Marceline Abadeer:
La besé. Besé a Bonnibel. ¿Porqué lo hice?, la verdad no lo sé, pero simplemente sentí qué debía de hacerlo. Quería besarla y lo hice, y se sintió genial. Nunca había sentido algo tan...Mágico y llenó de paz.Después de besarnos, no hablamos sobre él besó y en parte estaba agradecida por eso, no quería dar explicaciones cuando siento mi menté y mí corazón llenos de emociones qué no sé explicar. Pero nuestra ropa se secó muy rápido y Bonnibel lo guardó todo en su mochila, me quedé con la ropa cómoda qué ella me compró. Ya mañana me pondría mi uniforme de cazadora de demonios.
Bonnibel. Ella hace muchas cosas por mí, cosas qué nunca nadie había hecho, y aunque esto es nuevo para mí, en parte es agradable qué ella se preocupé tanto por mí. Ella pagó por la ropa qué estoy usando, y no es qué no tenga dinero, de hecho si tengo y bastante porqué a los cazadores nos pagan muy bien por eso, ser un cazador dé demonios es un trabajó bien pagado. Pero nunca creí necesario comprar ropa o cosas así para mí, me conformaba sólo con lo qué tenía. Pero ella se tomó la molesta de escogerme ropa y comprarla, un gesto tan simple pero llenó de amabilidad hace qué mi corazón se sienta cálido. Bonnibel definitivamente me está mostrando un mundo nuevo, un mundo llenó de sentimientos buenos y la mayoría de ellos nunca los había sentido hasta ahora, en dónde la soledad y oscuridad se hacen cada vez más pequeños y eso me aterra. Me está haciendo bajar mis defensas y no sé cómo detenerlo...
Regresamos a la aldea y buscábamos un lugar para comer. Algunas chicas me miraban cómo si fuera carne fresca, me miraban con deseó y antes sin dudarlo hubiera tenido sexo con aquellas chicas pero ahora con Bonnibel a mí lado, no quiero hacerlo, no deseó hacerlo y aún no sé porqué siento esto. Es un poco frustrante. Son tantas cosas al mismo tiempo y no sé cómo lidiar con eso. Esas chicas te desnudan con la mirada -Comento Bonnibel con una expresión en él rostro qué no sabía bien cómo definir. ¿Enojada? ¿Triste?. La verdad no supe qué decir así qué simplemente me encogí de hombros mientras seguíamos caminando, llevaba cómo siempre mi katana en la cadera del lado izquierdo, la gente que me miraba sabía perfectamente qué soy una cazadora de demonios por él tipo de espada qué llevó. ¿Haz tenido novio o...novia? -Preguntó Bonnibel con curiosidad caminando a mí lado. No ¿y tú? -Pregunté. Solo tuve un novio hace mucho tiempo se llamaba Bruno. ¿De verdad nunca haz tenido pareja? -Preguntó sorprendida. No, nunca he tenido pareja. Todos estos años he estado ocupada matando demonios y...nunca hubo nadie qué me llamará la atención o me interesará de esa forma -Contesté. Sólo...de vez en cuándo tengo sexo con alguna chica qué no conozco para desahogarme...y nunca más vuelvo a verlas -Dije después de unos segundos de silencio y me arrepentí al ver su expresión, sin duda su rostro reflejaba tristeza y eso causo una punzada de dolor en mí corazón. Oh...entiendo -Susurró. La verdad no supe qué más decir, así qué al llegar al restaurante, comimos en silencio y ella no me miraba. Eso me hizo sentir peor...
Mientras tanto cercas de la casa de los Petrikov...
Marshall Lee Petrikov:
Me quedé más días en casa de mis papás, y la razón es sencilla: Gumball Bubblegum. Aquel chico llamó mucho mi atención, hemos pasado la mayor parte de los días juntos y nunca en toda mí vida había sonreído o reído tanto. Me gusta estar con él y aún no quiero irme para estar más tiempo a su lado. Él día de hoy lo entrenaré yo, durante estas semanas ha tenido un buen progresó en su entrenamiento pero aún le falta mucho para convertirse en cazador dé demonios. Le explicaba un ejercicio qué haría él día dé hoy, pero sentí la mirada dé alguien y me quedé viendo a unos arbustos. ¿Qué sucede? -Preguntó Gumball preocupado. Shhh. No te muevas -Le ordené susurrando y él obedeció. Nos quedamos quietos, agarre mi katana pero sin sacarla de su funda. Sabía perfectamente qué un demonio estaba escondido en los arbustos y pronto saldría a atacar.Todo estaba en silencio durante algunos minutos, él viento sopló un poco fuerte y él demonio salió, haciendo ruidos raros con la saliva cayendo por la comisura de sus labios, sin duda él estaba muriéndose de hambre y quería nuestra sangré cómo aliento. ¡Rrraaaaw! ¡Mueran todos! ¡Deseó tanto beber su sangreeeeeee! -Gritó él demonio. Desenvaine mi katana, él vino hacía mí muy rápido y esquivó mí ataqué. Para derrotarlo más rápido y fácil tengo qué usar mí elemento especial.
Me concentre y respiré profundamente. Esperé y obtuve una oportunidad de atacar. ¡Flama espiral! -Dije con voz firme activando uno de mis poderes de fuego. Inmediatamente mi katana salió fuego y di una pirueta, en él procesó corte su cabeza fácilmente. Guarde mi katana y volteé a ver a Gumball, tenía una expresión de sorprendido y emocionado al mismo tiempo. ¡Wow! ¡Marshall, eso fue...eso fue bastante impresionante! ¡¿Cómo hiciste eso?! ¡De tú espada salió fuego y...Guau, de verdad fue impresionante! -Dijo emocionado, fruncí él ceño y caminé hacía él. ¿Mi papá no te explicó sobre los elementos especiales? -Pregunté. No -Respondió rascándose la barbilla, ahora lucia un poco tímido. Vaya, ¿Pero qué le sucede al viejo? Se supone qué debió explicártelo desde él principió. Es muy importante -Murmure quejándome de papá. Ahora tendría qué explicarle bien y a detalle a Gumball sobre los elementos. ¿Qué son los elementos especiales? -Preguntó Gumball y suspiré. Sentémonos...te lo explicaré todo -El asintió, nos sentamos frente a frente en él pasto con las piernas cruzadas, él viento soplo una fresca brisa y el sol brillaba intensamente. Pues, verás...
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Bᴇᴀᴜᴛʏ ʙᴇʜɪɴᴅ ᴛʜᴇ ᴍᴀᴅɴᴇss [Bᴜʙʙʟɪɴᴇ] (AU)
Hayran KurguLa solitaria Marceline Abadeer una cazadora de demonios salva a los hermanos Bubblegum: Gumball & Bonnibel, lastimosamente sus padres murieron a manos del demonio, y ahora emprenderán un viaje en dónde Abadeer cuidará a los hermanos mientras continú...