Blake.
Corrí lo más rápido que pude cargando a Dean en mi espalda, no paré nunca a pesar del cansancio que tenía.
El agua se nos había terminado al igual que la comida desde hace dos días. Y aquí seguía, deshidratado y débil pero aún corriendo por salvar nuestras vidas.
Muchos creerían que sería mucho más fácil dejar a Dean, pero no podía hacerlo, jamás abandonaría a una persona de aquella forma tan cobarde.
El estaba inconsciente desde hace unas horas, demasiado débil como para siquiera abrir sus ojos.
Pero estaba vivo y era lo único que importaba.
Al final habíamos estado ahí mucho tiempo, escondiéndonos en diferentes lugares al anochecer con cuidado de que no nos descubrieran.
Hoy, por fin decidí salir de ese lugar y lo había logrado, pero tenía que seguir corriendo si quería sobrevivir.
Llevaba el celular que había encontrado conmigo, tal vez podría encontrar un lugar con señal y hacer una llamada para salir de toda esta mierda de una vez por todas.
Tenía muy pocas municiones, si me encontraba con alguien en el camino planeaba usar la fuerza de mi cuerpo en su contra si podía, tenía el suficiente entrenamiento como para hacerlo, sin embargo, si nos encontrábamos a todo un grupo armado, probablemente ya no podríamos salir de esa.
La única luz que tenía era la luz de la luna, no veía donde ponía un pie y eso era muy peligroso, podría haber alguna bomba.
Pero si no me arriesgaba moriríamos.
Prefería morir intentando salvar la vida de un compañero que morir escondiéndome.
Además, tenía que cumplir mi promesa con Brooke.
Volvería con ella.
De tan solo pensar en ella me daban ganas de gritar con desesperación.
Ya había sido demasiado tiempo alejado de su lado y por una mierda que la necesitaba. Extrañaba tanto el ver como corría y su cabello se movía con el aire, extrañaba cada facción de su rostro y cada parte de su cuerpo. Extrañaba su sonrisa, el sonido de su voz y la forma en la que me miraba.
Por Dios que necesitaba tenerla conmigo, esa necesidad me estaba consumiendo vivo.
Además, tampoco podía dejar de esa forma a mis amigos, se habían convertido en una parte muy especial para mi.
Y ni hablar de Dylan, conociéndolo terminaría muy mal si no regreso.
Y es ahí cuando comencé a cuestionarme ¿Realmente valía la pena hacer esto?
Porque la verdad ya estaba comenzando a dudar.
No era la primera misión que hacía, pero si era la primera vez que me pasaba esto. Me hacía pensar en el sufrimiento que le causaría a las personas que les importo si yo llegara a faltar en sus vidas.
No quería hacer sufrir a nadie.
Dean se quejó estando en mi espalda haciendo que mi atención se desviara a él, realmente se encontraba muy mal, estoy seguro de que, si no era atendido en estos momentos, moriría.
Había perdido bastante sangre con aquella herida además de que no teníamos agua ni comida.
Miré a mi alrededor y comprobé que nos encontrábamos completamente solos a estas alturas por lo que decidí dejar a Deán en el suelo con mucho cuidado y posteriormente yo también me deje caer en mi lugar.
Tragué saliva en un intento de refrescar mi garganta y tomé el celular entre mis manos sorprendiéndome al notar que había señal.
La emoción me invadió y sonreí abiertamente mientras marcaba el número del Coronel, el cual me sabía de memoria.
Esperé unos segundos a que contestara y cuando finalmente escuché su voz sentí la felicidad recorrer mi cuerpo.
—¿Diga?—Sonreí.
—Coronel, Blake Johnson reportándose.—Contesté con la voz debilitada.
—¡Cadete Johnson!—Exclamó sin poder evitar sonar sorprendido.—¿Cuál es su ubicación? Inmediatamente mandaremos un helicóptero por ti.
—Realmente me he perdido Coronel.
—Esta bien Cadete, rastrearemos el dispositivo, por favor permanezca en el mismo lugar.
Sonreí al escucharlo y asentí con la cabeza como si pudiera verme.
—Aquí estaré Coronel.—Y justo cuando dije eso el saldo del teléfono se acabó.
Solté un suspiro y cerré mis ojos por un momento completamente cansado de la situación.
Pero al menos sabía que estaba más cerca de los nuestros en el lugar donde estaba.
Relamí mis labios resecos y froté mi frente con mis manos tratando de no caer dormido, pues me encontraba ya bastante cansado.
Ahí fue cuando comencé a pensar nuevamente en Brooke y sentí mi cuerpo relajarse en su lugar.
Ahora estaba seguro que volvería con ella y cumpliría mi promesa.
Ya quería besarla, quería tenerla entre mis brazos y jamás soltarla nuevamente, nunca alejarme de ella.
Quería acariciar su suave piel y sentirla junto a mi.
Hacerla mía nuevamente, tenerla abajo de mi gimiendo mi nombre mientras sentía su cuerpo temblar de placer.
Brooke, tan hermosa.
Ya estaré contigo pequeña.
Miré la luna una vez más mientras sentía mis párpados pesados, el cansancio ya me estaba consumiendo y no podía evitarlo.
No podía quedarme dormido, tenía que estar despierto y alerta de cualquier cosa.
Solté un suspiro y lentamente saqué una de las navajas que traía junto a mi.
Fruncí el ceño y como pude me hice un corte en la muñeca causando que el dolor me abriera los ojos de golpe y me senté en mi lugar por inercia.
Solté un quejido de dolor y miré la herida mordiendo mis labios.
—Carajo.—Dije revisando mi mochila y cuando encontré la botella de alcohol lo dejé caer sobre la herida abierta causando que despertara todavía más.
Terminé jadeando en mi lugar y volví a guardar la botella en la mochila, tomé una venda pequeña y cubrí mi muñeca sin tener mucho cuidado.
El dolor me mantendría despierto después de todo.
Justo cuando me puse de pie nuevamente escuché el sonido de un helicóptero acercarse y suspiré aliviado al identificarlo una vez que fue visible.
Lo había logrado.
Sorpresa c:
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Cadete Morgan 2.
Teen FictionSegunda temporada de Cadete Morgan. A d v e r t e n c i a: Contenido explícito [+18] >Lenguaje vulgar. >Actos sexuales. >Violencia verbal. >Violencia física. Etcétera. ©Prohibida su copia o adaptaciones.