Recuerdos

Capítulo 20

¿Cuándo fue que nos acercamos tanto? Podía sentir su respiración sobre mis labios, tan solo quería que se acercara más. ¿Por qué esa repentina sensación de nuevo?
No era capaz de verlo todavía.

Y cuando estuve apunto de dar un último paso hacia delante algo me detuvo, el tono de llamada de You, eso hizo que nos diéramos cuenta de nuestra distancia.
Se alejó enseguida, me decepcioné un poco, pero no me importó al ver quién la llamaba.

—Es Azumi, debería responder.— parecía preocupada mientras respondía la llamada. Yo también lo estaba, esas expresiones no eran regulares en ella.

—¿Está bien? ¿Qué ha pasado? —le pregunté al verla dejar la llamada.

—Tengo que irme, lo siento.—parecía demasiado importante.

—Está bien, no importa —respondí.

—Te quiero —dijo al mismo tiempo que me abrazaba.

Mis visiones se hicieron algo confusas, You desapareció sin haberla visto separarse de mí, entonces me quedé sola. Pero eso no fue lo único extraño, ya no estaba en la puerta de mi casa, estaba frente a un puente, miré al río y todo se hizo confuso de nuevo, comencé a marearme. Y poco tiempo después volví a despertar.
Solo fue un sueño. Otro más.

***

Andar por los pasillos del instituto pensando en todo y a la vez en nada era ya algo muy común, lo malo era no obtener respuesta. Y como de costumbre iba andando tan inmersa en mis pensamientos que no me fijé cuando choqué con Kai.

—¡Mira por dónde andas estúpida! —me gritó. Aunque al parecer no me vió bien hasta que me disculpé.

—Oh, Chika, cuánto tiempo.

Traté de ignorarle y seguir andando pero me agarró de la muñeca.

—¿A dónde vas? Tenía algo que decirte, te estaba buscando.

—¿Qué quieres ahora? —me giré hacia él con algo de miedo.

—Últimamente estás rara, más despistada que de costumbre. ¿En qué piensas tanto? Parece ser algo bueno.

¿A qué venía eso tan de repente? ¿Acaso quería que se lo dijera tan fácil?

—Estoy igual que siempre —dije apartando su mano de encima mía.

—No creo que lo digas en serio, no te veo así desde que ocurrió el accidente, seguro que encontraste el reemplazo de You.

—¿Qué? ¿A qué te refieres? ¿Conoces a You?

—Oh, ¿la recuerdas?

—¿Recordar?

Él tan solo se rió.

—Ya veo.

Entonces Kaede apareció a mi lado y me cogió la mano.

—Chika, te necesito para una cosa —me dijo, entonces miró a Kai.

—Vaya, mucho tiempo sin verte, pareces estar bien —añadió Kai.

—Déjala en paz idiota.

Fue lo último que dijo antes de llevarme lejos de él.

—¿Estás bien? —me preguntó.

—¿Qué acaba de pasar? —me sentía confundida, no entendía nada.

—Te vi hablando con él y no esperaba nada bueno, ¿te ha dicho algo?

—No. No me ha dicho nada, gracias por ayudarme.—le sonreí.