Capítulo 45. Karsh e Illeana

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La policía llegó al Puente de Queensboro, y de inmediato ayudaron a evacuar a las pocas personas que quedaban, ya que la mayoría había huído en cuanto se escuchó la noticia, y claro, Goldar no tardó en llegar, y en ese momento, el puente estaba completamente vació, habían dos perimetros en ambos extremos, donde los policías evitaban la salida o la entrada de algo más; los medios no habían tardado en llegar, y había helicópteros rodeando el lugar, sin embargo, aparte de eso, no se escuchaba ningún ruido, las personas estaban a la expectativa, el capitán de la policía tenía orden de no hacer nada hasta que llegaran los Rangers; el FBI también había llegado y estaba en ambos perímetros esperando la orden.

Goldar estaba en la mitad del puente, y de una soga, en la parte de encima del puente, estaba Illeana atada prácticamente colgando, ésta ya había despertado y no se había encontrado con un ambiente muy alentador.

-Si ya te derrotaron una vez ¿Por qué esperas que sea diferente?- preguntó Illeana ya cansada de estar ahí en completo silencio, pero Goldar rió en respuesta.

-Si ya viste morir a los Rangers una vez ¿Por qué esperas que esta vez logren salir con vida?- Illeana no dijo nada, solo bufó con fastidio, ese simio era insoportable.

En el perímetro de barrio Long Island City en el borough de Queens, estaban Sandy y los demás, solo esperando la orden, a pesar de que ellos ya habían sido asignados a "casos normales" hoy les pidieron que fueran a ayudar en caso de ser necesario, pero sin armas, ellos sentían que no eran de mucha ayuda, aún así, estaban esperando.

-¿Por qué creen que tardan tanto?- preguntó George con preocupación.

-Tal vez no van a venir- respondió Hailey, y los demás prefirieron ignorarla.

-Qué más quisieras rubia- esa voz llamó la atención de todos, quienes se giraron y vieron a los Rangers atravesar el perímetro hasta la entrada del puente.

-¿Por qué tardaron tanto?- preguntó Hailey nuevamente con reproche, ganándose la atención de todos, incluyendo a los Rangers, quienes al final solo la ignoraron y esperaron que Mark y los agentes también atravesaran el perímetro hasta encontrarse con el capitán.

En cuanto Mark llegó, los Rangers le hicieron una seña, y sin más entraron al puente. Mark por otro lado miró al capitán y a sus amigos.

-Me da gusto verlos- dijo Mark sonriendo.

-A nosotros igual jefe, ya veo que su amistad con los Rangers se fortalece- respondió Sandy bromeando.

-Algo así, muy bien, escúchenme, ellos me dijeron que iban a hacer, necesitamos a los bomberos-

De vuelta con Goldar, este se encontraba esperando pacientemente, le encantaban estos espectáculos, pero la verdad se estaba aburriendo.

-¿Qué pasa Goldar? ¿Te aburres?- al oír esa voz, Goldar e Illeana, bajaron la vista.

-Mira nada más, ¡Karsh! me alegra que te unieras a la fiesta ¿Los Rangers te enviaron?- Karsh suspiró con fastidio, odiaba a ese simio.

-Algo así ¿Qué pasa? ¿Prefieres esconderte ahí arriba?- Goldar rió mientras lo miraba con superioridad.

-Te diré lo mismo que le dije a Illeana, ustedes pueden ser todo lo sabios que crean, pero no tienen la fortaleza física para enfrentarme- Karsh iba a responder, pero otra voz se le adelantó.

-Cierto, entonces ¿Qué hay de nosotros?- los tres miraron en esa dirección, y vieron a los Rangers parados tras Karsh.

-¡Por fin! ya me estaba aburriendo-

-Lo lamentamos simio inmundo, pero estábamos ocupados- agregó Elena mientras miraba a Illeana, honestamente no esperaban que la pusiera allá arriba, pero qué más podían esperar.

POWER RANGERS: BeginningDonde viven las historias. Descúbrelo ahora