.Capitulo 27: El lago donde acampamos.

73 74 0
                                    

Hacia un calor fuerte. No había ni una sola nube en el cielo que tapara el sol amarillento. Los viajantes se tapaban con lo que fuera. Mike con su abrigo, Jonathan con su mochila y Elmer tenía tapado a Rey en su espalda con una toalla recibiendo este todo el calor en su cuerpo:

—¿cuánto falta para ciudad México? —promulga Mike.

—Según el mapa llegaremos mañana al mediodía —detalla Jonathan.

—Oír eso y recibir este calor infernal me vuelve loco —exclama Mike.

—No te preocupas, adelante hay un lago. Si seguimos caminando llegaremos en 30 minutos —dice Jonathan.

—¿Para qué queremos ir a un lago? —inquiere Mike.

—¿El calor no te deja pensar?, acamparemos allí y mañana seguiremos o, ¿quieres seguir caminando con este calor? —remite Jonathan.

—No, no, para nada. Ya te entendí.

Deja de mirar a Mike para concentrarse en el mapa. Mike baja la velocidad con la que caminaba para conversar con Elmer:

—Jonathan está un poco serio —susurra Mike.

—Eso es por lo que ocurrió hoy.

—¿tú crees?

—Si, incluso para un hechicero como el esto fue muy desprevenido.

—¿Estas insinuando que el mismo se culpa?

—Su cara lo delata. El quisiera mejorar sus habilidades, pero él no tiene tiempo.

—Lo que paso hoy no fue culpa de nadie, fue algo imprevisto.

—Todos los que estábamos hay lo sabemos, en cambio, él se siente desanimado.

—Esta toalla me provoca más calor de la cuenta.

Los 3 se detienen. Giran su mirada hacia atrás:

—Rey, despertaste —coloquio Elmer por alegría.

—Si, pero ya bájame que yo solo puedo caminar.

Hace caso lo que dice. Al estar en el piso le tira la toalla a Mike:

—¿Que planeaban hacer, cocinarme? —diluye Rey enfadado.

Jonathan se le acerca y se arrodilla mirándolo fijamente:

—¿Planeas besarme?

—Rey es un niño como para hablar de esa manera —examina Jonathan.

—¡Es cierto!, puede de que sea Oscuro —argumenta Mike.

—No sean estúpidos. Soy el mismo Rey solo que cuando Oscuro me poseyó mi mente maduro de una forma increíble.

—¿Que, tu mente creció de inteligencia? —inquiere Jonathan impactado.

—Pero tú eres solo un niño de 7 años —dice Elmer.

—Mente y edad son 2 cosas diferentes. Como sea, sigamos.

Se pone a caminar ignorando a los chicos que lo miraban de manera sorprendida eh impactante al saber que Rey ya no era el mismo tras haber sido poseído por Oscuro:

—Acabamos de perder a nuestro Rey —enfatiza Jonathan.

—Es el mismo pero cambiado —dice Elmer.

—Esperen un segundo —Mike tenía algo que decirle a Rey ya que se adelantó—. ¡Oye, ¿dónde piensas ir si no sabes a dónde vamos?!

Se detiene colocándose su mano derecha en la frente indicando su estupidez. Comenzaban a pasar por la maleza, árboles y arbustos por el pequeño camino que llevaba al lago:

Valientes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora