Amor Inestable.

Capitulo 35.

Advertencia.

Amber Kozlov.

Ethan estuvo a punto de romperme la nariz, me quitó el pañuelo que me puse para detener el sangrado. Observó cómo la sangre paró, pero el maldito dolor no se quita ni con las pastillas, que tome hace unos minutos.

Me acarició la nariz despacio tratando de apaciguar el dolor.

Joana, Adriana y yo estamos en la sala esperando a que el médico baje.

Un esclavo nos llamo para avisarnos que Erick estaba hablando con Ethan y Keith, apenas nos avisaron fuimos de una vez. Esos tres juntos en una sola habitación aseguraba la muerte de cualquiera de los tres.

Pensé que me encontraría a los tres dándose golpes mutuamente, pero para mí sorpresa solo Keith era el que estaba golpeando a Erick. Ethan mató a cuatro esclavos el sólo en minutos, cuando ví a los esclavos en el suelo me sorprendí, Ethan estaba protegiendo a Athenea y asesinando a la vez.

Algo trama Erick no se hubiera dejado golpear de Keith así por así.

— ¿Cuál es el plan de Erick? - pregunta Joana.

— No lo sé - respondo sincera.

Erick no me a contado nada aún. Dijo que me lo diría a su tiempo.

— No mientas Amber - dice Adriana furiosa.

Nunca puede creer en mi palabra.

— No miento, no me a contado nada ,- digo molesta.

Se quedan en silencio tratando de ver, si miento.

Por primera vez ni siquiera yo sé de qué va todo esto de la venganza de Erick. Se que por alguna razón se dejó golpear, pero no sé cuál es la razón detrás de todo.

Los pasos de el doctor se escuchan cuando baja la escalera. Captando nuestra atención.

— ¿Cómo esta doctor? - preguntó preocupada a el médico que acaba de atender a Erick.

Siempre me está protegiendo y está vez llegué tarde para ayudarlo. De todos mis hermanos Erick es al único que aún le importó.

— Tiene varias costillas fracturadas, la nariz rota, varios hematomas...

Explica poniéndome nerviosa. No me gusta ver a Erick herido.

Se va dándonos órdenes médicas que según el debemos seguir al pie de la letra.

Las tres nos apresuramos a llegar a la habitación.

Erick está de pie mirando a través de la venta a los Milano negro que están alrededor de la mansión desde hace una semana.

Me preguntó cuándo Aarón, Keith y Ethan llamarán a sus malditas aves carroñeras, se han comido cuatros esclavos en lo que va de la semana.

— Acaba de irse el doctor y ya estás rompiendo la primera regla - dice Joana con mala cara.

— ¿Cuando pretenden largarse? - pregunta mirando a Joana y Adriana.

Para ninguno de los dos es un secreto del bando en el que están. Ellas apoyaran a la principessa mafiosa y a los demás sin importar que, lo dejaron muy en claro hace un mes.

— Nunca es nuestra casa también - dice Adriana acostándose en la cama de Erick.

Ambos la miramos mal por ser tan irrespetuosa.

— Yo soy el líder...

Joana arrastra hasta la punta de la cama la silla de el escritorio que Erick tiene en la habitación interrumpiendolo.