Diario de una mártir

💮Disculpa💮

Querido padre:

Un árbol, un bendito árbol enano se ha convertido en un chiste interno entre nosotros.

Han pasado algunas semanas desde la última vez que he escrito y me apena decir que no ha pasado mucho en realidad.

Estos días Pericolo y yo nos hemos sentido un poco enfermos pues claro está que visitar el mar a mediados de invierno no fue nuestra ideas más brillantes, aunque el hecho de haber visto a mamá feliz hizo que todo esta molestia de la gripe valiera totalmente la pena, además el frío parece no afectarla en absoluto pues en toda la casa es a ella la única quien no padece fiebres o catarros, son en momentos como este que le tengo envidia. También en los últimos días se ha vuelto una especie de broma el asunto del árbol, es común escuchar a Pericolo o a mamá diciendo "pórtate bien por qué si no se le caerán la ramas al árbol", "no discutas o de lo contrario el árbol no dará naranjas" o "duérmete ya o los azahares se marchitarán", ningún comentario ha traspasado lo inocente pero bueno, tu entiendes, estoy harta.

Ya pasado mi asunto con el árbol y el cumpleaños de mamá nos volvimos a enfocar en el tema de Prosciutto ya que en esos días más que nunca estuve tan furiosa, mi intención era volver a ver a Prosciutto y disculparme, sin embargo, su ausencia fue la única variedad en el coro durante esos días, comprenderás padre la razón de mi molestia pues por un momento imaginé lo peor, Pericolo habría ofendido a tal punto a mi querido amigo que esté había decidido no aparecer nunca más en mi vida, fue entonces que mi tristeza se convirtió en enojo y mi enojo en preocupación, necesitaba disculparme así fuera está la última vez que lo viera.

Mamá fue la primera en tomar la iniciativa y después de una breve discusión, ella y Pericolo avalaron la noción de disculpa, esa noche los tres nos sentamos en el comedor y redactamos una disculpa educada y sincera para mí mejor amigo, pero él no ha vuelto a aparecer. Han pasado semanas ya desde la última vez que le he visto, me he atrevido a preguntar por él incluso, pero absolutamente nadie tiene respuesta, todos en casa estamos preocupados por él y aunque mamá aseguré que ya pronto aparecerá su ausencia es un asunto que no deja de darme vueltas por la cabeza. Me aventure a caminar un poco y buscar el hueco del pescador pues de todas las personas que supuse podrían ayudarme tan solo pude pensar en él, también él está desaparecido.

De nuevo me he sentido mal.

Pronto será nochebuena y el pueblo tiene ese aire pálido de la época, no he podido sentirme feliz pero he tratado de esforzarme. Está será la primer noche en qué Pericolo se quedará con nosotras y debo admitir que apesar de todo eso es algo que me emociona. Pericolo ha insistido en que le acompañe en hacer las compras y claro está que al no ser nosotros una familia numerosa es cuestión de tiempo acabar.

Ayer me llevo con él otra vez, me dejó escoger algunos libros y dulces pero en un momento se puso serio e hizo algo de lo que no lo creí capaz, pedir disculpas. No me malinterpretes, Pericolo es un buen hombre, de eso no tengo dudas, sin embargo, cada vez que hay un problema madre o yo somos quienes suelen interceder a favor de la paz, nunca lo había visto de está forma, admito llegó asustarme.

Aveces me cuenta secretos, aveces dice cosas que yo nunca bajo ninguna circunstancia debo repetir pero un "perdón" así de sincero me hizo erizar la piel, por un momento quise seguir estando enojada pero no pude, ya no pude seguir haciéndome de la vista la gorda, no es como si no pudiera pretender que la amistad entre una niña y un adulto joven no suena espeluznante. Entiende que después de Ramona, Prosciutto es lo único que me queda, es la única persona en qué puedo confiar además de mi familia, es él la única persona por la que aún me siento parte de este mundo. No puedo enojarme ellos querían protegerme, pero aveces se esfuerzan tanto que terminan arruinando lo que yo realmente quería.

En ese momento se me cerró la garganta y no pude decir nada más, nos quedamos en silencio y después fue él quien insistió consiguieramos un regalo bonito para Prosciutto "al final era lo mínimo que podíamos hacer por él", con la ayuda de mamá le escogí una preciosa pluma fuente como esas que cada escritor de película posee, así con su imaginación y su magnífica y bella letra hara realidad todas esas historias que me solía contar, mamá dice que tiene que perdonarme y aunque se que me lo dice tan solo para darme calme es una realidad que deseo que sus palabras se hagan profecía.

"Si realmente te hubiera abandonado, créeme tú serías la primera en saberlo", no se cómo pero el de inmediato supo que no estuve conforme, Pericolo me conoce bien y sabe que hacer o decir para hacer sentir feliz, si algo se de él es que no puedo ocultarle nada y no necesito decirle lo que me molesta pues el ya lo sabe y de alguna forma llegamos a un acuerdo todo sin hablar, confieso es extraño pero al mismo tiempo es tan agradable.

Pronto será nochebuena y lo único que pido es consuelo, quiero ver a mi amigo una vez más pues de ti ya me quita la esperanza.

Mi único deseo es ver todo aquello que he perdido y de lo que tengo promesa.

Y si tan solo me permites ser un poco egoísta deseo que mamá y Pericolo se olviden del asunto del árbol. Enserio estoy cansada.