🔼 31. RECUÉRDAME 🔽

661 154 31
                                    

Ricker

Los días pasaban y seguíamos sin saber nada de Casey ni de Lucy. Todos investigábamos y buscábamos a nuestra manera, por las tardes nos reuníamos en la mansión y nos manteníamos al tanto, siempre sin la presencia de Ronni. Durante los últimos días lo he estado observando y puedo ver que Hanna tenía razón y él actúa extraño: se la pasa todo el día afuera y vuelve en la madrugada y en ocasiones no regresa. A pesar de que él quiera entrar en nuestras conversaciones y que parezca estar desbastado con la situación, creo que todo es una farsa.

Hemos puesto vigilancia en las fronteras del país para que Eduardo no pueda llevárselas. Sin embargo, todo ha seguido igual, sin ninguna señal de ellas.

Mientras escuchaba las noticias que nos tenían los oficiales, mi celular comenzó a sonar, yo lo saque esperando a que fuera alguna novedad de Casey, pero, era un número desconocido.

—¿Quién es? —pregunta Axel, mientras los demás ponen su mirada en mí.

—Número desconocido —digo antes de contestar la llamada.

—Ricker...


***

Casey

Hablo Ronni con un distorsionador de voz.

—Eres tú... —contesto Ricker y mis ojos se llenaron de lágrimas al escuchar su voz.

Ronni tenía la llamada en alta voz y pude escuchar como mis amigas sollozaron y como Halsey grito:

—¡DEVUÉLVEME A MI HIJA Y A MI AMIGA, IMBÉCIL!

—¿Dónde la tienes infeliz? —susurro Ricker, tenso.

—Necesito un millón de pesos mañana antes del amanecer, en el parque del sueño, ponlos en el árbol central y no llames a nadie, solo tú, Ricker.

—Déjame escuchar a Casey —dijo mi chico invisible y Ronni me dio una mirada de advertencia.

Yo lo miré con súplica, esperando que Ronni me permitiera hablar con él.

—Solo un minuto —Ronni se acercó a mí, mientras sacaba de su bolsillo una jeringa con sedante. Antes de colocar el celular sobre mi oído, él se acercó a susurrarme: —. Cuidado con tus palabras, estrellita.

Yo asentí y él me quito el paliacate de la boca.

—Ricker... —dije con la respiración acelerada.

Mis latidos estaban inestables y necesitaba decirle en dónde me encontraba sin que Ronni se percatara.

Ricker se quedó en silencio mientras mis amigas sollozaban.

—Quiero que...

—¿Cómo estás, Casey? —me interrumpió él, con la voz quebrada.

—Estoy bien... Ricker. Quiero que cada vez que pienses en mí, me recuerdes feliz, así como en la foto que te mostré en el cuarto de Alannis, la que guarde en el baúl ¿La recuerdas? Quiero que vayas por ella y la conserves, tiene una dedicatoria en la parte de atrás, te amo y...

—Se acabó el tiempo —dice Ronni alejando el celular de mí, pero yo no puedo quedarme callada y grito:

—¡Ronni es el ángel...!

—¡Cállate! —jala mi cabello y golpea mi frente contra la pared.

Yo me quejo y caigo a la cama mientras lloro.

***

Ricker

Contesto la llamada poniéndola en alta voz.

ÁNGEL OSCURO ¿Quién eres en realidad? ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora