🔼 26. AYUDA 🔽

678 147 14
                                    

NOTA: Esta canción también me gustó para la escena ✨

Disfruta del capítulo ❤️
...

Me quedo sentada sobre el colchón, viendo a un punto fijo en la pared y forzando a mi memoria recordar, necesito recordarlo todo, quiero conocer mi pasado y saber a qué me enfrento. Sé que el ángel oscuro es peligroso, pero Ángel no... si lograra tocar una parte de él podría convencerlo de cambiar las cosas.

Veo que la puerta se abre y entra él.

—No volverás a intentar escapar como ayer —dice distorsionado y acercándose a mí.

—No quiero seguir aquí, contigo —digo y él comienza a reír.

—Te acostumbrarás, cuando tenga lo que necesito nos iremos del país y comenzaremos de nuevo.

—¿Qué? —frunzo las cejas y me levanto del colchón—. Yo no iré a ningún lado contigo. Ángel, por favor, arrepiéntete y entrégate a la policía, no es tarde, tú aún puedes...

—¡¿Y qué nos vuelvan a separar?! ¡No estrellita! No haré eso —da un paso hacia mí.

—Por favor, no ganas nada con esto, ya para con tu juego y... —Ángel, rápidamente, sube su mano hasta mi cuello y hace presión.

—¡Esto no es ningún juego! Es la realidad, Casey.

Asiento con la cabeza y él me suelta. Los dos nos quedamos en silencio, yo parada en el mismo sitio y él se da media vuelta sacudiéndose el cabello.

—Necesito ducharme —susurro.

Necesito salir de aquí a cualquier costo.

—Si intentas escapar Casey, no solo te daré sedante —me amenaza y yo asiento con la cabeza—. Sígueme.

Camina hacia la salida y yo lo sigo, antes de abrir la puerta él toma mi mano y sale conmigo. Esta vez, veo claramente el pasillo que conduce a la sala. En él hay otra puerta que también se encuentra cerrada con candado. ¿Qué habrá ahí?

Subimos las escaleras y me guía hasta llegar al baño del segundo piso.

—Entra, yo esperaré aquí —dice antes de meterme al baño y cerrar la puerta con llave.

Observo a mi alrededor y veo que hay una ventana, sin embargo, descarto la idea de escapar por ahí, ya que la ventana se encuentra ubicada a varios metros de altura. Sigo viendo y buscando entre los estantes algo que pueda servirme como defensa; veo medicamentos, cosas de primeros auxilios, productos de limpieza... Nada me sirve.

—Tienes cinco minutos —me apresura desde afuera.

Tomo una gran bocanada de aire y sin más que hacer, tomo la ducha. El agua está helada, pero eso es lo que menos me importa en estos momentos.

¡Quiero salir de aquí!

Cuando termino de ducharme, salgo del baño y él me toma del brazo para llevarme nuevamente al sótano. Cuando estamos bajando las escaleras, me detengo y él voltea a verme, molesto.

—¡¿Qué haces?!

—Ángel, por favor, déjame ir y olvidémonos de esto, ¿sí? —trato de distraerlo. Él, tras escucharme, vuelve a reír.

—Mejor acostúmbrate a esto, estrellita, que nuestro futuro siempre será así, solo nosotros dos.

—Estás enfermo, Eduardo —niego y hago una mueca de dolor al sentir como entierra sus uñas en mi brazo.

—Yo no soy Eduardo, Casey.

Niego con la cabeza y enojada le digo:

—¡Vete al infierno, ángel oscuro!

Lo empujo y él tropieza y cae por las escaleras. Bajo corriendo rápidamente y salgo de la mansión, volteo hacia atrás y veo como me persigue.

¡Por favor! ¡Por favor! ¡Necesito salir de aquí!

Llego al jardín y sigo corriendo para salir por la misma puerta de ayer, llego hasta a ella y comienzo a escalarla, pero cuando cruzo un pie al otro lado, siento un jalón en mi otro pie.

—¡Ven aquí! —grita, molesto.

Muevo mi pie e intento patearlo para que me suelte, logro hacerlo y salto al otro lado de la reja. Sin embargo, al caer me lastimo el pie, pero no me detengo y continúo corriendo lo más que puedo.

—¡VEN! —grita tras de mí.

Corro por el bosque y al ver a una persona cerca, mi ser se llena de esperanza.

—¡AYUDA! —grito desesperada—. ¡AYÚDAME! —el joven pelirrojo voltea hacia mí— ¡Ayúdame por favor! —digo al llegar a él y viendo hacia atrás—. Llama a la policía y dile que aquí está...

—¿Qué te pasa? ¿Estás bien? —dice el turista de ojos color miel, está confundido y preocupado. Su acento de voz me indica que no habla bien el idioma—. ¿Qué llame a quién?

—¡Tu celular! —insisto y veo hacia atrás con la esperanza de que el ángel oscuro me haya perdido de vista.

—¿Mi celular? —pregunta con las cejas fruncidas.

—¡Sí, por favor! —suplico desesperada.

El chico asiente con la cabeza y busca su celular dentro de su mochila, cuando lo encuentra me lo entrega y comienzo a marcar el número de la policía de Conodo. Me llevo el celular al oído y cuando cogen el teléfono, siento como algo presiona mi nuca y escucho el seguro de una pistola ser retirado.

Me pongo pálida y sudor frío baja por mi frente.

—Devuélvele el celular al joven, estrellita —Ángel hace presión sobre mi nuca y yo, sin otra alternativa, obedezco.

Le entrego el celular al pelirrojo y él, confundido, lo toma y nos ve con una expresión asustada.

—Por favor, Ángel, no hagas nada —susurro agitada y poniendo las manos en el aire.

—Esto —susurra y se acerca a mi oído—. Tú lo provocaste, estrellita —sin darme tiempo de reaccionar, desvía la pistola de mi nuca a la frente del chico y le dispara.

—¡NO! —grito y caigo al suelo de rodillas, cubro mi boca con mis manos y comienzo a llorar. ¡Ese hombre no tenía la culpa de nada!

—Y el siguiente será Halsey, después Hanna, Ricker... te dije que, si intentabas escapar de nuevo, sedante no sería lo único que te pondría.

Lloro en silencio sin dejar de ver el cuerpo del chico, él solo intentaba ayudarme...

***

Regresamos al sótano y él me empuja haciendo que caiga sobre el colchón.

—Ahora te bañarás aquí mismo, porque ya no volverás a salir.

—¡Asesino! —grito llorando.

—Tú me obligaste a hacerlo. Pobre joven... él no tenía la culpa, ¿cierto Casey?

Lloro mientras cubro mis sollozos con mi mano y cierro los ojos con fuerza deseando despertar de esta pesadilla.

—Ahora descansa —lo escucho acercarse a mí. Abro los ojos y me alejo de él al ver que saca la misma jeringa.

—No... —susurro y trato de escapar, pero él me jala el pie y me inyecta el contenido en la pierna.

Abro la boca, pero ningún grito sale de ella, cierro mis ojos con fuerza esperando a que los efectos pasen y termine inconsciente.

🔺🔻🔺🔻🔺🔻🔺🔻🔺🔻🔺🔻🔺

NOTA DE AUTORA:

Espero que te haya gustado el capítulo y hayas sentido esa adrenalina de no ser atrapada por el ángel oscuro.

No olvides votar y comentar ❤️

¡El siguientecapítulo se actualiza esta noche!

ÁNGEL OSCURO ¿Quién eres en realidad? ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora