60

971 86 9
                                    

Me desperté sobresaltada. Mirando a todos lados. No sabía muy bien qué había pasado. Al primero que vi fue a Aizawa sentado en una silla, al verme se levantó y se acercó. 

A: ¿Cómo te encuentras? - me dijo tranquilo. 

- ¿Estoy en el hospital? - estaba confundida. 

A: Así es. Llevas todo el día durmiendo. 

La puerta se abrió, ambos miramos quién era. Keigo. Desde que me vio vino corriendo, tenía un vaso de agua en la mano, la cual derramó en el piso y como no podía ser menos, se resbaló y se cayó de culo. Yo no pude contener la risa y Aizawa estaba intentando aguantar todo lo que pudo hasta que al final se giró para que Hawks no lo viese y empezó a reír. 

H: Perfecto, ahora me duele el culo. - se levantó. - ¡No os riais de las desgracias ajenas! 

A: Perdón, perdón...- se volvió a reír. 

- ¿Estás bien? 

H: Sí, solo que me duele el culo y encima estoy mojado. - se iba quejando mientras se acercaba. 

A: Espera, traeré una toalla. - se fue mientras se reía. 

H: Encima se sigue riendo, será...

- ¿Y Touya? - miré al rededor. 

H: En casa. - suspiró. - Con Shoto. 

- ¿Qué? 


En el momento del incidente. 

Perspectiva de Dabi. 

Bajé con Aizawa para ver que t/n estuviese bien. Me sentía preocupado por que la droga o Endeavor le hiciesen daño. El pasillo se me hacía eterno. ¿Antes fue tan largo? Por el camino nos topamos con MYMIND el cuál iba echando chispas. Te lo mereces, trozo de mierda. Se me quedó mirando y le mostré mi hermoso dedo corazón, cosas que hizo que se enfadara más, pero me dio lo mismo, yo seguí corriendo. 

H: ¡T/N! - escuché a Hawks gritar. 

Aizawa y yo nos miramos y comenzamos a correr. Cuando llegamos nos encontramos a T/n desmayada en los brazos de Hawks. 

D: ¿Qué ha pasado? - me agaché para ponerme a su altura. 

H: Creo que le está empezando a hacer efecto la droga. - estaba alterado. 

A: Voy a llamar a una ambulancia, esperadme aquí. 

En ese momento salieron algunas enfermeras de la puerta que tenía Hawks a sus espaldas. Le sacaron una camilla, la acostaron y le miraron constantes y demás. Por favor, que no te pase nada. Me acerqué a Hawks que estaba mucho más nervioso que yo. Nuestras manos se entrelazaron mientras veíamos a t/n. 

S: ¿Touya? - escuché en un susurro. 

Levanté la mirada y vi a mi ya no tan pequeño hermano, Shoto, junto con otros alumnos de la UA. Todos me miraban extrañados, pero él me miraba diferente. Sentí que se iba a echar a llorar en cualquier momento, sentí que me miraba sin rabia, era más bien un "estás bien". 

D: Shoto...-susurré. 

Le apreté la mano a Hawks. Él me miró y se puso en frente mío, cortando mi vista de la de Shoto. Me acarició el rostro como lo hacía t/n, era tan bonito que no pude evitar sonreír. Al parecer cuando empecé a correr antes se me había caído la peluca roja por el camino y por ende la capucha, dejando mi cara, tan poco reconocible, a la vista. 

Aizawa llegó con los enfermeros de la ambulancia y todo pasó tan deprisa que para cuando me quise dar cuenta ya se la habían llevado. Hawks me estaba jalando del brazo, pero yo solo estaba mirando a Shoto. 

D: Hawks, vete con ella. - me giré a mirarlo. - Llámame si pasa algo. 

H: De acuerdo, te cuidado. - me dio un beso en la mejilla. 

S: ¿Eres tú en serio? - estaba perplejo. 

D: Sí...bueno, de momento no soy un fantasma. 

S: Para mi sí lo eres. 

D:Mejor nos vamos a otro lugar...umh. - me quedé pensando. - ¿Quieres venir a mi casa? 

Fuimos todo el camino en silencio, pero a pesar de eso el trayecto no se me hizo largo. De vez en cuando me giraba para mirarlo y se le notaba nervioso. ¿Tanto miedo le daba? Una vez que llegamos, entré yo primero y lo invité a pasar. Entró y se quedó asombrado. Se paró a ver las fotos que hay en la pared de nosotros tres. Avisé a Hawks para que lo supiese y al rato me dijo que t/n estaba bien así que me quedé más tranquilo .

D: A t/n le gustan mucho las fotos. - me puse a su lado. - Siempre que puede saca alguna...¿Quieres tomar algo? 

S: No hace falta...- sonrió al ver la foto que le había regalado a ella. 

Lo invité a sentarse en el sillón, yo fui a la cocina y le preparé un zumo con unas galletas que había hecho ayer. Lo llevé y lo puse en la mesa. 

D: Umh...imagino que tienes mil y una pregunta. - dije al sentarme. 

S: ¿Eres feliz? - me soltó de sopetón. 

D: Con ellos dos sí. Antes de volver a encontrarme con t/n, mi vida era una auténtica basura. Solo vivía por y para vengarme de Endeavor algún día, pero llegó ella. Su sonrisa, su felicidad, su ganas de seguir viviendo, su manera de ver el mundo a pesar de todo lo que ha pasado, hizo que mi mente cambiase y decidiese que no necesitaba ninguna venganza. El tiempo le dará su merecido algún día. 

S: Pues creo que el tiempo se ha cansado de esperar. Ahora se ha dado cuenta de todo lo que ha hecho mal. - suspiró. - No te pido que lo perdones porque yo no lo voy a perdonar nunca, pero sí al menos con el resto...

D: Algunas veces me he arrepentido de dejarlo todo y huir. Me perdí muchas cosas y no pude ayudar en otras muchas, pero si soy quién soy hoy es porque hice lo que hice. 

S: Entonces no tengo nada más que preguntar. - me miró. 

D: ¿Crees que a partir de ahora podemos...? - no sabía cómo decirlo, me sentía nervioso. 

S: Eso espero. - me sonrió. - Por cierto...¿de dónde son las galletas? 

D: ¿Qué? - me tomó desprevenido.- Las hice yo...

S: WOW, ¿Cocinas? Pues se te da muy bien. - estaba emocionado. 

Y así pasé toda la tarde, hablando tranquilamente con el hermano al que una vez odié, al que una vez repudié y ahora no podía sentirme más orgulloso de en lo que se había convertido. Cuando la noche llegó me dijo que tenía que volver a la residencia, así que lo acompañé hasta la puerta. 

D:Shoto. 

S: Dime. 

D: No espero que puedas perdonarme, pero me alegra que al menos me dejes estar a tu lado a partir de ahora. - le sonreí. 

S: No tengo nada que perdonar. - me sonrió y se giró para irse. - Espero verte pronto, hermano. 

D: Y yo a ti, hermanito. - me salieron las lágrimas que ya llevaba toda la tarde aguantando. 


En tu mirada (Hawks x Dabi x TN) FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora