Loca Por Un Mafioso©

Capítulo 3

Marie Macklain

El corazón me latía mientras este morenazo me arrinconaba a la pared del elevador y nos comiamos la boca el uno al otro, sus labios me parecian muy familiares, el sonido del elevador mientra estaba en stop resonaba pero no entraba a mi cerebro, su boca caliente y sus fuertes manos violaban mi virginal cuerpo (jaa..virginal..q bella descripcion para mi calenturriento cuerpecito). Pero algo en mi se activó de inmediato y lo empuja, nos quedamos mirandonos el uno al otro.

Esos ojos, color avellana me miran con lujuria y algo más que no logro identificar, desecho el pensamiento de mi alocada cabeza.
-Te juro que te violaba aquí mismo pero...-lo beso mordiéndole ligeramente él labio inferior y me despego por completo mordiendome los labios  y presiono el botón del elevador- una carita bonita y unos brazos fuertes no valen lo que pasará si alguien me ve…. –con la misma me piro del elevador con una calentura a mil.

Entro a mi coche y me dirijo a mi casa a complacer a mi padre. Pero ese morenazo me dejó con ganas de una bien grande.
Entro a mi casa, veo que las arpías amigas de mi madre están parloteando y con la misma, sin saludar, subo las escaleras hasta mi habitación. Me quito la ropa para entrar a la bañera y abro el grifo para que se llene, mientras, paso mis manos por mi cuerpo, cierro los ojos imaginandome a ese hombre tocar cada centimetro, me pellisco los pezones y una de mis manos van hacia mi entrepiernas, juego un poco allá bajo, mis dedos resbaladizos por mis jugos se introducen dentro de mi vajina causando un gran placer.
-Mmmmmm- un gemido sale de mi boca , el agua de la bañera esta tibia y con el movimiento de las manos causan olas que golpean mis pezones duros y sensibles, mi mano se empieza a mover más rapido sobre mi clítoris y todos mis musculos empiezan a contraerce recibiendo el tan anciado orgásmo. Me quedo un momento quieta sin mover un músculo, dejando que las endorfinas recorran mi torrente sanguineo extaciandome como solo un alcohólico le satisface el alcohól.

Cuando me siento relajada empiezo mi baño demorandome a propósito, se me a antojado mimarme un poco.
Cuando salgo, veo en la cama un vestido muy elegante. Mi madre como siempre queriendo que me ponga vestidos de gala ni que fuera la gran cosa, me ajusto mis estenciones de colores, me coloco unos leggins color vino y un pulover blanco pongo el alta voz con la cancion de Pink “Just like Fire”.
Dan las siete de la noche y el monigote de los Mazzini está al llegar, unas llantas se sienten por la ventana y se que es el susodicho. Espero unos diez minutos y pongo la musica a todo volumen ya que hay altavoces distribuido por toda la casa. A mi madre le debe estar dando un ataque con la canción “Sweet but Psyco” de Ava Max, porque si no es un viejo esclerótico detrás de un piano entonces no es música para ella.

Bajo con cara de inocente y veo como mi madre pasa trabajo para apagar el sistema de audio, yo muy solidaria tomo el mando que és, lo apago porque el que habia tomado ella era el de la chimenea. Y me gano una mirada asesina de ella, yo solamente le sonrio con dulzura, ella rueda los ojos y me toma del brazo encaminandonos hasta el comedor mientra me recrimina por la forma de vestir.
-Disculpe el alboroto, a mi hija se le olvidó desconectar el sistema de audio de su habitación- ruedo los ojos y caen en el recién espécimen favorito de esta fiel servidora, me quedo congelada viendolo y el se queda un poco en shock pero se recompone de inmediato porque da una sonrisa cordial.
-Usted debe ser, Marie..-me ofrece su mano y yo no puedo dejar de mirarlo, mi madre me da un leve empujón.Y automaticamente le ofresco la mía.
-Y usted debe ser el monigote de los Mazzini..-suelto mi mano de la suya lo mas rápido que puedo.
-Marie!! Disculpate con el Señor..- Mi madre me aprieta el brazo dolorosamente- Nosotros no te enseñamos a ser mal educada.- Ruedo los ojos, y veo diversión en los ojos del estúpido ese. Le sonrío lo mas falso que puedo.
-Lo siento mucho si se sintió ofendido señor… cualquiera que sea su nombre, la verdad a veces tiende a causar ese efecto…-mi madre me va a sermonear pero antes de eso, el tipejo la interrumpe.
-No me ofendo facilmente, porque no es quien quiere..es quien puede..Niñita..- mi cara se pone roja del enojo..que le pasa al estupido este..-Soy Fa..
-Fabrizzio Mursulinni...-entra mi padre interumpiendolo y le da un apretón de manos – encantado de tenerlo en mi casa.
(No puede ser..Es Fabrizzio, mi Fabrizzio, el chico del que he huido desde que lo hicimos, mi primera vez.)