Cadete Morgan 2.

Querida Brooke.

Querida Brooke.

No encuentro las palabras adecuadas para hacer esta carta, pero lo intentaré, pues mereces mucho más de lo que tuviste.

Quisiera haber hecho las cosas diferente, me gustaría regresar el tiempo y decirte lo mucho que te amo, mirar tus pequeñas manos jugueteando con todo lo que te encontrabas, pero lo arruiné todo.

Me diagnosticaron cáncer hace unos meses, sé que probablemente merezco esto, no pienses que nada de esto fue tu culpa, yo fui un completo estúpido y no valoré todo lo que tenía.

Te amo, te amo infinitamente, tristemente es algo que ya no es recíproco, pues me alejé y estas en todo tu derecho de no querer saber de mi nunca más, lo entiendo.

Sé que estas bien, que seguiste adelante y estas triunfando como la hermosa luchadora que eres, de verdad estoy tan orgulloso de ti Brooke, de saber que estas sonriendo a pesar de todo, de saber que tu mamá ha estado mejor sin mí y de saber que alguien ya esta haciendo mejor mi trabajo que yo.

No puedo verte a la cara después de todo lo que hice, sigo siendo un cobarde, siempre lo he sido, tengo miedo de ver con mis propios ojos lo que he causado, enfrentarme a la realidad.

Tengo miedo de escuchar tu voz, pero a la vez deseo tanto hacerlo que me estoy volviendo loco.

Recuerdo como tus ojos brillaban cuando me mirabas, y tengo miedo, miedo de que me mires ahora y notar que ese brillo ya no está, notar que ya no sonríes al verme, que no te emocionas cuando llego a casa después de trabajar.

Caer en cuenta que después de haberme equivocado no volveré a escuchar tu risa nunca, tampoco te veré pelear con tus hermanos o jugar con la comida como solías hacerlo.

Quisiera haber estado contigo, abrazado tu primer corazón roto, reír en la primera salida al parque de diversiones, enseñarte a andar en bicicleta o castigarte cuando llegues tarde a casa.

Hacer todo lo que un papá hace.

Hacer todo lo que yo no hice.

Sigue adelante hija, no te detengas nada, vive tu vida al máximo y sé feliz, encuentra el amor, llora, ríe, disfruta, baila cada momento y suspira de vez en cuando.

No pido que me perdones, tampoco me estoy justificando, simplemente quería hablar contigo de alguna forma antes de irme, pues no soportaría la idea de no hacerlo.

Mi herencia esta a nombre tuya y de tus hermanos, espero que con eso pueda ayudar en algo, por favor acéptala, es lo menos que puedo hacer por ustedes después todo.

Te amo hija, vive una larga y feliz vida.

Atentamente

Logan James Morgan.