Freddy se encontraba en su cama mientras sus amigos lo observaban con atención y preocupación pintada en sus rostros, esperaban a que despertara. Liam y Sabrina habían logrado conseguir agua y aspirinas en la enfermería mintiendo sobre una caída mientras corrían por las escaleras.
— ¿Qué haremos cuando despierte? — preguntó Liam.
— Callarnos y escuchar — respondió Fido.
— Pero ¿Tenemos que abrazarlo o algo así?
— Liam — regañó Hunter — no es el momento.
— Lo lamento.
Lo observaron unos cuantos cuartos de hora mientras seguía durmiendo plácidamente, pero cuando comenzó a moverse, todos se acercaron para verlo.
Le dolía mucho el abdomen y su cabeza daba muchas vueltas mientras intentaba abrir los ojos, Casandra se apresuró a tomar las aspirinas y el agua para poder sentarse junto a él. Freddy solo la miró atentamente cuando abrió los ojos.
— ¿Qué pasó? — preguntó Freddy mirándolos a todos.
— Freddy — dijo Liam acercándose, aliviado y preocupado — ¿Te sientes bien?
— No lo sé — susurró el moreno — supongo... ¿Qué pasó?
— Solo estábamos volviendo de la ciudad y nos encontramos con una pelea — dijo el pelinegro acercando su mano a la frente de Freddy, pero alejándola cuando notó como este se encogía un poco — te desmayaste.
— Estas bien ahora — sonrió Casandra.
— Cass — susurró Freddy.
— Debes descansar.
— Yo quiero hablar con él — se apresuró Liam.
— Liam — regaño Casandra.
— ¿Qué?
— Déjalo dormir.
— Él me importa, estoy preocupado por él.
— No — murmuró Freddy.
— Fred-
— ¡NO! — gritó él con los ojos llorosos.
— ¿Ves lo que causas? — gruñó Fido levantándose y tomando a Liam del brazo para alejarlo.
— Fido — llamó Hunter levantándose para caminar hacia ellos — no necesitamos esto, estamos aquí por Freddy.
— Tampoco necesitamos que este idiota presione a mi hermano.
— Chicos, cálmense todos — pidió Sabrina mirándolos con enojo.
— Dile a tu amigo que deje de actuar como un idiota — gruñó Fido.
— Ok, sé que estas molesto, pero te pido que le bajes una raya a tu actitud — respondió la rubia enojada.
— No peleen — dijo Freddy angustiado, intentando levantarse, pero siendo detenido por Casandra, quien negaba con la cabeza.
— ¿Tú crees que él no actuaria como yo si te estuvieran presionando a ti o a Hunter? — gritó Fido.
Hunter se apresuró a interponerse en el camino de Liam y Fido cuando vio que su novio estaba dispuesto a pelear con el rubio.
— Guardemos la calma — susurró Hunter — aquí todos somos amigos, todos estamos preocupados por Freddy y por si no lo han notado, esto le está haciendo mal.
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Los Cuentos De Jacobsen
Non-Fiction¿Cuántas veces nos hemos sentido perdidos? ¿Cuántas veces nos hemos sentido solos? Quizás la respuesta a estas preguntas las podamos evadir con una simple respuesta... La Familia, los amigos o tus personas de apoyo. Los Cuentos De Jacobsen es para...