💿La melodía de tus ojos💿

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-¿De qué querías hablar?

Wendy suspiró sentandose en la cama frente a ella.

-Sabes que te amo.

-Lo se, yo también te amo.

-Sabes que jamás te dejaría.

-Wendy, me estás asustando.

-Mis padres me dijeron que vamos a mudarnos a San Francisco -dijo con rapidez-

Betty la miró mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.

-¿Qué?

-Lo siento. Yo no quiero,pero no se que hacer.

-Déjame ayudarte.

-Puedes intentarlo pero estoy perdida, no se siquiera que decirles.

-¿Jughead sabe?

Ella asintió.

-¿Le contaste antes que a mi?

-L-lo siento.

-No, está bien, no voy a reprocharte eso, solo quería saber. Esto es horrible, Wendy.

Ella asintió y rompió en llanto. Betty la abrazó acostandose en la cama.

-Te amo, y voy a hacer que te quedes.

-Gracias.

Betty cerró los ojos abrazándola y Wendy escondió su rostro en el cuello de la rubia. Tommy entró a la habitación gritando, y Betty suspiró.

-Thomas ¿Qué?

El se sentó en el suelo y Jughead entró y lo quiso levantar, pero él gritó de nuevo.

-No quiere bañarse.

-Déjalo, que se baañe más tarde y ya.

-Acaba de vomitarse encima.

-Iugh, bañalo rápido, eso es un asco.

-Lo sé, pero no me deja acercarme.

Wendy suspiró y se paró para camibar hacia Tommy.

-¿Qué pasó, enano pesado?

-Oye, no le hables así -dijo Jughead-

-Tú cállate. ¿Vamos a darte un baño? apestas.

El menor negó con un puchero.

-¿Por qué?

-Hambe.

-Ya veo. Pero no puedes comer si estas todo sucio de vomito. Vamos a bañarte rápido así puedes comer luego.

Él asintió y se paró.

Wendy tomó su mano y entró al baño con el menor.

- Hasta ahí llego, no voy a tocar al niño vomitado.

Jughead bufó y entró al baño detrás de Wendy.

Mientras tanto, en la casa de Light y Kyle, Kyle y Hannah jugaban videojuegos en el sofá mientras Light leía un libro de cuentos de hadas en voz alta para Lila, quien dejaba de llorar en sus piernas.

-Y vivó feliz para siempre. Fin.

-No -se quejó-

-Si, ahí termina.

-Más.

-Ya me cansé,Lili. Son todos iguales.

-Porfi.

Él suspiró y pasó a la página siguiente.

-Chicas, se hace tarde ¿No deben volver a sus casas?

Lila asintió.