Los perdedores y vos

capítulo 77

___: ¡y Stan? - pregunté al ver que no se encontraba ahí -. ¿dónde está?.

Por sus expresiones supe que ninguno de ellos sabía la respuesta, así que seguimos caminando medio agachados por aquel túnel hasta que llegó a su fin con una pequeña bajada.

Eddie: que asco, son aguas grises - exclamó asqueado cuando se bajó de ese túnel, porque ahora estábamos cubiertos hasta las rodillas de aquello.

___: no es tiempo de quejarse, Eds.

Seguimos adelante hasta que escuchamos un grito de nuestro amigo desaparecido, entonces corrimos hacia la dirección del sonido. Ahora estamos en un lugar similar a los túneles pero más grande.

Eddie: la linterna de Stan - señalo a aquel objeto tirado en el piso.

Cuando fue a levantarla, la luz de esta alumbró una escena horrible, la del chico Uris tirado en el suelo mientras una mujer rara o lo que sea, le estaba comiendo la cara. Literalmente.

Todos nos asustamos y gritamos, causando llamarle la atención a esa criatura para que deje de comerle la cara y mirarnos.

___: ¡DEJÁ A NUESTRO AMIGO!, PEDAZO DE... - me iba acercando, pero alguien me detuvo.

Miré hacia atrás y Richie me miraba con miedo mientras sostenía con fuerza mí mano, atrayéndome más a él. Así que sin renegar, me quedé a su lado. La mujer nos miró con una sonrisa tenebrosa, y fue caminando para atrás, entrando por un túnel, pero no pasaron ni cinco segundos cuando asomó su cara, pero ya no era la misma, ahora era la cara de eso. Luego se volvió a esconder y nosotros corrimos a socorrer a Stan. Él parecía estar inconsciente o en un tipo de trance, ya que estaba totalmente inmóvil, pero en el primer toque se incorporó rápidamente y asustado. Nosotros intentábamos calmarlo porque no paraba de gritar y decirnos que somos malos amigos por abandonarlo, y en cierta forma tenía razón, pero por el otro no porque los fuimos a rescatar.

Sentí un pequeño sollozo de mí lado derecho, así que volteé para ver quien era, y se trataba de Richie. No hacía falta preguntarle para uno darse cuenta que está mal por su amigo, entonces decidí tomarle la mano para que sepa que todo estará bien. Él al darse cuenta de aquello me dedicó una sonrisa realmente tierna, y se secó una lágrima con la otra mano.

Una vez que logramos tranquilizarlo un poco, nos unimos todos en un abrazo.

Eddie: ¿Bill? - dijo detrás nuestro.

Nos separamos y notamos que aquel nombrado recientemente no se encontraba con nosotros, así que fuimos a buscarlo.

___: encontramos a uno y se nos pierde el otro, mal ahí - hablé para mí misma.

Richie: por mí no te preocupes, nena, que yo nunca me alejaría de vos - dijo en un casi susurro cerca mío, y yo negué graciosa.

___: dejá de hacerte el Romeo por un rato y seamos un poco más serios por un momento.

Richie: ___ Kaspbrak, la chica que siempre se ríe de mis chistes y que también los hace, ¿me está pidiendo que no haga más bromas? No lo puedo creer.

___: pensándolo bien, ni yo me lo creo. Vos seguí con lo tuyo mejor y fue.

Seguimos buscando a nuestros amigos hasta que llegamos a una parte con una puerta gigante y redonda, de esas que tenés que girar un caño para abrirla, como una caja fuerte. Entre todos intentamos abrirla pero era muy pesada, más no nos rendimos hasta que logramos abrirla por fin. Entraron todos y yo también lo iba a hacer, pero una voz me distrajo.

X: ___, ven rápido, ayúdame! - aquella voz provenía de algún lugar no tan lejos de acá pude notar.

___: ¿Bev?. ¿Dónde estás?.

Beverly: no lo sé, está muy oscuro y no puedo ver nada. Por favor, vení.

___: no te preocupes, solamente esperá que le digo a los chicos para que vengan.

Beverly: no lo hagas, mientras que los vas a buscar puede venir ese horrible payaso. Tengo miedo.

___: ok, entonces seguí hablando para que pueda encontrarte.

Así fue, fui lo más rápido posible en búsqueda de mí amiga, mas la seguía sin encontrar y cada vez me alejaba más del resto, pero cuando estaba empezando a pensar que fue una mala idea haber venido sola, logré escucharla mucho más cerca. Cuando giré en una esquina ví a la pelirroja arrodillada con la cara tapada por sus manos mientras sollozaba.

Beverly: por fin llegas.

___: Bev - me arrodillé a su lado y la abrasé -... Tranqui, ya estoy acá con vos.

holaaaa, se que pongo los mismo al final de los capitulos las ultimas veces que actualice, pero es la verdad, no quiero abandonar esta historia y que sea otra de las que nunca terminan, pero ahora de a poco quiero continuarla.

Bye y perdon otra vez por no actualizar en tanto tiempo.