Habían pasado un par de días, estaba a punto de dormirme en mi cuarto, cuando alguien entró.
-No hagas ruido -susurró Jughead- si tu mamá se entera me mata.
Se acostó a mi lado y me abrazó, lo abracé a él y cerré los ojos, Jughead besó mi frente y los dos nos dormimos.
Al día siguiente, despertamos oyendo los gritos de Tommy.
-Por dios -dijo Jughead-
-¿Por qué chilla así?
-No se -suspiró- iré a ver, descansa.
-No te vayas.
-Betts, tengo que ver que le pasa.
Entonces Tommy entró corriendo a la habitación.
-Betty, jugo.
-Ven, cariñito.
Él corrió hacia mí, lo levanté y lo metí a la cama.
-¡No! ¡Noni no!
-Juggie y yo tenemos mucho sueñito.
-Juggie -dijo en un quejido- jugo.
Jughead tapó su boca y cerró los ojos.
-¡Forsythe! -dije alejando a Tommy de él- pobrecito, mi bebé.
Tommy me abrazó y besé su mejilla.
-Ay, por favor, no es para tanto, es solo un capricho.
-¿Quieres desayunar conmigo aquí y te doy muchos besitos?
-Sí -dijo Jughead-
-Tú no, tu te vas.
-¿Tengo que hacer un berrinche para que me prestes atención?
-Fuiste malo con Tom. Él es un pequeño bebé.
-Tiene casi tres años.
Rodé los ojos y Tommy se acomodó encima mío.
-¿Nos traes el desayuno? -dije mirando al mayor-
-¿Que gano a cambio?
-¿Qué quieres a cambio?
-Que hoy en la tarde te quedes conmigo.
-¿Y que quieres hacer?
-Eres un poquito lenta.
-Amo los domingos. Bien, miraremos una película -dije y Jughead sonrió para salir de la habitación- ¿y tú qué quieres hacer?
El menor se tallo un ojo mirándome.
-Sofía.
-Bien -dije prendiendo la televisión-
Él se sentó a mi lado y cerré los ojos, pero minutos después, Jughead entró a la habitación.
-No te duermas, bebé, son las once de la mañana.
-Pero tengo sueño -bufé-
-Lo sé -dijo y besó mi frente- te hice café, y tu mamá trajo donas de Pop's.
-¡Dona! -dijo Tom sonriendo-
-¡Dona! -respondió su hermano- ¡Emocionante!
-¡Mosonante!
Reí y abracé a Tommy con mucha fuerza.
-Por favor, jamás crezcas, enano.
-Enano.
-¿Eso si puedes decir?
-¿Enano? -dijo confundido- Sofía.
Jughead rió y le dio un trozo de su dona.
-Gacias.
-De nada, campeón.
Mientras los tres desayunabamos, Polly entró a la habitación.
-¿Qué hacen?
-Caca -dije sin despegar los ojos de la televisión- ¿qué piensas que hacemos?
-No lo sé. Iré a la casa de una amiga que mamá no quiere que vea ¿me cubres?
-Me debes una.
-Bien.
Jughead rió mientraz Polly se iba y lo miré.
-¿Qué?
-Me parece adorable como ni siquiera despegaste los ojos de la pantalla por un segundo.
-Sofía podría caerse de ese caballo en cualquier momento.
-No es un caballo -me dijo rodeandome con un brazo- los caballos no vuelan.
-Lo que sea.
-SHHH -Tommy nos calló-
-Lo siento -reí-
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💿La melodía de tus ojos💿
FanfictionBetty Cooper, una Newyorkina de dieciseis años, se muda a el pueblo natal de su madre, junto con ella, y su hermana, Polly, convencida de que llevaría una vida aburrida y triste. Pero todo cambia cuando antes de irse, encuentra una caja con su nombr...