Amor Inestable.

Capitulo 19

Pruebas.

"Mí alma le pertenece a Hades por lo tanto voy a disfrutar cada segundo fuera del Inframundo."
- Dafne Santoro.

Aarón.

- Nos vamos - le digo a la niña.
Tomándola de los pies para montarla sobre mi hombro como un costal de papa.

No estoy de humor para sus berrinches.

- Bájame tengo que descansar - chilla cómo si me importa.

Finjo sordera y me encaminó con ella en dirección al bosque.

- Keith - chilla.
Está tan furioso que la ignora.

- Está molestó - murmura lo obvio.

- No está saltando de alegría que no vez - digo.

- Te voy a morder, el trasero si no me bajas - amenaza apretandome el culo.

- No me sorprendería niña pervertida - digo dándole una nalgada.

- Oye - se queja.

- Aarón deja de llamarme niña y bájame, la sangre se me está subiendo al cerebro - dice.

No soy un tonto ni un principiante se que dónde la bajé, saldrá corriendo en dirección a la mansión. Al ver que no voy a bajarla se queda en silencio.

Está capacitada para estar colgando durante horas ella puede no recordarlo, pero su cuerpo sí. No vuelve hablar cosa que agradezco, sin embargo está trazando círculos en mi culo con apretones de vez en cuando, no le digo nada y la dejó continuar prefiero que haga eso a que ande diciendo tontería y cosas las cuales no voy a cumplir.

°°°

Adara.

No sé en qué momento me desmaye, pero termine despertando en mi habitación con un Ethan preocupado caminando de un lado a otro mientras que un médico me inyectaba algo en el brazo.

Ahora cuelgo sobre los hombros de un amargado que ni para cargarme bien sirve. Es un milagro que la sangre no se me haya subido al cerebro.

Después de un largo camino, donde lo he estado molestando. Volvemos a llegar a la cascada lo único bueno de todo esto es que no tuve que caminar ni un poco.

- Ya sabes lo que tienes que hacer - ordena el demonio amargado señalando las botellas.

- Creó haber dicho que no...

- ¡No me hagas perder la paciencia y muévete! - grita provocando que de un salto del susto.

Nunca me había gritado siempre me habla en un tono alto o me ignora. Pero por primera vez me a gritado y es aterrador.

Creo que está empezando a perder la poca paciencia que te tiene.

Pienso igual.

La cabeza me empieza a palpitar provocando que me lleve las manos a la cien.

Flashback.

- Dafne ésto es peligroso - dice una rubia que no logró reconocer. A las demás personas siempre las he visto borrosas, pero a la rubia puedo verla con extremada claridad.

- Cállate tengo todo bajo control - dice mí hermana la cuál está caminando de un lado a otro buscando algo.

No puedo saber dónde estoy a la única persona que reconozco, en la habitación es a mi hermana la cuál luce decidida rebuscando entre una pila de papeles.