—¡No! —grito sollozando mientras paso las manos por mi rostro. —Alex, por favor, no. Ethan es mi hermano. —Me pongo de pie y lo abrazo.
—¿He dicho que te levantes? —espeta molesto, niego con la cabeza. —¡De rodillas! —grita enfurecido; sus ojos están de color carmesí.
Lloro y me dejo caer al piso, siento como las lágrimas caen por mis mejillas.
—Alex, por favor. No —sollozo con desesperación.
—Alexia — se coloca en cuclillas y toma mi barbilla para que lo mire a los ojos —, te voy a enseñar a no desobedecerme —sonríe divertido.
Siento que moriré en cualquier momento, esto... no es justo, por mi culpa Ethan está en peligro.
Me encuentro de rodillas al frente del vampiro que mandó a asesinar a mi hermano, si lo matan, quizás yo también muera... No soportaría nada, no soportaría ese cargo de conciencia,
Ethan es mi hermano, no... he podido disfrutar de él como debería ser; y ahora debe estar muerto.
—Alex, si esos vampiros matan a Ethan, ten por seguro que tendrás que matarme a mí también; porque nada volverá a ser igual —hago una pausa y respiro —, te haré la vida imposible, hasta que te canses de mí —digo con rabia.
—Ay, Alexia, tú no me amenazas. —Coge mi cabello con brusquedad haciendo que me ponga de pie.
En ese momento llegaron unos vampiros.
—Señor Owens, el líder de los cazadores escapó —dice con temor.
—Bien. —Me hala por la mano y bajamos unas escaleras, sólo he caminado por aquí y fue cuando vine a ver a mi hermano. Cuando llegamos abajo, me arrastra por un pasillo que lleva al sótano.
No... Esto no anda bien.
—Alex, ¿adónde me llevas? —pregunto nerviosa.
—Te enseñaré a no desobedecerme. Me las pagarás. —Llegamos a una habitación oscura, muy sucia.
Hay unas cadenas y varias cosas, también una cama asquerosa. Creo que vomitaré por tanta suciedad; Alex me empuja hacia el interior de la habitación.
Se acerca a mí y retrocedo hasta chocar con la pared. Él coloca una de sus manos en mi cintura.
—No me gusta estar aquí.
—Alexia, ¿por qué las cosas contigo son tan difíciles?, ¿por qué siempre me das problemas? —pasa su dedo pulgar por mi mejilla y luego por mis labios.
—Ethan es mi hermano —murmuro bajando la mirada, sé que esto acabará mal.
—No debiste hacerlo —guardo silencio. —Mírame cuando te hablo —habla con autoridad, así que lo hago. —No quiero hacerte daño... pero tú te lo buscas. Me obligas a hacerlo. —Pasa su nariz por mi mejilla.
ESTÁS LEYENDO
Oscura obsesión |COMPLETA|
Vampire-Hola, preciosa. Al fin te encontré -habla mirándome de arriba abajo con media sonrisa. -Qui... ¿quién eres? -mi voz sale temblorosa. -Tu dueño -dice con una sonrisa divertida, lo cual hace que un escalofrío pase por toda mi columna vertebral. Pero...