Valientes.

.Capitulo 44: Enfrentamiento demoniaco.

—Jonathan, ¿qué probabilidad tenemos de ganarle? —inquiere Mike con nervios.

—¿Es a mi quien preguntas? Ese ser puede crear grandes desastres naturales. Incluso fue la mano derecha de Lucifer, ¿respondí a tu pregunta?

—Si, y a la vez diste más razón para que perdamos.

—El motivo por el cual se salvaron la última vez fue porque ese cuerpo no soportaba mi inmensa cantidad de energía. Fue muy difícil que la usara en ese recipiente por lo que fue muy limitado. Ahora que estoy fuera puedo llegar a mi limite.

Decía todo eso con la intención de provocarles miedo en su interior, algo que fue consiguiendo. Sin embargo, él lo decía por un motivo que reconoció en su mente:

—Tuve demasiado tiempo encarcelado, eso bajo seriamente mi poder al no hacer nada, lo más que puedo hacer es asustarlos sin subestimarlos puesto que no conozco de que son capaces. Lo único que no quiero es a ese tipo de pelaje negro, aquella ves sentí algo enorme que brotaba de él, no sé dónde está y ni me interesa, pero mejor que no se aparezca por aquí ya que será un problema grave... —analiza Oscuro—. ¡Ah!

Algo lo golpeo en la cara fuertemente. Fue como un ataque de viento. Apoyo su mano izquierda en el mismo lado de la cara de donde fue atacado, la izquierda. Tomo aliento y se voltea. Era Maikel quien lo había hecho con el fin de desquitar su enojo ante la gran verdad:

—¡Buen insolente, ¿te das cuenta de con quién te metes?!

—Si, me meto con una basura de demonio con el que yo y mis padres desperdiciamos tiempo muy valioso para otras cosas, incluyendo el tiempo en familia —expresa Maikel desafiándole.

—Bueno, me doy cuenta de que el hijo morirá por la misma mano que acabo con sus padres. Despídete.

Levanta su mano izquierda abriendo su palma, en la misma se forma una orbe negra:

—¡Serás cenizas! —grita Oscuro.

—¡Espera, no lo hagas! —grita Mike.

—¡Muy tarde para eso! —intervalo Oscuro.

El orbe sale disparado así no más en dirección a Maikel. Él no se movió ni nada, solo pensaba en la felicidad de volver a ver a su querida madre y a su padre sin importarle que fuera el mismo asesino que mato a su familia. No obstante, Mike lo salva. Lo que hizo fue tirársele encima para así caer los dos al suelo. La orbe negra impacta con la pared dejándola gravemente dañada. El resultado de ese ataque fue sorprendente para Jonathan quien presencia como la pared tenía un color negro mugriento, es como si el propio concreto se pudriera en una asquerosa mancha negra:

—Que horrible se ve eso. Nunca había visto algo así en mi vida —opina Jonathan.

—Te sorprende, piensa en lo que hubiese pasado si mi ataque les pegara a los dos, ¿cuál sería el resultado?

No le responde, no por temor, sino que esa respuesta era muy obvia si pensara en un cadáver descomponiéndose. Como se salvaron de esa, Maikel se acomodó eh interroga a Mike:

—¿Porque me salvaste? Yo no te lo pedí.

—No, pero no iba a dejar que él te matara.

—¿Y eso que? Soy alguien que ha hecho pactos con espíritus malvados. Merezco la muerte.

—Ese es tu pensamiento debido al entorno en el que estuviste. Escucha, tú puedes cambiar tu camino corrigiendo errores pasados. Tu hiciste todo esto por tan solo acabar lo que tus padres comenzaron, pero no es así, no puedes cometer las mismas malas acciones que tus padres. Oíste bien claro lo que ese demonio dijo, el mato a tus padres por gusto, ese demonio fue lo que tus padres iniciaron al traerlo aquí y tú lo terminaste con el mal resultado que ellos por igual tuvieron. Tu y ellos convocaron a un ser que les agradeció de esta manera. Si sigues así tendrás peores o fatales que esto. Recuerda, aun no es tarde para remedir este lio, pero lo más importante, tú no estás solo. Me tienes a mí. Si todo el globo terráqueo te desprecia, incluyendo a mis amigos con los que estoy, te diré algo; jamás te daré la espalda. Siempre tengo fe en alguien como tú que quiere cambiar si te dispones, ¿qué dices? Pongamos a ese demonio en su lugar.