Él lo estaba intentando. Estaba intentando matarme. Incrédulo recorrí su cuerpo con mis dedos hasta encontrarme con su entrada, sintiendo la viscosidad del lubricante.
Jadeé en respuesta y vi como se encogió ligeramente avergonzado mientras una sonrisa orgullosa se hacía paso discretamente en su rostro.
– Tú... –"lo que planeas es matarme..."
No terminé la frase pues sabía que estaba volviéndome repetitivo, pero realmente mi corazón había dado un vuelco. Introduje uno de mis dedos, el que se deslizaba con facilidad dentro y fuera (pues aparentemente había aplicado lubricante) y luego un segundo, siguiendo los consejos que mi hermano me había dado. Quería que fuera perfecto, ni un ápice de dolor o incomodidad para él.
No fue difícil encontrar el punto del que me había hablado, no sólo por la diferencia de textura que tenía, sino por el jadeo desvergonzado que escapó de su garganta, así que me aseguré de acariciarlo a cada movimiento mientras mi mirada estaba clavada en él, en su rostro.
Arte.
Él era la obra de arte más preciosa que había visto.
El sonrojo cubriendo su cuello y pecho, la ligera capa de sudor, su expresión extasiada y los gemidos acallados que escapaban de su boca. Seokjin era el espectáculo más bonito que había presenciado en mi vida y estaba fascinado sólo observándolo.
– Más –susurró y no pude negarme. Un tercer dedo ingresó con cuidado de no lastimarlo, asegurándome de que realmente estuviese listo– Por favor, Namie, quiero sentirte –masculló entre dientes y no pude negarme más.
Retiré mis dedos de su interior para acercarme a su boca y besarlo, lento, recorriendo su boca mientras me reacomodaba sobre él, buscando la posición perfecta para unirnos.
Me aseguré de hacerlo lento, de ingresar con suavidad hasta haberme adentrado en su totalidad y me quedé quieto, pendiente sólo de sus reacciones mientras se acostumbraba, besándolo para distraerme de la impresión caliente y apretada que podría llevarme a la perdición demasiado rápido.
Él fue el primero en moverse, clavando sus tobillos en mis muslos para instarme a que iniciase el vaivén. Primero lento, probando nuestros límites, descubriendo poco a poco las sensaciones nuevas, aprendiendo del otro hasta que no fuimos más que una masa de gemidos, sudor y besos desordenados.
– Estoy tan cerca –susurró en mi oído, sin ningún ápice de vergüenza en su voz y decidí ayudarlo, colando mi mano entre nuestros cuerpos para estimularlo más, hasta que su cuerpo entero se contoneó y soltó un grito ahogado, derramándose sobre nuestras barrigas. No pasó demasiado tiempo hasta que yo también me dejara ir, jadeando en busca de aire mientras besaba sus clavículas antes de dejarme caer a su lado, atrayéndolo en un abrazo.
– Te quiero, Jin –susurré, dándole un último beso antes de que ambos cayéramos dormidos.
🐨♥️🐹
"'Los videojuegos sólo son una pérdida de tiempo', o eso es lo que sus padres solían repetirle todo el tiempo, pero Kim Namjoon sabe que no es así, que son un universo para aprender de mitología, para desarrollar la concentración, para desconectarte del mundo y, más importante, hacer amigos.
Cuando Namjoon invita a un nuevo jugador a su grupo, sólo planea divertirse un poco en su compañía, no desarrollar sentimientos por él. ¿Qué hará con ellos cuando descubra que su pareja destinada no es nada más y nada menos que Kim Seokjin, el famoso actor?"
Como ya les había comentado, tengo una nueva historia (omegaverse) que espero terminar muy pronto y empezar a subirla a esta plataforma. Su nombre es Lejindary Heroes y esta es su sinopsis. ¿Qué les parece? ¿Les gusta?
Probablemente suba el primer capítulo de esta historia antes del epílogo de Ipsa Natura Rei... que lamento decirles que es el capítulo que se viene este miércoles, pues ya llegamos al final.
ESTÁS LEYENDO
Ipsa Natura Rei - NamJin [ Terminada ]
RomansaIpsa Natura Rei, la misma naturaleza de las cosas. Namjoon es un estudiante becado para el master de Derecho Internacional en una universidad londinense y sería el único coreano de la universidad si no fuera porque comparte clases con Kim Seokjin. J...