha preguntado por ti
Yo: COMO?
Maddy: que si. Muy heavy eh
Yo: bueno a ver es un profe... otros tmb me han escrito y demás...
Maddy: ya pero me ha dicho otra cosa
Yo: me preocupas Maddy
Maddy: la q me preocupas eres tú 🫣
Yo: ya... lo siento
Maddy: Faltaría más . No te disculpes nena
Yo: bueno que
Maddy: que se iba a pasar por tu casa ahora o algo así.
Yo: Que? No tiene sentido. Está loco. No pienso abrirle.
Maddy: ya le dije yo que no creía que fuera una buena idea. Pero insistió. Igual solo habla con tu madre...
Yo: Joderrr ...- Hija . Baja un momento.
- ¿Por?
- Porque lo digo yo. Baja ya. Y así no andamos a voces. Prefiero hablar sin gritar.- exclamó mi madre.
Baje rápidamente.
- ¿Qué? ¿Qué pasa?- pregunté impaciente.
- Es que no sé qué preparar mañana para comer. ¿Qué quieres?
- ¿Solo era eso?
- También era para que interactuaras un poco con nosotros. ¿Quieres ayudarme con la comida?
- No sabes ni qué vas a hacer... Además yo tampoco tengo ninguna idea...
- Pues piensa algo. O si no ayuda a tu padre que está arreglando una cosa en el salón.
- Bueno, pues te ayudo a ti. Pero con el postre.
- ¿Quieres hacer un postre?
- Si.- afirmé algo animada.
- Bien... pues... ¿Qué te parece si lo eliges tú? Yo he decidido según lo que tenemos en la despensa que comeremos pasta y ensalada.- comentó ella.
- Wow qué rápida eres tomando decisiones.
- Si. Puede que eso no lo heredaras de mí.
- Ojalá.- confesé resignada.
- Tranquila amor. Todo a su tiempo. A veces es muy difícil tomar decisiones.
- Lo sé.
- A la hora de tomarlas no elijas la opción más fácil. No lo hagas con miedo. ¿Vale niña?
- A veces la más fácil puede ser la correcta.
- Solo quiero decirte que aproveches todo lo que tienes a tú alcance y actúes con cabeza. Hay cosas que no hay que hacerlas por qué sí o sin pensar.
- Ya. Soy consciente.- contesté mirando qué teníamos en la nevera.- ¿Hacemos brownies?
- Vale. Me parece una idea fantástica.
Llamaron a la puerta. Joder, parece que en mi casa, a veces venden algo.
- Abre Sira.
- ¿Esperáis a alguien?- pensé:" Que no sea Pol."
- No. ¿Tú?
Abrí la puerta y... ¡Bingo! Yo no sé para qué pienso nada. Era él.- Hola Sira.
- ¿Qué haces en mi casa?- le espeté.
- Perdón. Sé que no debería venir hasta aquí pero era para ver cómo estabas. Aparte por si pensabas seguir faltando a clase puedo ...
- No necesito nada de ti Pol. No te ofendas pero le preguntaré a alguien.
- Esta bien. Lo entiendo. Pero no creo que tus compañeros te puedan explicar el temario de biología como yo.- alzó una ceja.
- ¿Qué pasa aquí?- mi madre irrumpió en la escena. Genial. Suspiré.
- Nada mamá.
- Solo quería ver cómo estaba su hija. Soy Pol. Su profesor de biología, encantado. Sé perfectamente que este no el lugar más adecuado pero el temario de biología de este año es muy difícil y creo que sería bueno que te lo entendiese todo para selectividad.
Más eso ya es decisión vuestra.
- Ella está recuperándose. Seguramente pronto vuelva al instituto...- empezó mi madre. Yo le di un codazo.- Hija. El caso es que si sería interesante que le explicases algunas cosas. Últimamente va muy retrasada. No ha hecho nada estos días.
- Flipo.- dije enfadada.- Mamá no puedo.
- Claro que puedes hija. Solo serán un par de clases aquí en casa. Además así igual te motiva para ya sabes... seguir con el curso con normalidad. Tienes que pasar pagina aunque sea difícil.
