Demonio K. Kozlov.
Keith.
- Keith - me llama Adara.
Finjo no escucharla pasando de largo, no merece que descargue mi enojó con ella.
Miró a Aarón molestó mientras, se va peleando con Adara divertido. No sé, que mierda gana con las estupideces que hace.
«Odio que me utilice.»
- A dónde vas - me pregunta Ethan tomándome de el brazo.
- Por ahí a jugar un rato - me limitó a decir.
- Keith no estamos, para hacer idioteces.
Tiene razón, pero me da igual mis celos son más importantes que lo demás.
- Vienes o te quedas - digo abriendo la puerta del auto.
- Voy contigo, déjame ir por mi arma.
Es más fácil de convencer, que sobornar a un nene con golosinas.
Me subo a el auto a esperar, unos minutos después sale de la mansión corriendo para entrar a el auto.
- Nos vamos a divertir - digo arrancando el auto.
- Adara se va a cabrear, cuando se entere - dice abrochándose el cinturón.
A la antigua bonita le molesta que matemos por celos. Al parecer la suerte esta de nuestro lado porqué a esta Adara, si no le decimos nada nunca se va a enterar.
- Sí ninguno de los dos dice nada, no se va a enterar nunca - digo sincero.
- A que casa vamos a ir - pregunta.
Sabe que no me hará cambiar de opinión, así que no insiste y me ayuda.
- A la de los Scort.
- No son eso...
- Los socios de Erick sí - digo apretando el acelerador.
Antes de salir de casa pedí a un esclavo toda la información sobre los Scorts. El hecho de que Adara ande soñando con Erick me cabrea.
Estrelló las manos contra el volante molestó.
No se que me cabrea más si, el que Adara ande soñando con Erick o que Aarón le haya informado que estamos en Italia.
La primera vez falle porqué no quería matar a mi hermano, ahora lo único que quiero hacer es matarlo de una vez por todas.
Por la culpa de ese Imbécil mi hija está muerta y eso es algo que no voy a perdonar le nunca.
La mansión Scort queda a la vista. Me replanteó cuántas cosas pueden salir mal si falló, mi lado conciente me dice que me detenga, pero no lo escucho me bajo del auto con Ethan. La puerta principal está rodeada de esclavos lo cuál nos obliga a entrar por la parte trasera.
- ¿Cuántas personas hay? - pregunta Ethan saltando el muro que protege la mansión de los intrusos, es una pena que aún no hayan creado una casa a la cuál no pueda entrar.
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Amor Inestable.
FantasyUna cena dónde todo cambia, un comienzo tranquilo que va avivando la tormenta que siempre estuvo presente, secretos, traiciones, recuerdos. Enemigos que no son enemigos, amigos qué no son amigos. Todo es un verdadero enigma. "UNA DEA INFERNALE, TRAV...