Sueños Rotos

Capítulo 31

— ¿Pueden dejar de discutir? — pregunto ya harta de escucharlos

— ¡No! — grita mamá — ¡Mocosa entrometida!

— ¡No le grites!

— ¡Por su culpa estamos discutiendo!

— ¡Entiende mujer! Seren decide con quién estar no nosotros

— ¡Javier está interesado en ella!

— Yo estoy con Dylan — interfiero nuevamente

— ¡Que te calles! Ese niño no es bueno para ti y Javier es hijo de mi mejor amiga

— ¡Pero si sus papás son amigos de ustedes! — gruño golpeando la encimera con mi palma

— ¡Míos NO! De tu padre quizás porque el siempre se junta con gentuza

— ¿Gentuza? — pestañeo incrédula — Estás muy mal así como vas

— ¡¿Yo mal?!

— ¡Tienen una casa más grande que nosotros! — niego masajeando el puente de mi nariz

— ¡No me interesa! — su tacon golpea tan fuerte el suelo que hace eco dentro de la cocina

— No son una gentuza mamá — suspiro mirándola — son tan amables los Walker que me recibieron cuando tuvieron el descaro de dejarme allá

— Hija, nosotros

— No Papá, la gentuza en mi vida serían ustedes — trago saliva sintiendo un nudo subir — más bien son intrusos, vienen y se van cuando quieren, no tienen ningún afecto hacia mí si al final soy el error más grande que cometieron

— ¡No te permito que hables así!

— Déjala cariño — la bruja malvada de mi cuento ríe con burla - me alivia que ya sepas la verdad pequeña Seren

— No me digas así — gruño

— ¿No? — sonríe de medio lado —¿Sólo tú padre puede llamarte así? Déjame decirte algo, él no hace nada para darte esa cosa que tu quieres llamada amor, tú padre vive y respira por mí
¡No por ti! ¡Nunca debiste nacer!
¡Eres el peor error que hemos cometido porque él no lo acepta pero en el fondo sé que jamás te ha querido!

— ¡Ya basta! —Papá la sujeta de sus hombros paralizando las sacudidas bruscas de su cuerpo — ¡Deja de hablar tanta estupidez junta!

— ¡Dile! — solloza descontrolada — ¡No la quieres y sólo me amas a mi!

— Callate de una vez — Papá tiene la cara tan roja que parece un tomate- ve a ducharte y bajas porque iremos con nuestra hija 

— Sss...iii...sí — tartamudea mirándolo sorpendida, Papá nunca frena sus berrinches de niña

Salgo de la cocina caminando hacia el living donde me dejo caer sobre el sillón, hago una mueca sobando mi rodilla adolorida.

Hoy tengo mi primera cita de fisioterapia  pretendía ir sola y no con ambos, aunque Papá no es el problema.

A veces sí

Lo sé pero me trata mejor que ella

Nunca te conformes con poco, preciosa

Pero es mi padre

Sí,  el mismo que aguanta callado como ella te insulta

¿Viste que hoy me defendió?

Primera vez y no lo hizo del todo bien

No te conformas con nada

Y tú te conformas con muy poco