- Puedo venir en cualquier otro momento. No es necesario que tomes las clases Sira. Créeme que no quería meterte presión.- se le veía preocupado.- Era una recomendación más te entiendo.
- ¿Que me entendéis? ¿Os estáis oyendo? No tenéis ni puta idea. Ese chico es un asco de persona y sigue suelto. Sigue suelto por que no hacen nada. ¡Nada!- exclamé. Subí corriendo a mi cuarto.
- Perdona a mi hija. Si quieres puedes subir.
- ¿Cómo?- preguntó Pol extrañado.
- Si. Yo te pagaré por las clases.- insistió mi madre casi cogiéndolo por el brazo.- Mi hija no está bien. Igual tú puedes ayudarla para que no abandone tan fácilmente. Esa es una de las labores de los profesores, ¿no? Animar a sus alumnos día a día.
- Claro...- murmuró Pol dubitativo.- Pero... no puedo...
- Si puedes. Hazme este favor. Hazlo por Sira. Quiero que vaya a la universidad el año que viene. No puede desperdiciar el año.
- Ella no está bien psicológicamente hablando.- añadió Pol.
- Si no está dispuesto, ¿ paraqué se ha presentado en mi casa? .- debatió ella.
- Hablaré con ella.- cedió Pol.
- Te acompaño a su habitación.- dijo mi madre con una sonrisa. ¿Quien hubiera imaginado esta situación? Surrealista.- Ya verás como al final no pasa nada y se arregla todo.
- Eso sí. Nadie se puede enterar de esto.- dijo Pol.- En el instituto digo.
- Entiendo. Se lo diré a Sira. No dirá nada. Te lo aseguro.- aseguró mi madre dándole unas palmaditas en el hombro. Se volvió de nuevo hacia Pol.- Si no di que te lo pedí yo. Digo el que le dieses clases.- Llamó a la puerta.- Sira. ¿Se puede?
- No. Me estoy cambiando.- grité.
- Abre cuando puedas. Es urgente.- añadió mi madre por detrás de la puerta. Lo cierto es que no me estaba cambiando pero no me apetecía nada hablar con ella. En ningún momento pensó en mí. Bueno, sí. Pero no en cómo me siento ahora. Solo quiere que termine los estudios. Yo también quiero terminarlos pero me encuentro sin ganas. ¿Qué iba a hacer?
- Sira. Abre ya.- ordenó mi señora madre.
- Voy.- resoplé.- ¿Qué cojones?
- No seas mala hablada niña. Os dejo.- me miró fijamente.- Darás las clases. Hablamos luego.
- ¿Me vacilas?
- Ni se te ocurra replicar.- Bajó las escaleras dejándome con el rubio.
- Véte.
Nos miramos y le cerré la puerta en la cara. Él la abrió enseguida aunque intenté impedírselo.
- Sira. Escúchame.
- ¿Nadie me escucha? Vete.
- Vale. No te daré clases. Yo no quiero meterme ni meterte en más problemas. -Me di la vuelta. Decidí ignorarlo. - Sira. Quiero ayudarte.
Seguí ignorándolo. Él se quedó allí con las manos en los bolsillos observándome.
- Estás en mi casa. En mi habitación. Te he pedido que te vayas.- le miré muy seria.- ¿Quieres ayudarme ? Haz lo que te digo. No me trates con pena. Ni se te ocurra mirarme así.- me acerqué a él. Él no se movió.
- Tu madre me ha dicho que te de clases. Sin embargo, denegaré la propuesta.
- Joder. Que culto. Menudo vocabulario.- me burlé siguiendo ordenando cosas de mi cuarto.
- Eres una chica increíble. No dejes de brillar por ese capullo.- Fue todo lo que dijo antes de marcharse.
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Fezco y tú ( Euphoria) 💔
FanficSira es una chica de diecisiete años que nunca ha roto un plato con muchas inseguridades y miedos. Llega nueva a una ciudad en la que cada uno de sus habitantes, cómo todo el mundo, tiene su propia historia con sus propios problemas. Ella no tiene...