Amor a Distancia (Libro 1)

CAP 30. Feliz cumpleaños Sam

Sam

Quien iba a decir que mi vida daría un giro inesperado, la verdad siempre se sabe y lo aprendí de la peor forma posible.

Después de nuestra pelea decidimos ir a terapia juntos para resolver nuestros problemas y poder superarlo - lo hicimos - ahora más que nunca estamos más unidos, los problemas los tenemos como cualquier pareja, pero aprendimos a resolverlo, las mentiras ya no tienen cavidad entre nosotros, nos sinceramos uno con el otro.

Toda marcha muy bien, la temporada de Fórmula 1 vuelve y con ello Lando también, eso significa que regreso a México, me hubiera encantado acompañarlo al inicio de temporada otra vez, pero al estar tanto tiempo lejos de casa se me hace extraño, además que por la pandemia la entrada a al Paddock está restringida más que sólo a los miembros de equipo del deporte.

Me hubiera encantado estar ahí para él ya que el día que se correrá, es mi cumpleaños, pero nada sale como uno lo planea.

Nos encontramos en la sala de espera del aeropuerto en espera de nuestros vuelos, hay un poco más de movilización que la última vez que estuve aquí, solo de nombrarlo los recuerdos llegan a mi mente como un flashazo que deseo olvidar.

Niego quitando esos absurdos pensamientos de mi cabeza y me concentró en el lindo chico que tengo a mi lado, su mano esta entrelazada con la mía mientas que la otra sostiene su teléfono, juró que no me soltaría esta que atravesará esa puerta y me despidiera de él.

"Pasajeros con destino a la Ciudad de México, favor de abordar la puerta 619".

- Bueno llego la hora - digo tratando de levantarme pero Lando me lo impide - Lan.

- No espera, cinco minutos más - me jala a él.

- Voy a perder el vuelo - lo regaño.

- Pues espera al siguiente - se hace el bromista.

- Norris - advierto.

- Melgara - contrataca.

- Hablo enserió tengo que irme ¿John me ayudas? - pregunto al pelinegro que está a un lado de Lando, al oírme levanta la mirada de su celular y clava sus ojos en mí.

- No me metas en esto Sam, bastante tengo con soportarlo todos estos días - ironiza, pongo los ojos en blanco y volteo otra vez al chico de ojos verdes, este suelto un suspiro.

- Bien, vamos - se resigna levantándose y acompañándome a mi puerta de abordaje, me paro a un lado de él y lo rodeó con mis brazos en un abrazo, coloca sus manos en mi cintura apretándome contra su pecho mientras esconde su cara en mi cuello.

- Te voy a extrañar - digo en un murmuro, estoy a punto de romper a llorar, odio las despedidas.

- Y yo a ti, lamento tanto no poder estar contigo en tu cumpleaños, tenía tantos planes para ese día - dice separándose de mí.

- No importa, pásala bien y dalo todo, ese será mi mejor regalo - sonrió, acaricia mi mejilla.

- Haré lo mejor, te dedicaré esta carrera - sus ojos se abren como platos - no mejor no.

- ¿Por qué? - preguntó extrañada.

- Es impredecible lo que pueda pasar así que hasta que acabe te digo - suelto una risa.

- De acuerdo - bajo su mascarilla y también la mía para darle un beso en los labios - te amo - que bien se siente decirlo en voz alta.

- Yo también te amo nena, cuídate -me da un último beso para soltarme y así pueda caminar a mi puerta, la tristeza me invade al saber que estaremos lejos por mucho tiempo, pero estaremos bien, tenemos que estar bien.