New Orleans, Luisiana.
Marie
La trayectoria hasta el restaurante se mantuvo calmada, expectante y silenciosa. No era un silencio incomodo sino uno que todos necesitábamos. La última vez que vi a Fabrizzio modo siniestro fue cuando estaba torturando al que había mandado al hombre que me violó. Aunque le dije a Fabrizzio que iba con él demostrando que acepto su lado oscuro, pero no puedo evitar que se me erice la piel. Y es que se transforma en algo mortal y sediento de sangre.
Mi mano sobre la de él se aprieta haciendo que me mire. Pongo mi cabeza sobre su hombro mientras mi mirada se traslada a Fabi que mira tranquila por la ventana. Es una niña muy fuerte, por todas las cosas horribles que ha pasado con su madre y los hombres de negro, se me encoge el pecho.
— ¿Eres más de pizza o hamburguesa? A tu Fabrizzio le gusta mucho la pizza.—trato de que haya tema de conversación entre ambos.
Fabi me sonríe y se le alumbran los ojitos cafés.
—Supongo que las hamburguesas que no saben agrio, algunas veces tengo suerte y mami me consigue casi nuevas con una sola mordida y que no han pasado mucho tiempo en la basura. Y una vez un señor de un restaurante me compró un Hot Dog.
Noto como a Fabrizzio se le ponen blanco los nudillos.
—Bueno hoy probarás una hecha para ti solita. — me inclino pasándole un dedo por su mejilla. Ella mira a Fabrizzio.
—¡¿También habrá coca cola fría y con burbujitas?! —me conmueve su entusiasmo por una cosa tan simple como una coca cola.
Solo hay silencio por parte de él. Y asiento hacia ella sonriéndole.
—Llegamos. — avisa el chofer. Suspiro por la falta de tacto o calidez de Fabrizzio para con Fabianna.
Ayudo a la niña bajar del auto, me detengo en seco al ver muchos trajeados con pinganillos al oído. Identifico por lo menos ocho guardaespaldas y otros cuatros que se estacionan saliendo de un 4x4 negro. Pego a la niña a mi costado y miro a Fabrizzio que se mueve como pez en el agua. Desprende esa energía dominante y poderosa que hace que se me reseque la boca y se me aprieten las piernas, la misma que poseía el día que me mostró como hacia pagar a uno de los que orquestó mi violación.
Muevo ligeramente la cabeza para sacar las imágenes de sangre, gritos y pedazos de carne y órganos. Traté de mantener mi estomago durante la tortura, mayormente me agarré con uñas y dientes del enojo y la sed de venganza que me recorría el cuerpo, pero al final de la noche Fabrizzio me sostuvo en el baño mientas soltaba lo que había ingerido durante la semana.
Tomando una respiración larga me muevo para entrar, pero Fabianna se queda estática en el lugar impidiendo que me mueva.
—¿Qué pasa?
—Aquí no soy bienvenida, el señor de blanco me corrió, no quiero que me vuelva a correr Marie. Había un niño dentro que se burló de mi cuando el señor me tiró una caja de espaguetis malolientes para que me lo comiera y me fuera. El otro niño salió a ayudarme, pero sus padres no lo dejaron. Dijeron que podía tener sarna... —con ojos llorosos me mira haciendo que se me contraiga la garganta. — ¡Yo no tengo sarna Marie!
—Claro que no corazón...—me agacho para quedar a su nivel. — Y no tienes porque no sentirte bienvenida a sitios como este. —pongo mis dos manos en sus cachetes y le levanto la barbilla. —Porque nada se te queda chiquito. Nosotras entramos, hacemos y decimos con el mentón en alto lo que se nos dé la gana y a quien no le guste, que se suicide.
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Loca Por Un Mafioso©
Lãng mạn⭐Trilogía Obsesión.❤ Libro II Independiente del primero, por lo que no es necesario que lo leas en orden. ⚜⚜⚜⚜⚜⚜⚜⚜⚜ Ella es loca, sin filtro y segura. Él es controlador con un carácter de mierda y una bestia dentro. Fue el prime...