Lágrimas de sangre.
Noche de la decisión...
Dafne Santoro.
Entro a mi habitación dejándome caer en la cama con ayuda de un esclavo cuando los recuerdos de aquella noche atacan volviéndose cada vez más claros.
— ¡Detente! - gritó Adara perdiendo su orgullo hice que la golpearan y torturan. Pero nada de eso la doblegó sin embargo sí el que tenga a su hija en mis brazos.
¿ Que tanto significa la mocosa para ella? Fue lo primero que me pregunte en ese momento.
— ¡Voy a matarte maldita perra! - gritó Keith colgado del techo.
Aplique cada método de tortura y castigo que se me fue enseñado y lo único que tenía que hacer para doblegar a la principessa mafiosa y a unos de los demonios era matar a la mini basura.
Las lágrimas se deslizan por mi rostro sin poder evitarlo. No me duele recordar los gritos de mi hermana o los gritos de Keith me duele haber fallado. Si Aarón y Dyland no hubieran aparecido hubiera ganado ya Ethan no es más que un inútil el cuál sólo vive ocultándose detrás de sus hermanos, aún no se porque Erick dijo que era de cuidado cuando en realidad no es nada.
Golpeó la cama con frustración esperando la entrada de mi verdugo cada noche es lo mismo un sin fin de torturas que no sabía que existían.
— Hoy he decidido venir personalmente cuñada - dice una voz tenebrosa que reconozco al instante.
Es el maldito demonio de ojos grises. Suplicó a mis adentros para que sea el demonio de ojos diferentes colores o, el demonio de ojos azules.
Alzo la vista esperando equivocarme, pero no es así.
— A... Aarón - digo con lágrimas en los ojos. Me muerdo los labios odiandome a misma tratando de controlar mi irá. Gritar será aún peor cierro los ojos lidiando con lo que abarca que el este aquí. Cuando se trata de torturas Aarón es el peor es su especialidad. Y más cuando lo he jodido a el también.
Su mera presencia significa que no va a parar de torturarme está noche hasta provocar mis lágrimas de sangre.
Aprieto las sábanas más fuerte cuando se me viene encima arrepintiendome cada vez más por haber fallado.
Sólo tenía una oportunidad y la desaproveché. Erick tiene razón soy una maldita inútil y ahora más que nunca.
Darío Santoro.
— No deberías estar... molesto cariñito - se me burla la esclava que tengo atada a la cama.
La observó paseando me por la habitación roja tratando de decidir que método de tortura sexual practicaré con ella. No me inspira absolutamente nada, pero conocé mis métodos y no se anda con tanta quejadera al terminar.
— Le estoy hablando señor.
Tomó unas pinzas las cuales caliento antes de colocarlas en sus pezones logrando que suelte varios gemidos de dolor combinados con algunos de placer.
Es una maldita masoquista y a mi ya me tiene aburrido.
Le permito su insolencia por qué no es nada más y nada menos que Amber Kozlov y ahorita mismo la necesito de mí lado. La rubia está buena, pero prefiero guardar mi placer para los hombres o para alguna mujer que no sea ella. Lo único que me provoca es asco cada que quiero mandarla a el infierno la imágen de mí hermanita pequeña me hace desistir.
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Amor Inestable.
FantasyUna cena dónde todo cambia, un comienzo tranquilo que va avivando la tormenta que siempre estuvo presente, secretos, traiciones, recuerdos. Enemigos que no son enemigos, amigos qué no son amigos. Todo es un verdadero enigma. "UNA DEA INFERNALE, TRAV...