Sueños Rotos

Capítulo 43

Abro la pequeña puerta de mi caja fuerte, contraté una compañía que vino a ponerla ya que la pedí en la pared de mi clóset, lo hice para guardar cosas importantes como el celular de Nick.

— Llegó el momento — susurro agarrando el paquete gordo que destaca

También agarro el basurero de mi habitación que no tiene basura, un encendedor, meto mis pies dentro de las pantuflas y salgo rumbo al patio.

Afuera está oscureciendo, el sol ya se entró pero sinembargo el cielo aún tiene destellos claros, no es de noche. Tomo asiento en el césped cruzando mis piernas en posición india, un poco más lejos ubico el basurero y saco del interior todas esas cartas que he guardado, las marqué con un número desde que las escribí y es así como comienzo a leerlas.

Carta N°1

16 de Septiembre

Hola Nick, no sé muy bien que estoy haciendo pero quería hablar contigo...
Han pasado 10 días desde que ese imprudente de mierda te arrancó de mi lado, esto no está resultando fácil para nadie.

Carta N°2

20 de Septiembre

Hola Nick, aquí estoy otra vez.
Esta carta será mejor que la anterior, aún no he asimilado tú ausencia y creo que será un poceso largo, eso dijo Rebecca.

También Emilio te manda saludos, está tirado en mi cama esperando que vayamos al cementerio, será la primera vez que voy a verte pero preferiría no tener que hacerlo, ojalá estuvieras aquí llevándome en tu auto luego del entrenamiento o simplemente comiendo pizza un viernes mientras vemos Netflix.

Te extraño mucho

¿Qué hago con estas ganas de querer abrazarte? ¡Quiero mirar tus ojos!
Te juro que me duele más con cada día que pasa.

Carta N°3

23 de Septiembre

Hola Nick, llegué recién a casa del entrenamiento pero lloré mucho cuando salí del club ¿Sabes por qué? Cuando iba caminando con Tyler me emocioné  como cada vez que fuiste por mí, la desilusión me golpeó tan fuerte que comencé a llorar desesperada, tuve la vaga sensación de por un segundo creer que seguías vivo y ¡No! No lo estás.

Por otro lado quería contarte que mi papás llegaron anoche, dejé de lado ese escudo que construí año tras año contra la necesidad de querer a ambos a mi lado y marqué el número de papá, le pedí que por favor vinieran porque no podía estar sola más tiempo. Dereck ha estado todas las tardes después de clases conmigo en casa, se encarga de cocinar comida deliciosa pero no estoy comiendo mucho, bueno ese no es el punto.
Quise que mis padres estén en casa porque me siento sola, las noches son eternas ya que tengo insomnio y solo duermo un par de horas.

Lo último que te quería contar es que mami y papi vendieron la casa, compraron un departamento para ambos y Dixie, no querían quedarse donde hay mucho que recordar con tan poco tiempo para sanar.
No los culpes ¿Bueno? Yo prometo ir a visitarlos.
Te dejo por ahora, iré a ducharme porque huelo pésimo.

Carta N°4

25 de Septiembre

Oye Nick, estoy enojada contigo.

Leí por Internet que las personas al morir sin esperarlo pueden quedar con cosas pendientes, entonces son anclados a deambular por la tierra hasta que pueden saldar todo.

¿No quieres despedirte de mí?

¿No quieres venir a verme?

¡Juro que no me asustare!