—No confundas amistad con amor, es lo más triste que existe...Anne:
El rostro de Zach estaba rojo, su piel era tan blanca que el golpe de Aarón le había dado un tono rojizo a su tez.
—¿Estás bien?—Pregunto el sosteniendo mi mano que le curaba las heridas y observándome directo a los ojos.
—Eso debería preguntarlo yo, tú eres el golpeado.—Respondí con una sonrisa gentil.
—¿Me veo muy mal?—Pregunto como un niño con la ropa puesta por obligación.
—No, sigues guapo, tontín.—Le respondí mientras le tocaba la mejilla.
—¿Puedo preguntarte algo?
—Obvio, bueno, mientras no sea de Aarón. No quiero hablar de él.—Respondí.
—No es sobre Aarón.
—¿Entonces?
—¿Beso bien?—Pregunto seguido de una expresión súper cómica, hizo un puchero pequeño pero visible.
La pregunta me tomo de sorpresa.
—Pues… yo…—Intente responder pero inevitablemente me puse híper nerviosa.
Siii, besaba súper bien.
Pero yo no lo veía como más que un amigo.
Era un chico muy guapo, gentil, despertaba gran curiosidad en mí pero Aarón no salía de mi mente.
Aunque si lo pensaba bien, nunca lo iba a olvidar si no salía con otro chico.
Y Zach era una buenísima opción para olvidar a ese idiota, además de ser extremadamente guapo y con un cuerpo de dios pues tenía esa cara, ¿Saben? De esos que nosotras aunque no lo hemos visto en acción, sabemos, estamos seguras de que es buenísimo a la hora de la intimidad.
—Ah, entiendo tu silencio, ya se. No tuviste tiempo de disfrutar del beso. Okey.—Dijo y antes de poder reaccionar sus labios ya estaban plasmados junto a los míos.
Siiiii, ay, si que besaba biennn.
Era un beso tan profundo, dulce, tierno pero con las dosis exactas de salvajismo y erotismo.
El roce de nuestros labios, el jugueteo de nuestras lenguas.
Nos extendimos en aquel beso porque definitivamente ambos lo queríamos, ambos lo estábamos disfrutando.
De pronto sentí un leve sonido, el sonido de unas llaves cayendo al suelo, fue leve pero ambos nos separamos y allí la encontré con los ojos abiertos extremadamente frente a nosotros:
Alice.
—Ali…—Emití separándome de Zach.—Hola. ¿Cómo has entrado?
Ella nos observaba boquiabierta, no entendía su desconcierto, si, se que para alguien enamorada perdidamente de Aarón iba rápido besándome con otro pero Alice me hubiese entendido, Aarón era un idiota y mientras más rápido lo olvidara mejor.
A ella le pasaba otra cosa.
—Yo… el… el me dio las llaves, me coqueteo y me dio las llaves de su depa.—Confeso.
Yo observe a Zach como si acabara de descubrir que era un completo idiota, mí mirada expreso un:
Todos los hombres son iguales.
—¿Qué?—Emitió Zach, quien parecía tan confuso como nosotras.—Yo no te coquetee.
—Esperen, esperen, esperen. Me van a volver loca. ¿El te coqueteo?—Pregunte para Alice.— ¿Le coqueteaste para luego coquetearme a mi?—Pregunte a Zach.
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Tu Secreto En Mis Manos ©
Teen FictionElla guarda un secreto. Ellos muchos. Ashley Afflets es una chica que oculta más de lo que a simple vista puede parecer. Aarón Hunder es un chico popular peligroso, guapo, astuto, amante del peligro y genio a la hora de descubrir secretos. Zach Mill...