Sam
— Sam — siento un movimiento, pero estoy tan cómoda que no le hago el intento por levantarme — Sam, vamos, levántate.
— Déjame dormir — escondo la cara bajo la almohada.
— ¡Samantha Margarita, arriba! — grita haciendo que me sobresalte descubriéndome la cara al fin.
— ¿Qué pasa? — pregunto tomando mi teléfono para ver la hora, son apenas las ocho — ¿Ya viste que hora es? Déjame dormir, joder — vuelvo a meter la cara bajo la almohada.
— Arriba, tienes que darte una baño y cambiarte — me pega con otra almohada en la espalda.
— ¿Cambiarme para qué? Ni pienses que vamos a salir — respondo sentándome en la cama malhumorada.
— Claro que saldremos, cariño, iremos a bailar — afirma — Hay un after en un lugar cerca de aquí, levanta ese culito y date un baño que iremos a divertirnos — responde con una gran sonrisa.
No me había percatado de que ya traía puesto un vestido color negro corto pegado a su cuerpo, su escote en V de tirantes deja al descubierto sus brazos y hombros, sus curvas resalten haciéndola ver increíble, sin duda mi prima es preciosa.
— ¿Y sé puede saber por qué tanto interés en ir? Qué yo recuerde a ti no te gustan mucho salir a antros — digo enarcando una ceja y es cierto, por lo general siempre ruego para que salga conmigo.
— Lando llamo hace como una hora, pero estabas tan dormida, que no lo notaste — responde despreocupada.
— ¿Lando llamó? — pregunto levantando enseguida ¿Qué dijo?
— Nos invitó hoy a una fiesta en un antro cerca de aquí, para celebrar el podio o algo así — dice colocándose un poco de corrector en la cara.
— Ira John ¿No es así? — pregunto con una sonrisa, Abi se sonroja con la simple mención de él pelinegro — Está bien, iremos, sólo porqué quiero que por lo menos una de nosotras tenga un fin de semana increíble.
— Sam — trata de llamar mi atención.
— No, está bien, me doy un baño y nos vamos — me levanto de la cama para ir al baño pero me paro en el marco de la puerta con duda — ¿Y qué pasará con Erick y Mich?
— Ya lo tengo resuelto, Mich nos cubriera, esta noche será de nosotras — responde emocionada.
— ¿Nos escaparemos? — pregunto exaltada.
— Si lo quieres llamar así, si, nos escaparemos, apresúrate — dice y me empuja dentro del baño de nuevo.
Me doy un baño rápido y salgo a la habitación en toalla alrededor de mi cuerpo, busco mi ropa interior y me la pongo ahí, con mi prima no tenemos pudor al cambiarnos una frente a la otra, tenemos una confianza inevitable.
Busco que ponerme en mi maleta pero es inútil, no traje nada para salir de noche, aquí, según yo, no saldría más que al circuito, así que no tengo ropa adecuada, frustrada volteo hacía la cama y ahí veo un hermoso vestido color blanco corto, tiene un hermoso escote en V profundo que hace resaltar las mangas largas, tiene un cinturón plateado de cadena alrededor de su cintura que lo hace ver más llamativo.
— Lo mandaron para ti — susurra Abi a mis espaldas.
— ¿Quién lo mando? — pregunto con una sonrisa, aunque tengo una idea de quién pudo ser.
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Amor a Distancia (Libro 1)
Подростковая литератураSamantha Melgara es una chica mexicana apasionada por el deporte de la Fórmula 1, junto a su hermano han crecido viendo los autos correr. Su mayor sueño es ir a un gran premio de la ciudad de México y eso pronto se hará realidad, no obstante ella no...