Capítulo 32

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Llamada telefónica iniciada....

— Dimeeee — pongo el altavoz

Ángel ven a mi casa

— Dylan ¿Qué quieres? — gruño sacando espuma de mi cara

Ven a mi casa — repite

¿Para qué y arriba de qué si no tengo auto?

Que tu padre te

Se fueron — lo interrumpo cortante

¿Qué pasó?

Tengo shampoo en toda la cara así que cortaré o me entrará al ¡Ojo! — chillo metiendo la cabeza en el agua

Llamada telefónica finalizada....

Golpeo con los nudillos al mismo tiempo que miro de reojos el nuevo jeep estacionado.

— ¡Seren! — una persona muy amorosa me abraza cortando mi respiración

— Rebecca me ahogo — ríe un poco antes de soltarme

— Te extrañé

— Y yo a ti — asiento abrazándola

— Oye mi espacio personal— se queja divertida

— Pero si me extrañas — hablo con voz infantil y chillona

— ¡Dylan tú novia se enamoró de mí!

— Gritona — se lo digo en broma y nos largamos a reír

Adentro en el living están William y Dylan charlado de algo muy emocionados. Cuando nos ven a ambas sonríen alegres, saludo a mi cuñado con un beso en la mejilla y a mi novio con uno en la boca.

— Tienes el ojo rojo — susurra

— Fue tú culpa—hago un puchero— me entró shampoo

— Ay mi Ángel precioso ven aquí— sus brazos  rodean mi cuerpo

— Abrázame siempre —me aferro a su cuello encajando mi cabeza en la curvatura

— Claro que sí amor

Luego de ducharme llamé a Dylan quien  explicó que iríamos a pasar el día en la playa, no pregunten por qué pero me estaba duchando a las 06:00 de la mañana así que se me hizo muy fácil arreglar mi bolso y venir hacia acá, llamé a Alfredo quien no se negó a traerme, claramente le pagué el viaje.

— ¿Ya nos vamo? —pregunta por tercera vez Laura— son las 08:00 am y aún nos quedan dos horas de viaje

— Falta Dereck — responde Madison

Nos miramos entre todos porque nadie sabe donde está, llamó por teléfono pidiendo que lo esperaramos y listo. Al menos estamos todos y cuando llegue nos iremos enseguida.

— ¡Ahí vienes! — chilla Welts

— Y con Francisca — apreto los dientes mirándola mal

— Me tardé, lo siento — levanta sus manos en forma de paz

— ¿Dónde estabas? ¿Y por qué vienes con ella? — William arruga la nariz sin darse cuenta y Rebecca le da un codazo

— Por eso tardé — carraspea — chicos les presento a mi novia

Tenso la mandíbula para que no se caiga al suelo, pasa la muda porque todos guardan silencio y ni respiran hasta que Dylan se levanta del sillón aplaudiendo y celebrando mientras abraza a su hermano felicitando su reciente noviazgo, los otros dos Walker también despavilan acercándose.

Sueños Rotos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora