Ipsa Natura Rei - NamJin [ Terminada ]

Capítulo 28: Gimnasio (Seokjin)

Me había pasado la mañana en el gimnasio, esforzándome tanto que mi instructor me preguntó si acaso estaba huyendo de algo.

– ¿Qué dices? –pregunté riendo.

– Cada vez que te he visto correr así de fuerte es porque estás dándole vueltas a algo.

– No es cierto –le espeté entre risas, pero sabía que tenía razón, muchísima razón.

Habían pasado tres días desde que me había ido totalmente estupefacto de la universidad, días donde le había dado vueltas a la frase una y otra vez, lamentando no haberlas grabado en mi teléfono a pesar de que recordaba exactamente cada una de las palabras que me había dicho.

"Tú. Desde el principio eras el único que llamaba mi atención... pero jamás pensé que tendría un vínculo contigo y no quería hacerme ilusiones."

Las palabras decían tan poco y a la vez tanto que no sabía cómo tomarlas.

Un vínculo podía significar cualquier cosa, ¿Verdad? También podía llamarse vínculo a una amistad, a la camaradería e incluso a alguien que es poco más que tu compañero de universidad, así que no debía darle tantas vueltas a eso, ¿No es así? Al fin y al cabo yo no parecía gustarle a la gente lo suficiente como para que quisieran vincularse románticamente conmigo.

De tanto dar vueltas a sus palabras, corrí hasta que la máquina se detuvo por sí misma una hora después. Había perdido la noción del tiempo, así que para cuando llegué a la oficina estaba tan agitado que lo primero que hice fue sentarme en mi silla y descansar la cabeza en su respaldo, intentando recuperar el aliento. Como el sentido de la oportunidad es obvio, Namjoon entró en ese momento.

– ¿Estás bien? Luces... sudado –frunció el ceño y se acercó a tomarme la temperatura. Quité su mano con la mía y entrelacé nuestros dedos, queriendo probar algo. ¿El qué? No tenía idea.

– Me siento mejor que nunca. ¿Cómo estás tú?

– Bien. Fue un buen fin de semana.

No soltó mi mano, por el contrario, aprovechó para apoyarse sobre el borde de mi escritorio con una sonrisa que desaparecía sus ojos y marcaba sus hoyuelos.

Solté nuestras manos y me levanté apurado.

– Eso es bueno. Nos quedan muchas horas trabajando aún y luego debemos ir a la universidad –dije, levantándome para mirarme al espejo que tenía en la oficina, dándole la espalda mientras me acomodaba innecesariamente la corbata para disimular el ataque de pánico que me embargaba. Tal vez él no era tan indiferente como yo creía... y eso ciertamente me aterraba.

🐨♥️🐹